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Desierto de amigos

Amadeo Palliser Cifuentes
Amadeo Palliser Cifuentes
amadeopalliser@gmail.com

El poeta y militar del reino de Valencia, Jordi de Sant Jordi (1395 – aprox. 1424) escribió el poema ‘Desert d’amics’, del que he tomado el título para este escrito, en el que dijo (traducción al castellano por google):

‘Desierto de amigos, de bienes y de señor,

en extraño lugar y en extraña región.

Lejos de todo bien, harto de enojo y tristeza,

mi voluntad y pensamiento cautivado,

me encuentro del todo en mal poder sometido,

no veo alguien que me haya cuidado,

y soy guardado, encerrado y tomado,

de que hago grato a mi triste ventura.

He visto tiempo que no me place nada;

Ahora me contento con esto que me da tristeza.

Y los grilletes ligeros ahora aprecio más

que en el pasado la bella bordadura.

(…)’

El cantautor Raimon (Ramón Pelegero i Sanchis), musicó el poema y lo incluyó en su álbum ‘Per destruir aquell qui l´ha desert’ (1970)

La situación que describió el poeta, salvando las distancias de los seis siglos, me parece que puede reflejar, también, nuestra época actual en España, desierta de amigos, de bienes y de señor (éticamente hablando), en el que los independentistas catalanes nos vemos alejados de todo bien soñado, hartos de enojo y de tristeza, sometidos al poder del mal; y que vemos que muchos (ERC, por ejemplo), blanquean ese mal poder que nos espía y que quieren imponernos para contentarnos con la tristeza, para que los grilletes nos parezcan más ligeros que los anteriores bordados.

Es vergonzoso ver que no aprendemos, que caemos y recaemos con la misma piedra, como dice el refrán, pues es verdad, ‘el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra’, los otros animales son más inteligentes.

Y vemos que el ansia de poder lo rige y domina todo; pues, siguiendo con el ejemplo de ERC, hace unos meses, Oriol Junqueras y Marta Rovira (presidente y secretaria), modificaron los estatutos de ese partido, en concreto el artículo 20.3, que decía que ‘la duración del mandato es de 4 años, y pueden ser reelegidos ininterrumpidamente hasta un máximo de doce años, si bien siempre pueden acabar el mandato’.

El 17 de setiembre del 2011, ambos políticos tomaron posición de sus cargos, por lo que, en este momento, están ejerciendo su tercer y último mandato, pero, para afianzarse en sus cargos, decidieron adelantar el congreso, para primeros de noviembre (y no el año próximo, como estaba previsto), y volverse a presentar (son los únicos, no se ha presentado alternativa, esa es la verticalidad férrea de su partido); de ese modo, piensan mantenerse hasta noviembre del 2026, quince años, y veremos qué decidirán hacer entonces.

Se creen únicos e imprescindibles. Su argumento es el de ‘ponerse al lado de la gente y del país’ y ‘hacer de ERC una organización todavía más fuerte y preparada para servir a este país’. En esa línea, el discípulo Pere Aragonès, president de la Generalitat, repite su nuevo mantra de ‘trabajar para la Catalunya ‘entera’’ (y lo dice ahora que gobierna con un 21% de los diputados).

E intentan vendernos esa moto como positiva, pero, claro, cuando Xi Jinping o Vladímir Putin modifican sus constituciones y leyes, para perpetuarse en el poder, lo muestran como un claro ejemplo de despotismo, de absolutismo.

ERC, huyendo de todo ejercicio democrático, sigue aferrado a la presidencia de la Generalitat, con apenas 33 diputados de 135; sin plantear una moción de confianza, ni nuevas elecciones. El partido mencionado abusa de la geometría variable, ya que sabe que los partidos unionistas (PSC, PP, Ciudadanos y los Comunes/Podemos) suman 61 diputados y, por lo tanto, no alcanzan los 68 que representa la mayoría absoluta. Y eso es legal, pero no es legítimo, ni ético ni democrático, ya que no responde a la voluntad popular, pues, de ese modo, tiene cautivos implícitamente, a los diputados de Junts y la Cup.

Ayer, el cantautor, exdiputado y ahora miembro del Consell de la República (Carles Puigdemont), en el mitin de la Plaza de Catalunya de Barcelona, la acampada organizada por la ANC, dijo que ‘si es preciso tener un gobierno autonómico, se tiene, pues ese no es el problema. El problema y la vergüenza es tener un gobierno autonomista votado por los independentistas’. Pero, como he dicho, ERC no quiere convocar elecciones, pues muchos de sus votantes no volverían a confiar en ellos, y lo saben; por eso se esconden y parapetan en legalismos, como los mejores leguleyos.

Salvando las distancias, me parece que un buen símil de la situación de ERC sería la iglesia católica del papado de León X (Giovanni di Lorenzo de Médicis) (1475-1521), papa del 1513 al 1521.

León X, como los papas anteriores, estuvieron involucrados en todas las guerras de la época, así como en el mecenazgo de los principales artistas, para construir y decorar sus iglesias y palacios, para lo que precisaban grandes cantidades de dinero, y los impuestos tenían un límite, si no se querían provocar una rebelión popular. Por eso, recurrieron a la venta de bulas (indulgencias a cambio de dinero). León X, como sus antecesores, otorgó cargos eclesiásticos a miembros de su familia, consolidando el poder de los Médicis.

‘Había corrupción, los puestos eclesiásticos se podían comprar y vender. Muchos sacerdotes eran adúlteros, borrachos e ignorantes. Maquiavelo lo escribió de manera brutal: ‘Nosotros los italianos somos más irreligiosos y corruptos que otros, porque la Iglesia romana nos ha dado el peor ejemplo’’

En ese contexto, el teólogo y fraile agustino Martín Lutero (1483-1546) inspiró la reforma protestante, para aproximar la fe al cristianismo primitivo, mediante la enseñanza de la Biblia en lengua vernácula. Entre los años 1516 y 1517 publicó sermones en contra las citadas indulgencias, y el 31 de octubre de 1517 clavó 95 tesis contra la venta de indulgencias, para recabar dinero para la construcción de la basílica de San Pedro, en la puerta de la iglesia del palacio de Wittenberg,

León X, en el concilio Laterano V, impuso la bula ’De Super impressione librorum’, para vetar la impresión de la Biblia y los textos religiosos, y si no tenían el ‘nihil obstat’, acababan incluidos en el ‘Index Librorum Prohibitorum’

Johann Tetzel (1465-1519) fue un predicador dominico alemán encargado de la venta de las indulgencias, pues ‘vendía el perdón completo de los pecados todavía no cometidos’. Lutero, además de criticar esa práctica, demostró que la mitad de la recaudación no iba a Roma, pues se desviaba al arzobispo Alberto de Maguncia. Y todos sabemos que entre nosotros hay muchos ‘Tetzel y Albertos’, especialmente entre ERC.

Pues bien, el papismo y cesaropapismo vaticano de esa época (y también bastante de la actual), es muy similar a la de la actual ERC, y nunca mejor dicho, pues Oriol Junqueras siempre ha hecho gala de su cultura y ascendencia vaticana, por eso de mote le llaman el ‘obispo’ y a su discípulo, Pere Aragonès, ‘el monaguillo’.

ERC, con su férreo control vertical, más propio de una secta, critica todo lo que le es ajeno, todo lo que no hacen o dicen lo que ellos quieren; se creen con el poder divino, por eso, a todos los críticos les consideran sus ‘luteros’, ya que rechazan toda reforma.

Por ejemplo, hoy, el conseller de interior, Joan Ignasi Elena (ex PSC/PSOE), ha cesado al actual comisario jefe de los mossos d’esquadra (la policía catalana), Josep María Estela (jefe desde 2021), el sexto desde el 2017 que el gobierno de Mariano Rajoy cesó a Josep Lluís Trapero; siendo nombrado hoy Eduard Sallent (que ya fue comisario jefe del 2018-2019), un responsable que está judicializado por aceptar injerencias políticas. Y que ha sido nombrado de forma transitoria, para que, a primeros del año 2023, sea nombrada una mujer, la intendente Rosa Bosch, cuando acabe el actual curso para ascender a comisaria. Todo muy claro y transparente.

Es inverosímil que políticamente se interfiera en la práctica policial; en un cuerpo de disciplina militar, y reducido (17.000 miembros), no puede haber tantos jefes, aparcados, y menos, permitir que el conseller tuviera un hilo directo con el segundo del cesado. Y especialmente, tener aparcado al mayor Trapero, el del máximo rango; una persona con un prestigio policial inmenso (a pesar de su declaración anti-independentista en su juicio), después del éxito ante el atentado del 17 de agosto del 2017, y la forma de proceder el 1 de octubre, el día del referéndum (en contraposición a la guardia civil y policía nacional, que aplicaron toda la fuerza bruta por votar)

Esa forma de proceder está en línea con la del también ‘más papista que el papa’, Josep Borrell (PSOE), el responsable (o, mejor dicho, irresponsable, de la diplomacia de la UE), que es famoso por sus meteduras de pata (como la de que ‘la conquista de América comportó apenas la matanza de unos pocos indios’); personaje que la semana pasada dijo que:

‘Europa es un jardín privilegiado, y el mundo que la rodea es una jungla capaz de invadirla y acabar con todo lo que han conseguido en libertad’. Josep Borrell, jueves 13, en el discurso inaugural de la Academia diplomática europea, en Brujas.

Es decir, una visión egocentrista, parti-centrista, eurocentrista, etc.

Por eso muchos estamos deprimidos, y no encontramos ni vemos salida a este bucle, que el citado cantautor Raimon, cantó, pensando en el franquismo; pero, la rueda, las ruedas, no paran; en diferentes niveles y ámbitos, ruedan y ruedan indefinidamente.

‘Quan creus que ja s’acaba’ (cuando crees que ya se acaba), Raimon, 1969, mismo álbum citado

‘Cuando crees que ya se acaba

Vuelve a empezar

Cuando crees que ya se acaba

Vuelve a empezar.

Y vuelve el tiempo de los monstruos

Que no están muertos

Y el silencio hace nido en la vida

Hace nido en las cosas.

Puede ser una noche

El ascensor que siempre sube

Se parará en tu piso.

Y tu y yo deberemos abrir

Y yo y tu, impotentes ante la noche

Deberemos abrir.

Cuando crees que ya se acaba

Vuelve a empezar

Cuando crees que ya se acaba

Vuelve a empezar’.

Hay una fábula, que todos los líderes políticos deberían conocer:

‘Fabula del hombre y el espejo

Había una vez un hombre sencillo, sensible y genial. Un día inventó el espejo para el alma. Se miró, y, encantado con el resultado encargó que se hicieran miles de espejos.

La gente se acumulaba en su casa, todos pagaban fortunas con gratitud. Luego iban raudas a sus casas, para ver el resultado que desvelaría el espejo.

El hombre que antes era sensible y genial, ahora también era orgulloso. No sólo había inventado un buen producto para la humanidad, sino que ahora también se hacía rico.

Pero la multitud no estaba contenta. Al contrario, volvían enfurecidos, gritando violentamente contra el inventor. Devolvían los espejos, los rompían, y reclamaban su dinero. ¿Qué tipo de broma es esta?, ¡Este espejo destruyó mi vida!, ¡Mi familia me abandonó!, etc.

El inventor, al quedarse solo, arruinado y con los espejos rotos, buscó un trozo y se miró, para recobrar ánimos, pero, al verse, lo rompió y nunca más se volvió a hablar de él’

(https://es.linkedin.com)

Como he dicho, muchos políticos, y en general todos, deberíamos hacer este autoexamen, y ver en lo que nos hemos convertido; y, críticamente, actuar en consecuencia, para rectificar los errores cometidos. Pero, volviendo a Junqueras, como ejemplo prototípico, sabemos que no lo hará, pues no se reconocería. O, realmente sí, y siempre ha sido así, y nos había engañado hasta el 2017.

Queremos la República Catalana, democrática y alejada de las visiones centralistas, queremos una República ejemplar, amigable, y sin los vicios que representan los Borrell, Junqueras y sus adláteres, como Aragonès, que dijo que trabajaría para que Catalunya fuera un país ecologista, autosuficiente y feminista; pero se ‘olvidó’ de decir: INDEPENDIENTE. Ellos quieren seguir en un país ‘desierto de amigos, en los que, cuando parece que acaba, vuelve a empezar la rutina que les ha llevado al poder y del que se benefician.