Los probióticos son microorganismos vivos que pueden tener un efecto positivo en la salud intestinal. Sin embargo, son sensibles al ácido, que puede ser problemático una vez que pasan por el estómago.
La solución son cápsulas blandas entéricas que sobreviven al medio ácido y liberan sus rellenos en el intestino delgado, lo que las convierte en el formato de administración ideal para los probióticos.
Tradicionalmente, las cápsulas entéricas se fabrican en dos pasos, con un recubrimiento resistente al ácido aplicado en el segundo paso. GELITA® EC permite la producción de cápsulas entéricas en un solo paso, haciendo que el proceso sea más eficiente y menos intensivo en recursos.
Las cápsulas de gelatina blanda son uno de los sistemas de administración más comunes para productos y suplementos dietéticos de venta libre. A diferencia de otros tipos de cápsulas, están selladas herméticamente y son herméticas para proteger los ingredientes sensibles del oxígeno, la luz y la contaminación. Además, la superficie lisa y curva hace que sean fáciles de tragar, lo que atrae a los consumidores.
La gelatina no es alergénica y es altamente compatible con otros ingredientes. Es, junto con un plastificante como el glicerol, el componente principal de la cubierta de una cápsula blanda y puede disolverse fácilmente en el ambiente ácido del estómago para permitir la liberación de los ingredientes activos. Sin embargo, las cápsulas blandas estándar a base de gelatina no son adecuadas para los probióticos. Los cultivos probióticos son organismos vivos muy sensibles a los ácidos y que se degradan o destruyen fácilmente en el estómago. Los probióticos requieren un sistema de administración entérico, uno que los libere en el ambiente más neutro del intestino delgado. Esta liberación retardada se ha logrado tradicionalmente aplicando un recubrimiento resistente a los ácidos a la cápsula de gelatina, creando lo que se conoce como cápsula entérica.
Desafíos del enfoque de recubrimiento estándar
Sin embargo, existen problemas asociados con el método de recubrimiento entérico. El recubrimiento implica la aplicación de soluciones líquidas a la cápsula de gelatina, un paso que suele realizar un tercero. El proceso en sí es un desafío, y los problemas más comunes son el estancamiento y el hermanamiento.
También son un problema los defectos de la superficie como escarcha, grietas y capas de revestimiento no homogéneas. El resultado es una sobredosis rutinaria de unidades formadoras de colonias (UFC) para compensar las destruidas en el estómago. Esto significa que se necesitan cápsulas más grandes (o un mayor número de cápsulas) para garantizar una absorción suficiente del contenido activo. Se trata de un importante desperdicio de materias primas. Tampoco atrae a los consumidores, que prefieren cápsulas más pequeñas de dosis única por su comodidad y facilidad de tragar.
Los pasos adicionales del proceso también requieren recursos adicionales, como equipos dedicados, energía para el secado, etc. Si se utiliza una instalación de recubrimiento especializada de terceros, esto también genera mayores costos de transporte y una mayor huella de carbono. Además, los líquidos de recubrimiento suelen estar basados en materiales derivados de la petroquímica (como metacrílico o acetato ftalato) o sustancias químicamente modificadas agresivas, como HPMC (hidroxipropilmetilcelulosa).
GELITA® EC: la solución óptima para la entrega de probióticos
GELITA, empresa alemana líder en la fabricación y comercialización de proteínas de colágeno y grenetina a nivel mundial, ha desarrollado una tecnología única de liberación entérica llamada GELITA® EC. Este producto de gelatina proporciona un rendimiento entérico que permite la fabricación de cápsulas de gelatina que son intrínsecamente resistentes a los ácidos, dejando obsoleta la etapa de recubrimiento.
Las cápsulas GELITA® EC se basan en una mezcla patentada de biopolímeros de origen natural: gelatina pura y pectina de origen vegetal. Combinando las mejores propiedades de ambos materiales, se crea una cápsula entérica altamente resistente a los ácidos que se puede fabricar utilizando equipos existentes en un proceso de un solo paso. Requiere menos equipo, menos materias primas, ningún transporte hacia y desde una instalación de recubrimiento y menos energía y agua, todo lo cual mejora la huella de carbono del producto.
Las pruebas demuestran que las cápsulas fabricadas con GELITA® EC cumplen con los parámetros de disolución de la farmacopea de EE. UU. (UE). Esto significa que permanecen intactos después de una (dos) horas en líquido gástrico simulado a una temperatura corporal central de 37 °C, pero se disuelven completamente en un máximo de 45 minutos en líquido intestinal simulado. El uso de un sistema de focalización intestinal tan eficaz significa que es posible reducir significativamente el tamaño de la cápsula y la cantidad de llenado. Ya no es necesaria una costosa sobredosis y los consumidores se benefician de la comodidad de una solución diaria de suplementos dietéticos.
Desde el punto de vista del consumidor, las cápsulas más pequeñas son más deseables porque son más fáciles de tragar. Como beneficio adicional, las cápsulas GELITA® EC son transparentes y claras, una característica popular entre los consumidores que encuentran las versiones recubiertas demasiado opacas y menos atractivas visualmente.
