• Ante la resignificación de su trabajo como artista, Daniela Moctezuma se identifica como fotógrafa feminista porque para ella es fundamental intentar dar una vuelta de 360 grados hacía las diversidades que atraviesan a las mujeres.
• Actualmente, Daniela Moctezuma expuso “Lírica Femenina” un proyecto atemporal que permite escuchar a las mujeres.
Toluca, Méx; 30 de mayo de 2023. Para Daniela Helúe Moctezuma Aguilera, egresada de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx), ser creadora no musa es resignificar e identificarse como artistas y sacar al arte hecho por mujeres de lo privado para llevarlo a lo público.
Desde que era pequeña tuvo una inquietud de observar el mundo que la rodeaba, desde una necesidad de mirar a detalle, sin embargo; no tenía muy identificado cómo podía hacerlo hasta que se dio cuenta que podía ser fotógrafa por lo que comenzó a hacer fotos más que a mirarlas.
Daniela Moctezuma identifica que sus comienzos como fotógrafa fueron cuando en casa de su abuelo encontró una cámara y a pesar de que él no fuera fotógrafo profesional, si tenía una afición tangible por ese arte.
“Al encontrar el archivo fotográfico familiar de mi abuelo y su cámara con la que él viajaba siempre, fue una luz que iluminó mi camino en la fotografía que me hizo saber que venía desde familia. Además de ser mi forma de inmortalizar muchas cosas, como lo hizo mi abuelo antes de mí «, apuntó.
Desde 2018, su trabajo se ha centrado en la cobertura de manifestaciones, principalmente feministas, en México y Argentina, convirtiéndose en un espacio que le ha permitido conocer amigas y colegas fotógrafas y de esta forma crear un espacio seguro.
Una forma distinta de contar las historias desde la imagen
Durante su movilidad estudiantil, en un viaje que realizó a Chile, leyó por primera vez en el Museo de Bellas Artes “Creadoras No Musas” en una exposición que mostraba obras de mujeres, lo que fue muy simbólico, ya que entrar a salas donde solo había pinturas de mujeres y que muchas de estas eran autorretratos en donde se podía ver cómo se definían a través de la pintura.
En esa exposición, nació en ella una cosquilla por conocer de dónde venía está frase y al investigar la historia de mujeres fotógrafas, cedió cuenta que todas tenían en común el mantener a la fotografía en lo privado.
“Creo que esto es una reivindicación muy bonita el saber que nosotras también podemos tomar las cámaras, que no únicamente estamos para posar frente a ellas y a otras personas», abundó.
Ante esta resignificación de su trabajo como artista, Daniela Moctezuma se identifica como fotógrafa feminista porque para ella es fundamental intentar dar una vuelta de 360 grados hacía las diversidades que atraviesan a las mujeres, que van desde sus cuerpos hasta las historias que tienen que contar y que en la narrativa hegemónica creada por fotógrafos no está.
Durante sus coberturas busca retratar las “otras cosas” que pasan en las manifestaciones como los abrazos, las risas, los encuentros, el baile y principalmente la alegría, para cambiar la narrativa de que todo es violento o son peligrosas, cuando también son un espacio seguro para muchas personas.
Lírica femenina
Actualmente, Daniela Moctezuma expuso “Lírica Femenina” un ejercicio que, en el marco del ocho de marzo de 2020, hizo con amigas y conocidas con las que había estado teniendo charlas sobre lo que pensaban y soñaban de niñas.
Estas conversaciones la dejaron pensando mucho, ya que hablaban de sus sueños en pasado, no en presente; por lo que imagino cómo, a través de la fotografía, podrían regresar a esa infancia, cómo podrían volver a mirar a esas niñas y cómo rescatar esos sueños que en algún momento tuvieron y que por alguna razón habían dejado y ahora hablaban de ellos en pasado.
Lo que hizo fue convocar a sus amigas más cercanas para hacerles retratos, en donde a la sesión debían llevar su fotografía favorita de la infancia y le redactaron una carta a la niña que estaban viendo en esa fotografía para finalmente leer esa carta a solas y tomar una foto actual.
En este sentido, Daniela Moctezuma le diría a la niña que comenzó a tomar fotografías que no le tenga miedo a tomar la cámara, que las historias que quiere contar son valiosas, que no hay historias que no valgan la pena y que confíe en lo que está haciendo porque todo es un proceso porque su cámara siempre será una aliada en los procesos que va a habitar.
Finalmente, aconsejó a las universitarias que quieran desarrollarse como fotógrafas a mirar su propia historia y reconocer las cosas que han pasado y cuáles son las diversas historias que las atraviesan y las componen, ya que una se crea y resignifica desde su propia historia.