*Concluyó el coloquio dedicado a los efectos de la emergencia en el Estado de México con datos sobre la debilidad de los gobiernos para aprovechar las redes sociales
La pandemia por Covid-19 tomó mal parados a los gobiernos, especialmente los municipales, que respondieron lenta y parcialmente a las debilidades del sistema de salud, la falta de políticas públicas para atender una emergencia y, en general, para informar, difundir y comunicar de manera precisa y amplia aprovechando las redes sociales, especialmente respecto de las medidas de protección, el apoyo al empleo y la atención de necesidades de protección de las mujeres víctimas de violencia de género.
En la segunda y última jornada del II Coloquio «El Estado de México después de la pandemia de Covid-19: efectos y perspectivas», las mesas de trabajo estuvieron dedicadas a analizar los efectos de la emergencia sanitaria en las condiciones laborales y el uso de las redes sociales y a la gestión de la pandemia por parte de los gobiernos municipales.
De acuerdo al orden de exposición, para Judith Pérez Soria, profesora-investigadora de El Colegio Mexiquense, la pandemia agudizó la precarización laboral, recargó la presión en las personas y las familias, y confirmó que a menor ingreso por salario, mayor gasto por enfermedad o defunción.
En tanto, Leticia Contreras Orozco, profesora-investigadora de la UAEMex, los gobiernos subnacionales desaprovecharon la red social Facebook, a pesar de que casi 70% de la población tiene acceso a Internet, de suerte tal que no han logrado establecer su «marca» al limitar la participación ciudadana y restringir el uso de la plataforma a solo medio de información.
Por su parte, Gloria Guadarrama Sánchez, de El Colegio Mexiquense, presentó evidencia de que la pandemia evidenció la debilidad de la agenda municipal de género, pues no se facilitó la interacción e hizo falta una comunicación eficiente, de suerte tal que la emergencia tuvo un peso diferencial que fue mayor para las mujeres, sobre todo en materia de violencia de género.
Cecilia Cadena-Inostroza, también de El Colegio Mexiquense, dijo que la pandemia modificó el funcionamiento de los gobierno y puso en evidencia la falta de coordinación de los gobiernos, además de que, ejemplificó, 39 municipios de la entidad no fueron capaces de ofrecer información en redes sociales y 93 no abordaron nada de la emergencia sanitaria.
Juan Carlos Reyes Paredes, profesor-investigador de Estancias Especializadas Comecyt, habló de la debilidad de las autoridades auxiliares municipales con el caso de Santa Cruz Azcapotzaltongo en Toluca.
Para María Esther Morales Fajardo, del CRIM de la UNAM, y Héctor Fajardo Morales, de la UAEMex, el manejo de la vacunación por parte del gobierno federal fue exitoso y adecuado.
En la conferencia magistral de cierre, Arturo Huicochea Alanís, director general del IAPEM, hizo un análisis pormenorizado de las medidas que aplicó el gobierno del Estado de México para apoyar a la población, y propuso 24 acciones inmediatas para la agenda de la administración pública estatal.
Pablo Mejía Reyes, uno de los dos coordinadores del coloquio y profesor-investigador de la Facultad de Economía, afirmó que la pandemia desnudó una situación con una imagen que no gustó, por evidenciar carencias estructurales, un sistema de salud deficiente y los pendiente del país, como la informalidad y la insuficiencia recaudatoria en todos los niveles, pero el tsunami que arrastró con todo en todo el mundo se quiso contener con «costalitos».
El director de la Facultad de Economía, Alejandro Alanís Chico, hizo la relatoría de ponencias y mesas, así como la clausura del coloquio, y José Antonio Álvarez Lobato, secretario general de El Colegio Mexiquense, se refirió a los cuestionamientos más frecuentes al mundo académico, como la pertinencia de su labor, pero encuentros como el coloquio ponen de manifiesto la utilidad y pertinencia de la investigación para el diseño y aplicación de políticas públicas, argumentó.
Señaló que la pandemia demostró al fragilidad de la sociedad, la vulnerabilidad del sistema de salud, el peligro de las comorbilidades, la insuficiencia en el manejo del riesgo y de la emergencia, puso freno de la actividad económica y produjo paros, desempleo y afectaciones a las familias.
Sin embargo, también mostró la resiliencia de sociedad, instituciones, gobiernos y personas, quienes han aprendido a cambiar y demostró que el teletrabajo es factible, pues baja costos para las empresas, dijo, al tiempo de que hizo un reconocimiento a organizadores, ponentes y personal de apoyo de las instituciones convocantes del coloquio.