- La tortilla de maíz, carne cocinada al vapor, horneada o asada y una guarnición sana, elementos básicos para un taco saludable.
- Se pueden comer diario, a excepción de pastor, carnitas o suadero, que es preferible consumirlos una vez al mes o cada dos meses.
Al ser uno de los platillos que más nos identifica como mexicanos y por ser una de las bases de nuestra gastronomía, los tacos son fundamentales para cualquier familia y se pueden preparar de numerosas maneras, comentó el nutriólogo del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Estado de México Oriente, Francisco Javier Nieva Pérez, quien pidió moderar su consumo y procurar su elaboración con tortillas de maíz y carnes que eviten grasas saturadas.
El especialista adscrito a la Unidad de Medicina Familiar (UMF) No. 77 explicó que la tortilla es el elemento principal para que exista el taco y al estar hecha de maíz aporta calcio y fibra insoluble, a diferencia de la tortilla de harina, con lo que se promueve la correcta digestión de todos los alimentos.
Otra de las bondades de la tortilla, mencionó, es su concentración de fitoquímicos, “que son los pigmentos de origen vegetal que proporcionan color a los alimentos, pero que ya dentro del cuerpo se convierten en antioxidantes que nos ayudan a eliminar los radicales libres que ingresan como el humo del cigarro, la contaminación o el carbón”.
Explicó que otro elemento esencial es la carne que normalmente acompaña a la tortilla y pidió especial atención en elegir la adecuada y su método de cocción: “un taco de pescado -por ejemplo- aporta grasas, omega 3, antioxidantes, hierro y proteínas, pero hay que estar atentos en la manera en la que se cocinan otros tipos de carnes, si es al vapor, horneada o asada, que en estos casos son métodos apropiados y no saturados en grasas como si la estuviéramos confitando, como en el caso de las carnitas o vísceras, porque no todo tiene que ser frito”.
Nieva Pérez también llamó a considerar las guarniciones que se le ponen a los tacos a la hora de comerlos, las cuales pueden dar un mayor aporte nutrimental como el uso de salsas: “éstas contienen hasta el 20% del consumo de los alimentos crudos o verduras que se requieren, por lo que una salsa, un guacamole o un pico de gallo bien utilizados, pueden otorgarnos altos índices de fibras o fitoquímicos los cuáles son vitales para evitar el cáncer”.
Aseguró que los tacos más saludables que se pueden consumir son los tacos de frijol o de verduras, ya que al mezclar un cereal más una leguminosa se forma una proteína de alto valor biológico. Lo mismo pasa con las tacos de zetas o de verduras como la zanahoria, pero también deben de ir acompañados de una cantidad generosa de otras verduras, de preferencia salteadas.
El promedio de consumo de tacos para un adulto puede ser de 6 a 7 al día y de tortilla de tamaño normal y no dobles, acompañados de 15 gramos de carne de preferencia que sea cocinada al vapor, horneada o asada. Los tacos se pueden comer diario a excepción de los de pastor, carnitas o suadero, que es preferible consumirlos una vez al mes o cada dos meses, sentenció.
