- Inscribirán en letras doradas la leyenda «13 de agosto de 1914: Firma de los tratados de Teoloyucan».
- Proponen placa conmemorativa por el inicio de sesiones en el actual recinto legislativo en 1973.
El Congreso del Estado de México aprobó por unanimidad inscribir en letras de doradas en el Muro de Honor del Salón de Sesiones ‘José María Morelos y Pavón’ la leyenda «13 de agosto de 1914: Firma de los tratados de Teoloyucan», a propuesta del diputado Marco Antonio Cruz Cruz, en nombre del grupo parlamentario de Morena, y del ciudadano Horacio Campos Lozada.
En sesión deliberante, el diputado Marco Antonio Cruz indicó que se busca dejar un testimonio digno de la historia nacional y contribuir al fortalecimiento de los valores cívicos e históricos de nuestra entidad, en virtud de tan importante acontecimiento histórico al tratarse de los documentos con los que concluyó la segunda etapa de la Revolución Mexicana y la disolución del Ejército Federal del antiguo régimen.
De acuerdo con el dictamen, los Tratados de Teoloyucan se firmaron sobre la salpicadera de un automóvil en el camino nacional de Cuautitlán a Teoloyucan y con el documento quedó de manifiesto el triunfo del Ejército Constitucionalista encabezado por Venustiano Carranza.
Proponen placa conmemorativa por inicio de sesiones en actual recinto legislativo
El diputado Jesús Gerardo Izquierdo Rojas (PRI) propuso colocar en el edificio que alberga el Poder Legislativo del Estado de México, en la ciudad de Toluca, una placa en la que se consigne la fecha de su inauguración como recinto legislativo, así como el nombre de las y los diputados que conformaron la XLV Legislatura, a quienes correspondió ocupar el Recinto por primera vez.
Al señalar que la historia de las instituciones va de la mano con la historia de los lugares, edificios y personas que les dieron ser y esencia, el legislador Gerardo Izquierdo recordó que las sedes legislativas estatales han sido determinadas por las circunstancias políticas e históricas y, debido a las modificaciones territoriales, las sedes de los poderes públicos se mudaron por diez ocasiones en un lapso de 24 años.
Expuso que la primera sede fue asentada en 1824 en la Ciudad de México; para 1827, se estableció en Texcoco y, ese mismo año, se trasladó a Tlalpan; en 1830 se mudó a Toluca y, por segunda ocasión, a la Ciudad de México. En 1846, Toluca recuperó la sede, y en 1847, los poderes públicos se instalaron en el municipio sureño de Sultepec. En 1848, se trasladaron a Metepec por un breve lapso, para, finalmente en ese mismo año, asentarse en la actual capital mexiquense donde comenzó a celebrar sesiones en lo que hoy es la Capilla Exenta.
Fue en 1973, durante la XLV Legislatura, cuando se concretó la mudanza al edificio que entonces albergaba la Casa de Cultura y Biblioteca Pública Estatal, que a la fecha es el Recinto Oficial del Legislativo mexiquense, indica la propuesta remitida para su análisis a la Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales.