Por Diego Oré
CIUDAD DE MÉXICO, 1 abr (Reuters) – El vital sector minero de México, que aporta alrededor del 4% de la economía del país, sólo podrá mantener sus operaciones esenciales durante la emergencia sanitaria por la epidemia del coronavirus, dijeron a Reuters dos fuentes del Gobierno.
El lunes, el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador decretó una emergencia sanitaria en el país tras sobrepasar los 1,000 infectados por el brote. La decisión obliga a las industrias no consideradas “esenciales”, como la minería, a cerrar sus puertas o trabajar en mínimos hasta fines de abril.
Dentro de las industrias que podrán seguir operando están la médica, química, farmacéutica, toda la cadena de procesamiento y distribución de alimentos y energéticos, seguridad pública, sectores financieros, telecomunicaciones, transportes y los programas sociales del Gobierno.
“(Las mineras) no podrán seguir (operando) salvo que tengan que llevar a cabo tareas esenciales. Por ejemplo, que la paralización pueda poner en riesgo la operación futura o la seguridad de la mina, el manejo de residuos”, dijo una fuente del Gobierno con conocimiento del asunto, quien solicitó el anonimato por no estar autorizado a declarar.
Otra fuente del Gobierno confirmó que las mineras sólo podrán mantener operaciones que sean vitales hasta que termine la emergencia sanitaria, el 30 de abril.
El martes, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez, y el canciller, Marcelo Ebrard, sostuvieron una larga videoconferencia con los gobernadores de los 31 estados del país para definir cómo abordar el estado de emergencia.
Allí se discutió la conveniencia de la paralización de las operaciones mineras en el país, dijeron las fuentes consultadas. Ni la Secretaría de Gobernación, ni la Cancillería respondieron a solicitudes de información por parte de Reuters.
PRIMERAS PARALIZACIONES
La Cámara Minera de México (Camimex), que agrupa a las mayores empresas del rubro que operan en el país como Grupo México, Minera Autlán, Industrias Peñoles y Peñasquito -subsidiaria de Newmont -, se lamentó por no haber sido incluida dentro de los rubros fundamentales.
“Como Cámara Minera de México buscaremos presentar el caso de la industria minera ante el Consejo de Salubridad constituido por el Gobierno Federal, para que se incorpore de manera posterior al acuerdo como actividad esencial, o bien, sea contemplada como una actividad cuya suspensión pueda tener consecuencias irreversibles para su continuidad”, dijo.
“Se ha hecho hincapié en los graves impactos económicos que esta decisión generaría al país, a la cadena de proveeduría de la minería, así como a las industrias que utilizan insumos provenientes de los minerales”, agregó Camimex en un comunicado.
Una fuente de Grupo México, la mayor minera del país y la tercera mayor productora de cobre del mundo, dijo que “aún no” les habían comunicado la decisión de paralizar o reducir sus operaciones.
Más tarde, Sierra Metals, una minera polimetálica que opera dos yacimientos en México -Bolívar y Cusi- y uno en Perú, dijo que tras la decisión del gobierno de México de no incluir a la minería dentro de los sectores estratégicos, decidió paralizar sus operaciones en el país norteamericano.
“Se mantendrá una fuerza laboral más pequeña en Bolívar para supervisar los aspectos críticos de la operación, con el objetivo principal de facilitar una rápida y eficiente recuperación a niveles normales una vez que se levante la suspensión de actividades no esenciales”, dijo Igor Gonzales, presidente de Sierra Metals, citado en un comunicado.
“Nuestra mina Cusi se está poniendo en cuidado y mantenimiento y los empleados permanecerán en casa”, agregó.
La industria automotriz, que genera miles de puestos de trabajo en México, pidió el martes ser incluida dentro de los sectores prioritarios que podrán mantener parte de sus operaciones durante la emergencia sanitaria.
El coronavirus, un brote surgido en China a fines del año pasado y que amenaza con desencadenar una recesión a escala global, ha infectado a 1,215 personas y ha cobrado la vida de 29 en México, apenas una fracción de los más de 878,000 contagiados y 43,412 fallecidos reportados alrededor del mundo. (Reporte adicional de Noé Torres y Ana Isabel Martínez)
