El escrito de ayer lo titulé ‘Más de lo mismo’, en referencia a la política institucional y los últimos pactos; y, ante este tsunami continuista constitucionalmente hablando, los independentistas de base debemos sobreponernos a la depresión actual, inyectarnos ánimos directamente a la vena, para continuar, aumentar y mejorar nuestro activismo, al objeto de adaptarnos a los retos futuros de lo que ya se denomina ‘post procés’. Sobre la necesidad de redefinirnos, hay importantes pensadores independentistas que coinciden.
Hace unos días, tras el pacto entre PSOE/Junts, una compañera de la manifestación diaria en la avenida Meridiana de Barcelona me comentó, muy acertadamente, que ‘hemos perdido la ilusión, al descubrir que los Reyes Magos son los padres’, y es verdad, para muchos ya no será lo mismo.
Es verdad que, de momento apenas conocemos el pacto en cuestión, y desconocemos su trastienda, por lo que será preciso ver el recorrido de la mesa de diálogo entre esos dos partidos, con mediadores internacionales, pues, espero, que poco a poco nos hagan re-ilusionarnos, ya que no quiero pensar, como dicen algunos, que Puigdemont ha hecho ‘un Tarradellas’ (*). Con relación a las otras dos mesas de diálogo conseguidas por ERC, no confío en absoluto, vista la historia reciente.
(*) Josep Tarradellas i Joan (1899 – 1988), president de la Generalitat que, en 1985, acabó siendo nombrado marqués, por el rey Juan Carlos I.
Respecto al movimiento independentista de base, ayer, en nuestro pequeño colectivo de Meridiana Resisteix (Resiste), hicimos un primer debate, que iremos madurando y profundizando poco a poco, sin prisas ni pausas. En ese debate, otra compañera apuntó el referente de las Madres de Mayo, como modelo de resistencia.
Efectivamente, la ‘Asociación Madres de la Plaza de Mayo’, es un claro ejemplo de persistencia, de mantenimiento inequívoco de la voluntad de exigencia de justicia, por lo que debemos tomarlo como referente y, por eso, seguidamente me detendré un poco sobre su historia. Pues debemos analizar sus problemas y divisiones, para aprender y evitar caer en algunos errores, que también los cometemos nosotros.
‘Esa asociación, creada en 1976 (pero formalizada el 30 de abril de 1977), por Azucena Villaflor de Devincenti, Esther Ballestrino, María Ponce y Josefina García de Noia, tenía como objetivo recuperar con vida de los detenidos desaparecidos por la dictadura argentina del asesino Jorge Rafael Videla, y señalar a los responsables de los crímenes contra la humanidad y buscar su enjuiciamiento.
Desde entonces, todos los jueves repiten una caminada (originada cuando las fuerzas de seguridad les exigieron ‘circular’) alrededor del monumento central de la plaza, delante de la Casa Rosada. Y se distinguen usando pañuelos blancos, en recuerdo de los pañales de sus hijos desaparecidos, en recuerdo del movimiento de las ‘Abuelas de la Plaza de Mayo’, que tenían como objetivo recuperar los centenares de niños secuestrados por las autoridades militares durante la dictadura y, también, en recuerdo de la asociación ‘Hijos’, formada por los hijos de los detenidos desaparecidos que desean continuar la lucha de sus padres y de sus abuelas.
Actualmente, las ‘Madres de la Plaza de Mayo’ están divididas en dos grupos, el grupo mayoritario presidido por Hebe de Bonafini y denominado con este nombre, y las ‘Madres de la Plaza de Mayo Línea Fundadora’, que fue presidida por Marta Vásquez, hasta su muerte, en 2017.
El 26 de enero de 2006 la denominada ‘marcha de la resistencia’ dejó de realizarse por parte de la agrupación liderada por Hebe de Bonafini, que afirmó que ‘ya no hay un enemigo en la casa del gobierno’; otras organizaciones de derechos humanos no estuvieron de acuerdo y continúan realizándola’
(fuente Wikipedia)
Me parece que la división, la fragmentación, es consustancial de todas las comunidades humanas, pues es evidente que los momentos más críticos fortalecen las uniones, por encima de otras consideraciones, pero, pasado ese momento más crítico, surgen las disensiones. Y en esas estamos también los independentistas catalanes, tras la rendición de ERC, y, ahora, peor todavía, tras el pacto citado entre el PSOE/Junts.
Como hemos visto, Hebe de Bonafini suprimió la marcha, por considerar que ya no había enemigos en el gobierno; y, claro, tras el pacto, ahora tendremos a un Pedro Sánchez (PSOE) investido por Junts (ERC ya era sabido), así que podríamos pensar como Hebe; pero, no, en Argentina, las consideradas ‘Línea fundadora’ persisten en su idea inicial, pues no se ha conseguido el objetivo deseado. Y en esas estamos la mayoría, que consideramos que no podemos dejar de manifestarnos, pues, en realidad, ni tenemos la amnistía (que, si llega, será descafeinada y limitada), y la independencia, ya queda para …
Una primera lección, es que toda división debilita. Lo hemos visto con las negociaciones individualizadas por parte de ERC y Junts; esto es de críos, los intereses personales y de partido deberían quedar para el día que tengamos la República Catalana, hasta entonces, debemos ir juntos. Parece mentira que no vean que esa división es lo que buscan los españolistas.
Volviendo con las Madres de Mayo, vemos que tienen el distintivo del pañuelo blanco, y nosotros tenemos la estelada (la bandera independentista catalana), y esa estelada es el mejor símbolo identificativo, así lo perciben los unionistas, pues su visión les hace aflorar a sus demonios internos (y externos) y todos sus sarpullidos.
Evidentemente, el motivo y objetivo de las Madres de Mayo es muy diferente al de nuestro movimiento independentista, pues, al tratar de recuperar a sus familiares, implicaba directamente a todas las generaciones; así, vemos que los hijos se involucraron creando otra asociación paralela. Y, muy importante, en estas últimas décadas, las Madres de Mayo están efectuando unas campañas de sensibilización y educación infantil, sobre la defensa de los derechos humanos.
Ahora bien, nosotros también tenemos a nuestra juventud implicada, mayoritariamente, en los CDR; pero las campañas de sensibilización – ilustración debemos dirigirlas, exclusivamente, a los adultos, obviamente. Y me parece que deberíamos utilizar todas las redes sociales, para difundir mensajes claros y objetivos sobre las ventajas de la independencia, obviando mensajes románticos que los jóvenes no encuentran nada atractivos. Deberíamos aprovechar todo momento para hacer pedagogía al respecto, evitando el centrarnos, exclusivamente, en el ‘facherío’ peninsular.
Otro aspecto relevante, es que las Madres de Mayo, desde su constitución, se manifiestan los jueves, es decir, un día a la semana; como hacen algunos colectivos en Barcelona y otros puntos de Catalunya; mientras que en la Meridiana seguimos manifestándonos diariamente (y este tema sería, a mi modo de ver, otro aspecto a debatir, de cara a un largo futuro)
Pero, en definitiva, me parece que debemos replantearnos, debemos enmarcar nuestras acciones en una estrategia global.
No debemos caer en el desánimo, sabemos que la lucha será larga. Y somos conscientes de que si nuestros movimientos de base, tras redefinirnos, persistimos, en el momento preciso surgirán nuevas personas que se ilusionarán y que nos volverán a re-ilusionar.
En este momento, estamos en el ojo del huracán de la tormenta perfecta, pues esta mañana hemos oído el discurso de investidura de Pedro Sánchez, presentándose como el Supermán del diálogo, que ha conseguido pacificar a los catalanes, y que ahora, con la ‘medida de gracia’ de la amnistía, se culminará la buena senda. Esa forma de hablar, diciendo frases ‘obiter dicta’, de pasada, con argumentos tangenciales, es deprimente.
Como vemos, sigue en su error, pues la amnistía no es una medida de gracia, como ha repetido, ya que no se trata de perdonar nada, máxime cuando muchos de ellos ‘todavía’ no han sido condenados. Eso son los indultos. La amnistía, bien entendida, es el reconocimiento, por parte del estado, de no haber hecho las cosas bien. Así que Pedro Sánchez no tiene esa potestad de perdonarnos. Esa es su lectura narcisista desde el poder, pues ha vuelto a reincidir en la mejoría de la sociedad catalana respecto al 2017, y en la reconciliación. Y, tristemente, ese es el abrazo del oso que ha hecho Pedro Sánchez con los partidos independentistas.
Así, los independentistas de base nos encontramos entre Escila y Caribdis, como narraba la mitología griega, citando a las vigilantes del estrecho de Mesina:
‘Caribdis (succionadora) era un horrible monstruo marino, femenino, hija de Poseidón y Gea, que tragaba enormes cantidades de agua tres veces al día y las devolvía otras tantas veces, adoptando así la forma de un remolino que devoraba todo lo que se ponía a su alcance. Habitaba junto a Escila, otro monstruo marino femenino, en un estrecho paso marítimo. Los dos lados del estrecho estaban al alcance de una flecha, tan cercanos que los marineros que intentaban evitar a Caribdis, pasaban demasiado cerca de Escila y viceversa’.
(fuente: Wikipedia)
Tradicionalmente, la expresión ‘entre Escila y Caribdis’ significa estar entre dos peligros, de forma que alejarse de uno hace que se caiga en el otro.
Y en esas estamos los independentistas de base, pues nos encontramos entre el peligro de caer en los brazos del oso Pedro Sánchez, que actúa como un gran agujero negro que todo lo engulle, o, en caso contrario, caer en el tedio soporífico del sofá de casa.
En la Odisea, Homero (s. IX a.C.) explicó que la hechicera Circe aconsejó a Ulises que, al mando de sus argonautas, tenía que pasar ese estrecho, diciéndole:
‘es mejor que te pegues al pie de la roca de Escila y aceleres la nave al pasar. Más te vale, como mucho, perder solo seis hombres, que hundirte tú mismo con todos’
Es evidente que, siguiendo con nuestras manifestaciones, de forma simbólica (eso es fundamental) pero también efectiva, nos pasará como a Ulises, tendremos pérdidas, es inevitable; pero el grueso de la tripulación superará el estrecho.
Por eso precisamos mejorar nuestra inteligencia emocional, pues, como dijo Sun Tzú (Sunzi) (544 a.C. – 496 a.C.):
‘La victoria completa se produce cuando el ejército no lucha, la ciudad no es asediada, la destrucción no se prolonga durante mucho tiempo, y en cada caso el enemigo es vencido por el empleo de la estrategia’
Pero eso requiere que nuestra inteligencia emocional nos permita vencer nuestros sentimientos y emociones más básicas, como la envidia entre compañeros de viaje, pues el conflicto siempre es innecesario y desgasta demasiado. Y, muchas veces, nuestro peor enemigo somos nosotros mismos.
No podemos aceptar que nuestros partidos nos traten de forma infantil, no podemos aceptar que los ‘líderes’ nos vengan con el argumento de frenar a la derecha. En el discurso de Pedro Sánchez, hemos visto como ha sacado pecho de su gran victoria en Catalunya, y eso demuestra, una vez más, el gran error de los 200.000 independentistas que votaron al PSC/PSOE, para castigar a sus partidos; así como los 700.000 que se abstuvieron. Frenar a la derecha es un mantra que se remonta a muchas décadas, y no es más que una ‘excusatio non petita, accusatio manifesta’, pues, cogerse a ese lema, es mostrar que no tienen objetivo ni estrategia.
En definitiva, que tenemos mucho trabajo por delante, si no queremos caer en la insignificancia, si queremos mantener la llama para que, más pronto que tarde, podamos pasar la antorcha a las nuevas personas que se vean con fuerzas para seguir la carrera de fondo, y así, alejarnos de la tormenta perfecta que tenemos ahora.
Nota final: en mi escrito de ayer utilicé indistintamente los términos de proposición y proyecto de ley, y hay una clara diferencia, pues las primeras son presentadas por el congreso de los diputados (como han hecho con la ley de la amnistía) y las segundas por el gobierno, y ambas tienen diferencias notables en su tratamiento en las cámaras.