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Negociaciones y Síndrome de Munchausen

Amadeo Palliser Cifuentes
amadeopalliser@gmail.com

Pasadas las elecciones, los partidos políticos españoles todavía no han empezado a negociar la futura presidencia del gobierno; y el PSOE, el que tiene más posibilidades de alcanzarla, sigue un plan difuso y obtuso, pues mientras Pedro Sánchez está de vacaciones, nada menos que en Marruecos, un destino que dice que es personal, pero que tiene, asimismo, implicaciones políticas, como si se fuera de vacaciones a Rusia, está claro.

Pero Pedro Sánchez, con su gran prepotencia, pretende la cuadratura del círculo, ser servil con el poderoso reino marroquí y, a la vez, ofensivo con el pueblo saharaui, todo en el mismo pack.

Y, en ese ínterin, sus ‘todavía’ ministros, no dejan de hacer ‘puntos’, ofreciendo ocurrencias para convencer a Junts; a ver quién la dice más ‘ocurrente’ para asegurarse la poltrona en el siguiente ejecutivo.

Y como vemos, se trata de un verdadero mercado persa (aquí en Catalunya, diríamos el mercado de Calaf), ofreciendo la revisión de la financiación autonómica (para todas las comunidades, claro, y, así, seguir con el ‘café para todos’, de Adolfo Suárez); la revitalización de la difunta mesa del diálogo, diciendo que siempre han sido y serán ‘los campeones del diálogo’; y, Yolanda Díaz, de Sumar, ofrece modificar el reglamento del congreso, para que se pueda hablar en catalán, euskera y gallego, mostrando, de ese modo, que el único obstáculo que ha habido durante estos 45 de ‘democracia’ era y es, la propia voluntad del PSOE/PP, ningún imperativo legal; etc.

Y todo ello, con la consabida coletilla de ‘todo dentro del margen de la constitución’.

Es penoso ver, asimismo, que el ‘todavía’ ministro de la presidencia, el ‘opusdeísta’ Félix Bolaños, añada que Junts no puede plantear opciones de máximos, que han de ser posibilistas. Pero, claro, ellos si que pueden ir con planteamiento de mínimos, pues están pensando en la nueva convocatoria de elecciones, y no pueden hacerse los ‘débiles’ ante el PP y Vox. En realidad, el PP/PSOE son la cara del estado, y Vox, el partido del rey.

El voto de ERC, por lo que parece, ya lo dan por supuesto, como lo han tenido durante toda la legislatura; aunque ahora ese partido pretenda hacerse el ‘mil hombres’, con el abrazo del oso a Junts, para evitar que el retroceso electoral vaya ‘in crescendo’.

El PSOE olvida, ignominiosamente, que, hasta ahora, Pedro Sánchez, y todo su gobierno, han sido los verdaderos campeones de las mentiras, que no han tenido el más mínimo reparo para decir blanco y hacer negro, siempre con la excusa de que ‘la realidad es cambiante y ellos se adaptan’.

Y ante esta situación, lo que puedan ofrecer y prometer, no tiente ni tendrá ningún valor; máxime habiendo constatado el nulo valor moral de esos personajes oportunistas, que hasta antes de las elecciones consideraban a Carles Puigdemont, como una ‘mera anécdota’, ‘un fugado cuya palabra tenia un valor nulo, como la proclamación de la independencia’.

Y además, como repiten el citado Bolaños y María Jesús Montero, ministra de hacienda, Junts está ‘obligada’ a votar a Pedro Sánchez, como defensa del progresismo, ante el retorno del pasado, del PP; volviendo, de ese modo, con la matraca de su campaña electoral, que les dio un relativo resultado.

Por todo eso, las futuras negociaciones, cuando se inicien oficialmente, estarán caracterizadas por el candidato Sánchez y sus colaboradores / subordinados, todos ellos con el ‘síndrome de Munchausen por poder’.

Este síndrome, en memoria del barón de Münchhausen (Karl Fridrich Hieronymus 1720 – 1797), es:

‘Un trastorno mental caracterizado por los padecimientos a consecuencia de crear dolencias para asumir el papel del enfermo. El paciente ‘crea’ y hasta se produce autolesiones para lograr unos síntomas físicos y/o psicológicos con consecuencias de acción, pero forzado a ello por una impulsión relacionada con su necesidad de consideración por terceras personas de ser asistido.

Está registrado en el DSM-IV como ‘trastorno facticio’. (…) La OMS lo considera ‘paciente peregrino’, de ‘hospital en hospital’ y lo distingue de la simulación (ficción, fingido o falso).

(…) Como el paciente tiene una tendencia incontrolada a mentir a los médicos y una conducta errática, muchas veces no se logra diagnosticar y por eso el paciente deambula de hospital en hospital, recibiendo distintos tratamientos (…)

(fuente Wikipedia)

Efectivamente, aplicar un diagnóstico clínico a unos personajes y partidos (como el PSOE, y, también, ERC), por su actuación pública, es un ejercicio asilvestrado e impropio; pero me parece adecuado, en plan metafórico, por su fuerza didáctica.

Y ese ejercicio metafórico, tiene, obviamente, sus limitaciones, ya que el mencionado síndrome ‘no se trata de una simulación porque no lo hace para conseguir un beneficio propio o evitar responsabilidades. Un simulador -falso- recibe un beneficio secundario por su papel de enfermo y es plenamente consciente de lo que está haciendo’.

‘El síndrome de Munchausen por poderes’ es una enfermedad psiquiátrica y una forma de maltrato infantil; el cuidador del niño, con frecuencia la madre, inventa síntomas falsos o provoca síntomas reales para que parezca que el niño está enfermo’ (ayer, 2 de agosto, se hizo público un caso de una mujer sevillana, por el intento de asesinato de su hijo menor; presuntamente afectada por ese síndrome)

En este sentido, y generalizando, me parece que Pedro Sánchez, Yolanda Díaz, Félix Bolaños, etc., presentan rasgos del ‘trastorno facticio’, que engloba al antiguamente denominado síndrome de Munchausen’, pues ‘argumentan’ un sinfín de trastornos, si vuelve el PP; síntomas producidos deliberadamente por ellos mismos, pues durante esta legislatura no han hecho nada para frenar y enterrar el franquismo; lo han utilizado como el gran mal, y ellos la salvación; cuando todos sabemos que, en todo caso, el PSOE / Sumar (Podemos) podrían ser el mal menor, pero mal, en todo caso, pues no se atreven a distanciarse ni un milímetro de las líneas rojas del régimen del 78: ‘España, una, grande y libre’.

Y, a mi modo de ver, ERC sigue ese mismo patrón, pues su estrategia de presionar a Junts, para que apoye la investidura de Pedro Sánchez, es vergonzosa. Que AHORA busquen la unidad de acción en el congreso, cuando la rechazaron desde el propio 1 de octubre del 2017, es inmoral, amoral. Y es de vergüenza ajena leer los discursos de Oriol Junqueras y Marta Rovira, ‘justificando’ la unidad actual, para ‘salvar al soldado Sánchez’, pero NUNCA, Y NUNCA ES NUNCA, han considerado necesaria la unidad, para salvar y potenciar el movimiento independentista.

Volviendo a las futuras negociaciones, obviamente, se requiere un reconocimiento de ambas partes, una voluntad de conseguir acuerdos (no trágalas), ya que deberán ceder ambas partes. En psicología social está muy estudiado el proceso de la negociación, que tiene varias etapas:

Preparación: cada parte determina su diagnóstico y objetivos, y planta su estrategia.

Antagonismo: exposición, a la contraparte, de lo que se desea alcanzar en la negociación.  

Aceptación del marco común: ambas partes, después de oír los otros, tienen que aceptar formalmente la negociación, y decidir qué postura escogerán: colaborativa, competitiva, etc.

Cierre: aceptación conclusiones.

Y hay 6 tipos de negociación:

Negociación acomodativa: la estrategia de una parte se basa en ser sumisa y conciliatoria.

Negociación competitiva: es la negociación ganar/perder, el objetivo de una o de las dos partes es el de maximizar los propios beneficios, y minimizar los del opositor.

Negociación evitativa: hace referencia a una técnica de negociación que, a priori, se reconoce que es mejor perder que ganar. Esto se debe a que el negociador sabe que no obtendrá beneficios del acuerdo. En este caso, se elige postergar la negociación o no negociar.

Negociación distributiva: se trata de la negociación tradicional, pues lo que gana una parte, lo pierde la otra, por eso, la estrategia es básica para maximizar los beneficios.

Negociación colaborativa: es la que ambas partes salen ganando, pues aceptan que el acuerdo obtenido es beneficioso para todos. Se basa en la confianza mutua.

Negociaciones de compromiso: se da cuando el tiempo para negociar es limitado, y por eso se acotan los objetivos a los más esenciales.

(fuente: https://www.docusign.mx)

Evidentemente, revisando esas etapas y tipos de negociación, vemos que todos los fuegos artificiales que hacen PSOE / Sumar, no son más que ‘serpientes de verano’, para mostrar que están activos, llenar páginas de los periódicos, y minutos de televisión.

Yo estoy de acuerdo con los articulistas que postulan que Pedro Sánchez nunca negociará, que dilatará el tiempo a su conveniencia, ya que su objetivo es ir a unas nuevas elecciones, que pospondrá al máximo posible, hasta lograr el momento que le parezca más oportuno.

Contrariamente, ERC, por lo que han reconocido sus líderes Junqueras / Aragonès / Rovira, su objetivo es evitar, a toda costa, unas nuevas elecciones, pues saben que el actual tsunami electoral les lleva en caída libre.

Por eso, una situación como la actual, con un PSOE que querrá aparentar negociar, pero que no lo hará; y una ERC que su estrategia es apoyar a Pedro Sánchez y evidenciar a Junts, no deja de ser diabólica. Ambos querrán aparecer como los más dialogantes, y dejar aislado a Junts, presentándolo como intransigentes e inconsecuentes.

Si se diera una negociación con los actuales mimbres, veríamos a ERC siguiente la técnica de negociación acomodativa, mientras que el PSOE/Sumar, adoptarían inicialmente la técnica competitiva y, al poco, pasarían a la evitativa, pues ‘perdiendo’ la negociación, es decir, cerrándose en banda, considerarían que esa ‘derrota’ sería su gran beneficio en las futuras elecciones.

Pedro Sánchez, con su trilerismo de respetar la constitución, quiere imponer su ‘relato’, por ejemplo, que la amnistía y el referéndum son inconstitucionales.

Pero constitucionalistas expertos y objetivos, como el ‘Libro blanco de la Transición Nacional de Catalunya’, presentado en diciembre del 2014, por su presidente, Carles Viver Pi-Sunyer, consideran que, efectivamente, tienen cabida, con una visión democrática, no la restrictiva del régimen del 78.

Pues la constitución española no habla de la amnistía (y sí de los indultos), así que, en puridad, su aplicación no es constitucional ni inconstitucional. En todo caso, sería preciso efectuar una ley, establecer el órgano que pueda tener atribuciones, delimitar el marco temporal y operativo, para incluir a los más de 4000 independentistas acusados o en vías de serlo, y blindar técnicamente todo ello, para que no pase como con la ley del ‘sólo sí es si’, que acabó siendo aplicado por unos jueces politizados. Y, según los especialistas, este trabajo podría efectuarlo un gobierno en funciones, pues sería aprobado por el parlamento, que estaría en pleno funcionamiento.

Este primer paso debería efectuarlo Pedro Sánchez, si fuera un estadista, pero al ser un oportunista, no lo hará.

Pero ese paso, antes de obtener el apoyo de Junts, sería un inicio fundamental, para abrir unas negociaciones con plenas garantías, transparencia y seguridad judicial / policial para los componentes, ya que sólo así, una vez aprobada la amnistía, Carles Puigdemont podría participar personalmente. Con este paso podríamos comprobar la buena fe y validez de la palabra de Sánchez.

En cuanto al referéndum, el art. 92 de SU constitución, dice:

92.1 – Las decisiones políticas de especial trascendencia podrán ser sometidas a referéndum consultivo de todos los ciudadanos

92.2 – el referéndum será convocado por el Rey, mediante propuesta del Presidente del Gobierno, previamente autorizada por el Congreso de los Diputados.

92.3 – Una ley orgánica regulará las condiciones y el procedimiento de las distintas modalidades de referéndum previstas en esta Constitución.

Efectivamente, según este artículo, el posible referéndum de independencia de Catalunya, podría plantearse a toda la población española, con carácter consultivo, y requiriendo la firma del rey.

Está claro que un referéndum así, no es el que queremos los independentistas catalanes, pues el referéndum debería ceñirse al pueblo catalán y ser vinculante, como se procede en los referéndums de los respectivos estatutos de autonomía de cada comunidad.

Pero, siguiendo con el art. 92, Pedro Sánchez, si fuera un estadista, efectuaría ese referéndum a nivel estatal, y el rey no tendría más opción que firmarlo, o abdicar.

Y el resultado en Catalunya, técnicamente consultivo, sería un mandato político, aun que no legal ni judicial, está claro; pero un verdadero estadista democrático lo consideraría como base de un futuro trabajo con un verdadero diálogo, claro y sincero, colaborativo.

Y ese es el segundo paso al que debería comprometerse Pedro Sánchez, con el aval de la amnistía aprobada previamente.

Pero sé que todo esto es soñar, y Pedro Sánchez es el prototipo de político castellano, con ADN conquistador, y, por eso, actuará como el barón de Münchhausen mencionado, que narró increíbles historias y aventuras, cuando, en realidad era un antihérore, un bufón, que narraba haber volado montado en la bala de un cañón; haber bailado en el estómago de una ballena, y haber salido de un gran foso, estirándose la propia coleta; etc.

Ese barón tenía su ejercito propio, formado por Gustavus de extraordinario oído, Albrecht, el forzudo, Berthold, un hombre que corría tan rápido que necesitaba grilletes para caminar con normalidad, Adolphus, de extraordinaria vista.

Y, precisamente, esos son los poderes del estado que los nefastos Mariano Rajoy y Soraya Sáenz de Santamaría, emulando a la mítica Pandora, que, para vengarse de Prometeo, abrió la famosa caja / ánfora; lanzando contra los independentistas, todas los castigos y torturas. Y todo ello, claro, apoyado por Pedro Sánchez y sus hordas, que siguen disciplinadamente esas malas artes, como la fiscalía.

Estos días he visto las películas, ‘Asteroid City’, dirigida por Wes Anderson; y la película ‘Oppenheimer’, dirigida por Christopher Nolan.

La segunda trata sobre el proyecto Manhattan, adaptando la novela ‘American Prometheus: the triumph and tragedy of J. Robert Oppenheimer’, de Kai Bird y Martín J. Sherwin.

Y vuelve a salir el mítico Prometeo, el protagonista de la trilogía: ‘Prometeo encadenado’, ‘Prometeo liberado’ y ‘Prometeo el portador del fuego’, de Esquilo (siglo V a.C.).

Pero hay fuegos y fuegos, y usos y usos, así como también hay Pandoras (y ‘Pandoros’).

En esta película se expresa el drama del científico Oppenheimer (1904 – 1967), y de la sociedad en general, y de los políticos en particular. En la película, las escenas de los políticos están filmadas en blanco y negro, para reforzar las malas artes y praxis de la mayoría de ellos.

Y, la película ‘Asteroid City’ es una comedia sobre un momento similar al del proyecto Manhattan, en los Álamos, Nuevo México. Y esa película, me parece que es el complemento, para retratar, metafóricamente, a los personajes y personajillos que se mueven por las alfombras del poder y que quieren a todos los independentistas rendidos y muertos civilmente.

Dada la actual coyuntura política, opresora y vengativa, y carente de estadistas, me parece que el mejor final de este escrito, es recordar el siguiente poema de Vicent Andrés Estellés (1924 – 1993), entendiendo USA como una metáfora de España:

Vete a casa con tus barbas sucias y tu chicle,

vete a casa con tus piojos y tus ladillas, Eres falso, todo es falso.

llevas los dólares bien escondidos, sonríes detrás de tus gafas

que no te hacen ningún servicio.

vete a casa, mezquino, con tu novela.

Vete a casa, a tu Watergate, a tu estercolero, a Nixon.

no vuelvas a Eivissa la blanca, a Mallorca. No nos haces ninguna falta. Vete.

Vete con la CIA. No te queremos.

No te queremos ver con tu mirada indiferente,

mirada por encima de nuestros cuerpos, de nuestros días, de nuestra pobreza.

¡Oh! Hijos de la gran USA.

Por qué habrá un día que no podremos más y entonces lo podremos todo;

por qué llegará un día que no te permitiremos

esperar en nuestros aeropuertos con los pies sucios encima de la mesa,

mientras bebes eucarísticamente tu refresco, tu coca.

Vete, vete y no vuelvas con los marines. Vete de una vez, ¡oh!  Hijo de la gran USA. Vete.

Vicent Andrés Estellés, ‘Sonets a Jackeley’, (Vaixell de Vidre) obra completa núm. 7, 1982

Si seguimos como hasta ahora (oprimidos, expoliados, etc.), y con los actuales políticos y sus futuros clónicos (todos de una mini ‘talla’ intelectual y moral), es decir, con la ‘democracia’ que nos ha tocado sufrir y aguantar (y que ‘nos dimos entre todos’, como dicen los carcas), realmente: ‘habrá un día que no podremos más y entonces lo podremos todo’.