¿Censura?

En fechas recientes la Guardia Nacional ha causado mucha controversia, y es que la aprobación de la reforma del presidente, Andrés Manuel López Obrador para que esta forme parte de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) ha generado mucha discusión, pues es visto como un movimiento político que militariza al país en favor del presidente. Ahora, el tema no termina ahí pues en las Cámaras se discute la propuesta de mantener a la Guardia Nacional en las calles hasta el 2028, y como es de esperarse el tema va y viene entre dimes y diretes y mentadas de madre.

Sin embargo, un aspecto que llamó mucho mi atención es que en sus redes sociales -especialmente Twitter que es una plataforma que se ha enfocado más al acontecer político y noticioso-, la Guardia Nacional publicó una serie de “recomendaciones” para el uso de redes sociales a las cuales tituló “La ciudadanía digital es tarea de todas y todos” acompañado por un texto que en resumen dice que “es importante cuidar la información que compartimos para no vulnerar la seguridad de otras personas”. En la imagen se pueden leer tres recomendaciones que en pocas palabras “aconsejan” analizar si lo que se publica afecta a alguien, no faltar al respeto y la que más ha generado polémica: “Recuerda que tus acciones en el mundo virtual pueden tener consecuencias en la vida real”.

Varios comunicadores, columnistas, escritores y en general críticos de la administración de AMLO han levantado la voz al respecto. Y es que esta publicación fue percibida por muchos, como una amenaza a la libertad de expresión, ya que la Guardia Nacional no tiene competencia sobre lo que se publica o no en redes sociales; de hecho ese fue el argumento de la politóloga Denise Dresser quién señaló que la publicación amenaza la libertad de expresión con un pronunciamiento sobre redes sociales que no le corresponde. Y no fue la única, el comunicador Víctor Trujillo también levantó la voz diciendo que lanzar mensajes de sana convivencia con un fusil en la mano nunca es buen presagio, y así varios comunicadores, politólogos, influencers y más se unieron con advertencias similares. Lo que provocó que muchos usuarios de Twitter consideraran la publicación como un método de censura por parte de la institución.

Sin duda, sus argumentos no son del todo descabellados, pues no debemos olvidar que la libertad de pensamiento y expresión es un derecho universal para buscar, recibir y difundir informaciones e ideas de forma oral, escrita o a través de las nuevas tecnologías de la información, y tampoco podemos pasar por alto el momento que está viviendo tanto la Guardia Nacional como la administración de AMLO con las fuertes críticas que está recibiendo, por lo que, ciertamente, esta fue una estrategia de comunicación poco acertada, no por la información que comparte, sino por quién lo comparte y el momento político en el que lo hace; ya que de haber sido compartida por otra área de la administración y en un momento acertado cuando, por ejemplo, hablaron mal del hijo menor de edad del presidente, probablemente, el mensaje habría sido recibido como uno empático, mucho menos amenazador y quizás no habría afectado la imagen de AMLO, la Guardia Nacional y en general de la 4T, sino todo lo contrario.

Así parece que esta administración sigue sin entender que antes de hacer cualquier declaración pública ya sea una entrevista, publicación, o cualquier material de comunicación, se debe analizar el contexto, administrar los beneficios y las repercusiones; y medir las consecuencias. Para así tomar una decisión más fundamentada de implementación o no de la estrategia, lo que evitará este tipo de golpes negativos a la imagen de AMLO, su administración y en general a las decisiones políticas que este toma.

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