En vísperas del inicio de la campaña electoral, vemos que todos los partidos políticos utilizan sus armas para ‘seducir’ (o, mejor dicho, engañar) a sus potenciales votantes; y para ello no tienen el menor escrúpulo.
Así, vemos que los que ostentan el poder, por ser alcaldes, o, por disponer del BOE (como el tahúr Pedro Sánchez), abusan de sus prerrogativas; y todo ello no deja de ser más que un fraude de ley, pues, por ejemplo:
- que concentren todo tipo de inauguraciones de obras públicas o actos ‘culturales’, como hace Ada Colau (alcaldesa de Barcelona), que es una maestra en ese sentido, pues incluso inaugura obras inacabadas, o
- que Pedro Sánchez prometa, día sí y día también nuevos pisos, nuevas rebajas para el transporte, etc.
no es más que un abuso de poder que debería estar sancionado y penado; pero sabemos que la justicia y la fiscalía españolas, están muy alejadas del concepto de justicia, su único motor, su único objetivo que las define, es que son ‘españolas’.
Todos prevarican.
El filósofo Bernard Mandeville (1670 – 1733) en su ‘Fábula de las abejas’ (1705) señaló que ‘nunca la virtud hizo prosperar a las sociedades, sino que el verdadero motor del progreso es el vicio, la corrupción’
Si esa sentencia fuese cierta, el corrupto reino español sería el estado más relevante, más potente, de la galaxia, pues en él la corrupción es el deporte nacional.
Por todo ello, en estos días abundan todo tipo de artículos y editoriales valorando diferentes opciones: participación, abstención, voto blanco y voto nulo.
Entre esos escritos, me parecen muy relevantes los dos siguientes:
1 –
La editorial de Vicent Partal, titulada ‘Votar con una sonrisa o sonreír y no ir a votar’, en la que compara nuestro estado de ánimo eufórico, durante los años anteriores al referéndum del 2017, con la situación actual. En esa editorial, su autor explica el origen de ‘votar con la pinza en la nariz’, realizado en las elecciones presidenciales francesas, para elegir a Jacques Chirac, frente a Jean-Marie Le Pen.
Posteriormente, Partal comenta las elecciones del 14 de febrero del 2021 en Catalunya, en la que más de 3,3 millones de personas votamos ERC, Juntos o la Cup, para formar un gobierno independentista; pero, la situación actual del gobierno monocolor de ERC, claramente autonomista, dista diametralmente del programa electoral de los citados partidos.
Así, ahora vemos ‘que el cinismo de una campaña electoral es insuperable, pues los candidatos no es que no tengan vergüenza para engañarnos: es que no tienen vergüenza de decir y prometer cosas que todos sabemos que es falsa’.
‘Por eso hace tiempo que crecen las voces que dicen que, en vista del chantaje institucionalizado, si no se tiene la oportunidad de votar sonriendo es mejor abstenerse que no ir a votar con la pinza en la nariz. (…) ¿Puede pasar que esto quiera decir un gobierno del PP y Vox en la Generalitat Valenciana? Sí. ¿Y puede ser que esto deje muchas alcaldías en manos del PSC en el Principat? También. A corto plazo es evidente que se ponen en riesgo unas cuantas cosas. Pero a medio y largo plazo, ¿a qué nos enfrentamos sí, solamente por este miedo, dimitimos del derecho de conformar nuestra sociedad de la manera más próxima a nuestro pensamiento?
Macron y Sánchez son dos monstruos amorales que hacen todo esto por que la gente no es lo suficientemente valiente para dejarlos caer. Y ellos se aprovechan de eso. Como se aprovechan Pere Aragonès y Ximo Puig. Con el PP no tendríamos requisitos lingüísticos ni se vería TV3 en Valencia, exactamente igual como pasa con Puig. Y con el PSC tendríamos castellano en las escuelas o juegos olímpicos en el Pirineo, exactamente igual como con Aragonès.
Partal continúa diciendo yo soy de izquierdas e independentista, pero cuando la izquierda o el independentismo son inmorales yo no puedo votarlos. Para mí el binomio derecha-izquierda, o independencia-unionismo, no puede ponerse en una balanza sin poner al lado el binomio verdad-falsedad, el binomio autenticidad-falsificación, el binomio justo-injusto, el binomio bien-mal, por decir unos cuantos.
(…) votar con sonrisa no solo nos hace felices, si no que conforma una sociedad sana (…) sonreír y no ir a votar es una alternativa válida de la que no tenemos que avergonzarnos ni es preciso justificar. Por que la pinza en la nariz ya ha demostrado de sobras que acaba creando más problemas que no aporta soluciones’
(Vilaweb, 7 de mayo del 2023)
2 –
David González, en su artículo: ‘¿Blanco, nulo, abstención? Un malestar difuso’, comenta:
‘Se percibe en el ambiente un malestar difuso que puede deparar más de una y dos sorpresas el 28 de mayo. Malestar difuso. Me explico: se detecta en las conversaciones, en la calle, en los grupos de whatsap… una sensación de cabreo, de mal humor, de gente que está hasta cansada de muchas cosas, en general, y que puede encontrar a las urnas una manera de vehicular esta negatividad, un estado de ánimo casi nihilista. Gente que en este momento se pregunta, claramente, si hace más daño al sistema, a los grandes partidos, la abstención, el voto nulo o el voto blanco.
Los politólogos y expertos tienen teorías de todas clases, y, por lo tanto, las respuestas son opinables y nunca definitivas. Ahora bien: si una cosa dice la experiencia es que, generalmente, a quien más castiga el no-voto en sus diversas variantes suele ser al partido que votó el elector en la anterior elección. (…) A su vez, la peor penalización para el partido que, por la razón que sea, se piensa que ha decepcionado, es votar a su principal adversario o la opción con más opciones de desbancarlo, si es que tiene poder.
(…) El no-voto estuvo a punto de ganar en las últimas elecciones al Parlament de Catalunya, celebradas el 14 de febrero del 2021 (se abstuvieron el 48,71%, los votos nulos fueron el 1,44% y los votos blancos el 0,83%; globalmente, el 50,12% votaron a candidaturas, frente al 48,87% de las otras opciones)
(…) Es en la desconfianza hacia la herramienta -la democracia, los parlamentos- y en la inacción de los gobernantes delante los problemas del día a día, donde nace la antipolítica y germina un malestar difuso que también computará en las urnas del 28 de mayo’
(Elnacional.cat, 8 de mayo del 2023)
Realmente, el reino español está formado en el franquismo, y consolidado en el neofranquismo, así que todo es un verdadero bluf, como señala el citado Partal, al decir que el primer engaño es la propia configuración del estado español, ya que, promulgan que España es un estado plurinacional, pero ¿qué queda si se quitan las nacionalidades catalana, vasca y gallega?, pues no hay una nacionalidad que englobe ese resto, como no hay una identidad de ese territorio amorfo. Ellos contraponen la nación-estado español frente a las verdaderas naciones citadas. Y así imponen su lengua, sobre las otras, por ejemplo.
Ante esta situación y dado el actual esta de ánimo, la tentación es resignarse, conformarse, resistir con resilencia, o … confrontarse.
Resignarse significa renunciar a un beneficio, someterse a la voluntad de otro; conformarse con las adversidades; conformarse con algo negativo, sin hacer nada contra ello.
Y conformarse, entre otras opciones, expresa estar de acuerdo, converger, contentarse, sujetarse voluntariamente a hacer o sufrir algo por lo cual se siente alguna repugnancia; darse por satisfecho con algo.
El mencionado Mandeville en su obra ‘La fábula de las abejas: o, vicios privados, públicos beneficios’ resaltó la utilidad social del egoísmo.
Y ante el egoísmo de los políticos profesionales actuales, debemos hacer prevalecer nuestro egoísmo, el de los independentistas de base molestos con el statu quo.
Muchos estamos cansados de tantos prepotentes egoístas y endiosados, como lo muestra que el 60% de los actuales diputados del Parlament, se presenten a las municipales, es decir, 83 de los actuales 135 diputados, de los cuáles, 38 son alcaldables. Ciudadanos con 6 de 6 y ERC con 24 de 33, son los grupos que aportan más candidatos.
Exactamente, qué nos dicen con ese abuso:
- ¿Que son los mejores e insustituibles?,
- ¿Que son capaces de realizar dos actividades y, claro, tener los beneficios y prebendas de ambos?,
- ¿Qué, al ser más conocidos, deben ‘explotar’ ese plus mediático, considerando que esa ‘fama’ está por encima de las propias cualificaciones?,
- etc.
Por todo lo expuesto, creo que deberíamos recapacitar en los siguientes pensamientos, para, al final, actuar en consecuencia, y, así, seguro que sonreiremos:
- ‘Atrévete a ser valiente hoy y confía en que cuando extiendas tus alas, volarás’ (María Demuth)
- ‘Ser el primero en hacer algo requiere valor’ (J. M. Darhower)
- ‘Se necesita una gran cantidad de valentía para enfrentarse a nuestros enemigos, pero tanto como para hacer frente a nuestros amigos’ (J. K. Rowling)
- ‘Aprendí que el coraje no es la ausencia de miedo, sino el triunfo sobre él. El hombre valiente no es aquel que no siente miedo, sino el que conquista ese miedo’ (Nelson Mandela)
- ‘Lo único a temer es el miedo en si mismo’ (Franklin D. Roosevelt)
- ‘Lo contrario de la valentía no es la cobardía, sino la conformidad’ (Robert Anthony)
- ‘Para conseguir cualquier cosa, debes ser lo suficientemente valiente para fracasar’ (Kirk Douglas)