La líder de las mujeres del Partido del Trabajo en Tlalnepantla de Baz alza la voz contra el condicionamiento del Salario Rosa que hacen funcionarios del gobierno del Estado de México para favorecer al PRI y evitar que las mujeres se organicen y participen en otras expresiones políticas.
TLALNEPANTLA, Méx.- Es indignante y un posible acto de violencia política de género el condicionamiento del Salario Rosa para evitar que las mujeres mexiquenses participen y se organicen en otras expresiones políticas diferentes al PRI, alertó Mónica Cruz Jiménez.
En conferencia de prensa, la coordinadora municipal de mujeres del Partido del Trabajo afirmó que las mujeres mexiquenses son utilizadas y sobajadas, pues limitan su libertad de elección política, al condicionarles que no se reúnan con representantes populares de otros partidos diferentes al PRI o les quitarán el beneficio del programa Salario Rosa.
“En cada visita que hago a las comunidades de Tlalnepantla, la queja es la misma: las amenazas de operadores del PRI y del gobierno estatal para que las mujeres no se reúnan ni apoyen a representantes populares de otros partidos, eso impide que las mujeres hagan su trabajo de gestión social, su activismo comunitario de solicitar mejoras a su comunidad como el alumbrado público, el bacheo de calles, la seguridad pública y mejores espacios para el deporte y la recreación”, lamentó Mónica Cruz.
La lider de las mujeres del PT Tlalnepantla, recordó que el Órgano Superior de Fiscalización del Estado de México recomendó a la Cámara de Diputados del Estado de México que en la fiscalización de 2021 se incluyan auditorías de cumplimiento financiero y de desempeño al programa Salario Rosa.
“El OSFEM documentó observaciones por más de dos mil 669 millones de pesos, debido a la falta de documentación que compruebe y justifique las acciones realizadas para la recaudación y aplicación de los recursos. También se ha observado el registro contable y presupuestal por los reintegros de los intereses ganados por el manejo de esos recursos. El OSFEM ha documentado que hasta un 69 por ciento de las mujeres empadronadas, no se encuentran en las llamadas zonas de atención prioritaria como lo exigen las reglas de operación de ese programa social”, detalló Mónica Cruz.
“Es evidente que el Salario Rosa no se usa para beneficiar a quien más lo necesita, el PRI lo usa para condicionar la participación política de la mujer y a cambio de no quitarle el Salario Rosa se le impide organizarse políticamente, eso debe parar, en el PT exigimos un alto al uso político/electoral de los programas sociales en el Estado de México”, concluyó Mónica Cruz Jiménez.