Sabemos que la libertad de expresión es uno de los derechos humanos fundamentales (art. 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos) y, en ese marco, cada uno nos movemos, atendiéndonos a las consecuencias por parte del receptor: pérdida de confianza, malestar o satisfacción, etc. Y, penalmente, el límite es el código penal.
Y los políticos no son una excepción, evidentemente. Así, en su libertad de expresión, constantemente se mueven en el filo de la navaja, pues pretendiendo satisfacer y agradar a unos, a los suyos, atacan y critican a los otros. Crítica que puede ser oportuna, más o menos graciosa u ocurrente, o desafortunada.
Y entre los políticos, como en todos los colectivos, hay personas amables, educadas, cultas y otras que son todo lo contrario, que son personas tóxicas, prepotentes, con una difícil comunicación, que busca su máximo beneficio con el máximo perjuicio a sus oponentes.
Consultando por internet, veo que hay diferentes tipos de personas tóxicas: ambivalentes, negativas, tendentes a la procrastinación (palabra que ‘gusta’ mucho a un compañero de manifestación), celosas, prepotentes, víctimas, perfeccionistas, narcisistas. Y se identifican las señales para reconocer a una persona tóxica: son egoístas y egocéntricas; culpabilizan en extremo; tienen deficiencias para ser empáticas; inhiben la expresión emocional; generan emociones negativas; etc.
A mi modo de ver, todos estos tipos de personas son manipuladoras, que generan estrés en su entorno, pues afectan negativamente en su entorno.
Todo este preámbulo viene al caso de la intervención que efectuó ayer la eurodiputada catalana Dolors Montserrat i Montserrat, del Partido Popular, en el debate efectuado en el parlamento europeo, sobre la amnistía. Un debate propuesto por la derecha española (PP, Vox y Ciudadanos), que convirtieron el parlamento en un circo mediático, compitiendo para ver quién decía la animalada más grande.
Como indiqué en la nota final de mi escrito de ayer, algunos diputados insultaron al president Carles Puigdemont, destacando Hermann Leopoldo Tertsch y del Valle de Lersundi (Vox), (hijo del austríaco Ekkehard Tertsch, que trabajó con el jefe de prensa nazi Josef Hans Lazar; y, paradojas de la vida, miembro del partido comunista de Euskadi) llamándole criminal, prófugo, golpista, con total falta de decoro.
Un debate que, como aspecto positivo, sólo fue el de la internacionalización del problema entre el reino español y Catalunya, ya que no se efectuó ninguna votación, pues no se podían definir sobre una proposición de ley (deberán esperar a que sea una ley efectiva); aún así, el parlamento europeo, y el comisario de justicia (Didier Reynders) hicieron un triste papel al mostrar su tendencia de derecha extrema, pues el comisario concluyó con su mantra: ‘la situación de Catalunya continúa siendo un asunto interno de España que se ha de gestionar en el marco de la constitución española’. Así que nunca, y nunca es nunca, los independentistas catalanes podremos esperar una ayuda, un soporte de ese club de estados.
Pero en este escrito quiero centrarme en la mencionada Dolors Montserrat, ya que su perorata, a mi modo de ver, fue la ‘más especial’, por su toxicidad.
Esa eurodiputada, catalana nacida en 1973, licenciada en derecho, y desde el 2003, ostentando cargos públicos (regidora, diputada, ministra de sanidad, eurodiputada), pero, fundamentalmente, es hija de Dolors Montserrat i Culleré, empresaria y política catalana (regidora y diputada al Parlament de Catalunya desde 1988 al 2015 por el PP, que, para no desentonar en su partido, ha sido una defraudadora: en 2016 figuraba en la lista de morosos con una deuda de 4,3 millones de euros, una deuda al fisco, publicada por la agencia tributaria, correspondiente a la empresa Montserrat Operador Logístico, s.l.; otras empresas cuyo administrador único era Jaume Montserrat Montserrat, hermano de Dolors (que era apoderada), también han figurado en ese registro, por ejemplo, su empresa Cargo – Trans Montserrat, s.l., con una deuda con el fisco de 1,3 millones de euros. En total, en 2016, la deuda de 6,7 millones de euros pendientes de liquidar a la administración (hacienda, seguridad social y otros organismos públicos)
Y con esos mimbres ideológicos y morales, no se puede hacer más que el cesto que viene haciendo la eurodiputada en cuestión; y claro, quien hace un cesto hace ciento, pues no tiene freno.
Me centro en esa ‘figura’ pues su discurso de dos minutos de ayer, me tocó especialmente la fibra, pues tomó el poema ‘Oda a Espanya’, escrito en 1898 por Joan Maragall i Gorina, con motivo de la pérdida de Cuba; una crítica a la política española, pidiendo, como catalán, que no se enviasen más tropas a la guerra de Cuba.
El poema, traducido al castellano es el siguiente:
‘Oda a España
Escucha, España, la voz de un hijo
que te habla en lengua no castellana;
hablo en la lengua que me ha legado
la tierra áspera;
en esta lengua pocos te hablaron:
en la otra, demasiado.
Demasiado de los saguntinos
y de los que mueren por la patria;
y por tus glorias y tus recuerdos,
recuerdo y gloria de cosas muertas,
triste has vivido.
De distinta manera quiero hablarte.
¿Por qué derramar la sangre inútil?
la sangre es vida, si está en las venas,
vida hoy, vida para los que vengan;
vertida, es muerte.
Demasiado pensaste en tu honor
y escasamente en tu vida:
tus hijos, trágica, diste a la muerte.
Mortales honras te satisfacían;
tus fiestas eran tus funerales,
¡oh, triste España!
Yo vi barcos zarpar repletos de hijos que a la muerte
entregabas:
sonriendo iban hacia el azar,
y tú cantabas junto a la mar
como una loca.
¿Dónde tus barcos? ¿Dónde tus hijos?
pregúntalo al Poniente, a la ola brava:
perdiste todo, a nadie tienes.
¡España, España, vuelve en ti,
rompe el llanto de madre!
Sálvate, sálvate de tantos males:
que el llanto te haga alegre, fecunda y viva:
piensa en la vida que te rodea;
alza la frente,
sonríe ante los siete colores del iris.
¿Dónde estás España, dónde que no te veo?
¿No oyes mi voz atronadora?
¿No comprendes esta lengua que entre peligros te habla?
¿A tus hijos no sabes ya entender?
¡Adiós, España!
Pues bien, este poema, figura en el imaginario cultural catalán, como una obra maestra, plena de dignidad y de moral.
Y que Dolors Montserrat (hija), utilizase ayer este poema para reinterpretar su odio, diciendo cosas como:
‘Escucha, Europa, mi voz es la de una catalana que asiste atónita a la ruptura de la democracia.
Escucha, Europa, la voz de quienes están en contra de una amnistía que crea ciudadanos de primera y de segunda.
Escucha, Europa, el grito de millones de españoles que dicen no a una amnistía que termina con el estado de derecho y la separación de poderes.
Escucha, Europa, el latido de nuestras leyes, de nuestra constitución y de nuestro estado de derecho. Escucha el lamento de las instituciones españolas, todas sometidas al control del gobierno.
Escucha, Europa, los padres fundadores, no permitas que Sánchez convierta a España, el sueño europeo, en una pesadilla populista.
Escucha, Europa, el grito de millones de españoles que dicen no a una amnistía que acaba con la igualdad ante la ley, la independencia judicial y la separación de poderes. Una amnistía que crea ciudadanos de primera y de segunda. Escucha el clamor de las calles y plazas de España, una nación que defiende con orgullo su libertad y democracia porque hoy están siendo duramente hostigadas y atacadas.
Escucha, Europa, el desmantelamiento de la democracia en España por el pacto entre Sánchez y un prófugo de la justicia. Sánchez, para conseguir los siete votos que le permitan gobernar y Puigdemont, para lograr la amnistía de un golpe a la democracia y gravísimos delitos de corrupción y terrorismo.
Escucha, Europa, recuerda que el propio expresidente socialista Felipe González, dijo que no cabía en la constitución, no y no a la amnistía. Incluso el propio Pedro Sánchez que dijo que no cabía en la constitución y que traería de vuelta a Puigdemont a España para ser juzgado. Sólo su falta de escrúpulos y su oportunismo político son mayores que sus engaños.
Eso será el fin de los contrapesos con las instituciones españolas sometidas al control del gobierno y la denuncia de todos los jueces españoles contra un pacto de lawfare que convierte a los jueces en delincuentes y a los delincuentes en jueces.
Escucha, Europa, la vergüenza de España, el único gobierno europeo sostenido por comunistas, independentistas y ex terroristas’.
Como he dicho, la libertad de expresión es un derecho fundamental; pero aprovecharse de un poema con alto simbolismo en Catalunya, es querer hacer un daño añadido a la cultura catalana, y a los catalanes. Es verdad que los catalanes unionistas españoles desconocen o no valoran ese poema. Pero Dolors Montserrat, al elegirlo, sabía a quién quería dañar e insultar. Quizás piense que eso le da puntos, pero está muy equivocada, pues sus votantes catalano-españolistas, no lo valorarán, por ignorancia. Lo que consigue es polarizar el caldo político.
Y eso se lo agradecerá su jefe José María Aznar, que dijo: ‘el que pueda hacer, que haga, el que pueda aportar, que aporte, el que se pueda mover, que se mueva, la inhibición no tiene hueco’
Pues esos políticos españolistas, piensan como se expresa en la siguiente fábula de Esopo:
‘Los dos enemigos
Dos hombres que se odiaban entre si, navegaban en la misma nave, uno sentado en la proa y otro en la popa. Surgió una tempestad, y hallándose el barco a punto de hundirse, el hombre que estaba en la popa preguntó al piloto que cuál era la parte de la nave que se hundiría primero.
La proa, dijo el piloto.
Entonces, repuso este hombre, no espero la muerte con tristeza, porqué veré a mi enemigo morir antes que yo’
Dolors Montserrat, asimismo, actúa como la mujer del siguiente cuento:
‘Trigamia
Un día, una dueña de casa buscaba leña para su cocina, estaba cerca del río, cortando una rama de un árbol caído, cuando se le escapó el hacha de las manos y fue a parar al fondo del río.
La mujer suplicó a Dios, y Él apareció y le preguntó: ¿Por qué estás llorando, mujer?
La mujer respondió que su hacha se había caído al río.
Dios entró al río, sacó un hacha de oro y le preguntó a la mujer: ¿Es está tu hacha?
La mujer respondió: No, Dios, no es esa.
Dios entró nuevamente y sacó del río un hacha de plata y volvió a preguntar: ¿Esta es tu hacha?
No, respondió la mujer.
Dios volvió nuevamente al río y sacó un hacha de hierro y madera y de nuevo preguntó: ¿Es esta tu hacha?
Sí, respondió ella, esta es.
Dios estaba tan contento con la sinceridad de la mujer que la mandó de vuelta a su casa, regalándoles las dos otras hachas, la de oro y la de plata.
Otro día, la mujer y su amado esposo estaban paseando por los campos, cuando él tropezó y cayó al río. La mujer, que no sabía nadar, se puso a suplicar a Dios. Él apareció y le preguntó: Mujer, otra vez tú ¿por qué estás llorando?
La mujer respondió que su esposo había caído al río y se había ahogado. Inmediatamente, Dios se tiró de cabeza al río, sacó de las mechas a Brad Pitt y le preguntó a la mujer: ¿Es este tu esposo?
Sí, si, asintió la mujer.
Entonces Dios se enfureció: eres una mujer mentirosa, exclamó.
Pero, rápidamente, la mujer le explicó: Dios, usted perdone, pero fue un malentendido. Si yo hubiese dicho que no, entonces usted me habría traído a Mel Gibson del río y si le hubiera vuelto a decir que tampoco era él, Usted me habría traído a mi marido, y cuando dijera que sí, usted me mandaría para mi casa con los tres hombres. Más yo soy una humilde mujer y no podría cometer TRIGAMIA … por eso es que le dije que sí al primero de ellos…
Dios halló justo el comentario de la mujer y la perdonó.
Moraleja: la mujer mintió tan bien, que hasta Dios se la creyó’
Así es Dolors Montserrat, una muestra más de que en el reino español hay demasiados dinosaurios y rinocerontes, como expliqué ayer. Y todos ellos TÓXICOS.
Y todos ellos deberían figurar en el Museo del Arte Prohibido (Barcelona), que visité ayer, y en el que hay todo tipo de obras que han sido censuradas, agredidas, denunciadas o retiradas; y, entre ellas, cómo no, la figura de cera del dictador y asesino Francisco Franco, dentro de una nevera que simulaba ser de Coca-cola.