• Está lleno de tradición e historia; disponible durante el mes de abril.
• Pueden visitarlo de martes a sábado de 10:00 a 18:00 horas y domingo de 10:00 a 15:00 horas.
Zinacantepec, Estado de México, 3 de abril de 2023. El Museo Virreinal de Zinacantepec, continúa con sus actividades culturales y en esta ocasión abre sus puertas con la exhibición de un altar en honor a la Virgen de Dolores.
Esta ofrenda tiene el propósito de acompañar a la Virgen María en el dolor que padeció al transcurrir la vida de su hijo Jesús, hasta su crucifixión y muerte.
Por el peso simbólico y social que presentaba, comenzaron a crear templos donde se pudiera honrar este hecho, pero con el tiempo, los devotos comenzaron a colocarlos en sus hogares, haciendo algunas modificaciones de acuerdo con su región.
Normalmente, el altar está compuesto de siete niveles cubiertos por tela o papel de color morado y blanco en señal de luto, los cuales se distribuyen en el siguiente orden.
El primero se presenta por medio de naranjas ácidas que simulan el corazón herido de María, traspasado por los siete dolores que padeció y están representados con banderas doradas y plateadas.
Después se pone agua de diversos sabores que simbolizan diferentes cosas, si es de chía representa las lágrimas de la Virgen, limón la esperanza de resurrección, naranja el atardecer durante la crucifixión y horchata la pureza de María.
El siguiente nivel, con el germinado de trigo, para simular la eucaristía, seguido, en el cuarto piso, de una alfombra de romero para la idea de sufrimiento y duelo.
En el quinto nivel se ponen plantas en macetas con forma de animales para representar la vida; en el sexto las velas y esferas que muestran la luz, resaltando que éstas, junto con las banderas doradas, le dan al altar una apariencia de luminosidad y brillo, recibiendo el nombre de incendios.
En el séptimo se encuentra el ciprés para la inmortalidad y por último en el centro se coloca la imagen de la Virgen de Dolores.
La imagen se presenta con el corazón atravesado por una daga y reflejando en su rostro la afección por los padecimientos de sus hijos.
Para poder encender el altar se recibía una señal, la cual era el repique de las campanas en los templos durante los primeros minutos del viernes de Dolores, para después abrir las puertas de las casas y recibir a los visitantes a quienes generalmente se les ofrecía agua para aliviar su sed.
La pieza está disponible durante el mes de abril y podrá visitarse en el horario de martes a sábado de 10:00 a 18:00 horas y domingo de 10:00 a 15:00 horas, en las instalaciones del Museo, ubicado en Av. 16 de septiembre s/n, Centro, Zinacantepec, Estado de México.