CDMX, tres de marzo de 2022.- La Secretaría de la Función Pública, a través del Órgano Interno de Control del Consejo Nacional de Fomento Educativo (CONAFE), determinó que carecían de sustento las acusaciones por acoso laboral que una exfuncionaria de iniciales RMAR realizó en contra del entonces director del organismo en 2019. Así, quedó evidenciado que los señalamientos de la supuesta víctima fueron totalmente falsos, y formaban parte de un complejo entramado para difamar a Cuauhtémoc Sánchez Osio.
Al Órgano Interno de Control del Conafe fueron canalizadas seis denuncias que RMAR había ingresado ante diversas instancias como son la Secretaría de la Función Pública, la Secretaría de Educación Pública, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres y el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación.
Para dichas instancias, las acusaciones, cuya falsedad hoy se conoce, no significaban violación alguna a sus derechos humanos y en razón de género, por lo que fueron remitidas a la Secretaría de la Función Pública para determinar si existía violación alguna de carácter administrativo. La investigación arrojó que jamás existió maltrato alguno. Todo fue falso.
Pese a ello, la persona que inventó esta acusación denunció penalmente a Sánchez Osio por “tratos crueles, inhumanos y degradantes”. ante la Fiscalía… (FEVIMTRA).
Tras dos años de investigación, la FGR entrevistó a más de 30 testigos, quienes coincidieron en confirmar que jamás existió maltrato alguno hacia la persona de iniciales RMAR. La acusación penal ante la Fiscalía resultó improcedente, por lo que dicha dependencia ha propuesto el no ejercicio de la acción penal en contra de Cuauhtémoc Sánchez Osio. La audiencia para la confirmación de dicha resolución está por ocurrir durante este mismo mes de marzo.
Al respecto, Cuauhtémoc Sácnhez Osio señaló que es lamentable que una persona que siempre recibió un trato respetuoso y elogioso se lanzara dolosamente a realizar acusaciones públicas, administrativas y penales con base en mentiras.
“Lo señalé desde el primer día: todo era mentira. He tenido que soportar, al lado de mi familia, un enorme despliegue mediático de desprestigio durante dos años, basado en un invento. Hubo decenas de publicaciones en mi contra y nadie se preocupó por verificar la verdad”, aseguró el exfuncionario.
“Ahora que conocemos la realidad, nos tendŕiamos que preguntar qué hay detrás de una acusación que que se difundió en medios de comunicación; en la que se utilizó un ejército de abogados para tratar de imputarme violaciones administrativas y penales; y que fue derivada de una mentira absoluta”, concluyó.
