Reciclaje, una actividad clave para reintegrar materiales a un nuevo ciclo de vida.
Desde que nos levantamos hasta que nos dormimos estamos consumiendo algún producto o servicio para nuestra supervivencia, bienestar o productividad; sin embargo, ¿se está haciendo de forma responsable? ¿Qué estamos haciendo con los productos que ya no se utilizan?
Como consumidores que somos, debemos aprender a consumir de forma responsable y también entender cuál debe ser el manejo de los residuos y de los materiales. Aunque muchas veces es difícil reemplazar ciertas prácticas, sí es posible crear hábitos más sustentables y amigables con el medio ambiente que permitan satisfacer las necesidades del presente sin comprometer las de futuras generaciones.
En Vida Circular, de la mano de expertos, explicamos qué pasa con los productos después de que son consumidos y cómo lograr tener mejores prácticas.
Al hablar de productos post-consumo nos referimos a todos aquellos residuos que provienen de hogares, oficina, eventos, centros comerciales, etc. los cuales, pueden ser empleados como materia prima para la fabricación de un nuevo producto.
De acuerdo con el Diagnóstico Básico para la Gestión Integral de Basura 2020, realizado por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, al día se generan 0.944 kg por habitante y la generación total de residuos en el país se estima en alrededor de 120 mil toneladas al día (t/día). De estos residuos generados se recolectan aproximadamente 100 mil toneladas al día (t/día) para su procesamiento, lo que representa una cobertura a nivel nacional del 84%. El resto de los residuos no logran ser recolectados con la posibilidad de llegar a los ecosistemas naturales.
La mayoría de estos residuos que se recolectan se pueden convertir en diferentes objetos y materia prima post consumo, sin embargo, esto solo se puede conseguir a través de procesos y tratamientos adecuados a partir de un proceso de acopio y de reciclaje. Un ejemplo de ello, son los envases de PET o HDPE, los cuales se pueden reciclar para convertirlos nuevamente en botellas, a partir de procesos de reciclaje.
De acuerdo con especialistas de Vida Circular, la materia prima post-consumo es una oportunidad para reutilizar los residuos y así reincorporarlos a la cadena de valor. El objetivo es generar un círculo virtuoso que impulse un modelo de recuperación y que incremente la demanda de artículos reciclados, disminuyendo de esta manera el impacto ambiental y brindándoles una vida más sustentable a los productos.
Por ello, la iniciativa Vida Circular recomienda a los consumidores los siguientes consejos para aprovechar todos los residuos:
· Tomar conciencia del impacto ambiental que tienen nuestros residuos.
· Elegir productos que sean fácilmente reciclables o que incluyan material reciclado post-consumo.
· Separar residuos desde casa u oficina: PET, HDPE, cartón, vidrio, entre otros materiales.
· Entregar los residuos separados en centros de acopio o a los recolectores que puedan darle un valor post-consumo.
El objetivo de Vida Circular es generar conciencia hacia una vida más sustentable. Todos los materiales tienen ventajas y de nosotros depende aprovecharlas, por tanto, resulta primordial cambiar la manera de cómo nos relacionamos con el planeta.
Visita el sitio oficial en: www.vidacircular.lat