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La amnistía imprescindible

Amadeo Palliser Cifuentes
amadeopalliser@gmail.com

Dada toda la información que va apareciendo y confirmando la guerra sucia que el estado español aplicó y aplica contra el movimiento independentista, no me cabe ninguna duda de que la amnistía es obligada, pues todos los juicios y todas las causas están contaminadas; y este pensamiento es el punto de partida del presente escrito, el de llegada es peliculero.

Efectivamente, la información (con documentos y audios) sobre la forma de actuar no solo de las cloacas del estado, si no, también, y más grave todavía, de los más altos cargos de todos los poderes: político, judicial policial, mediático, etc., sin olvidar la monarquía, evidencia que el estado español, cuanto mínimo, precisa un ‘reset’, y si no se resetea, si no se reinicia  totalmente, mejor que venga un meteorito y acabe con todo.

No queremos restauraciones borbónicas, ya que la historia nos ha demostrado que todas han sido nefastas, como la restauración absolutista implantada entre los años 1814 y 1833, que Fernando VII, ‘el Deseado’ (1784-1833) decretó ilegales las Cortes de Cádiz y la Constitución de 1812; pues en 1823, al implantar el absolutismo con el auxilio de Luis XVIII de Francia y del ejército de Louis-Antoine de France, duque de Angulema (1775-1844), puso fin al Trienio Liberal; y todo ello, desgraciadamente, al grito popular de ‘vivan las caenas’ (cadenas) propulsado desde Sevilla; mostrando, una vez más lo manipulable que es el pueblo, dada su incultura; un pueblo que cometió excesos y tropelías persiguiendo a los liberales ‘afrancesados’. Otras restauraciones borbónicas se dieron en 1874, con el golpe de estado de Arsenio Martínez-Campos Antón (1831-1900), para finalizar la Primera República española, y restaurar a Alfonso XII (1857 – 1885); y en 1975 la restauración borbónica efectuada por el dictador y asesino Francisco Franco Bahamonde (1892-1975), dejando como heredero a Juan Carlos I.

También tuvimos la mala experiencia de la transición, la última restauración borbónica (hasta el momento), que mantuvo a todos los personajes del régimen franquista. En la actualidad, todos ellos están muertos o jubilados, pero marcaron el carácter, el espíritu y la forma de proceder de sus respectivos cuerpos funcionariales, reproducidos endogámicamente y mediante unos esmerados ‘criterios de selección interna’; por lo que, en la práctica, el sistema, en su conjunto, sigue reproduciéndose de forma fractal, creando y reproduciendo clónicos del original.

Y claro, sabiendo que la corona fue impuesta por el asesino y dictador Francisco Franco, que, como indiqué en mi escrito de ayer, al nombrar a Juan Carlos como heredero, manifestó que así quedaba ‘todo atado y bien atado’, y ya en el lecho de muerte, según explicó el propio Juan Carlos: ‘Franco me cogió la mano y me dijo, Alteza, la única cosa que os pido, es que preservéis la unidad de España’, no me dijo haz una cosa u otra, no: la unidad de España, lo demás… Si lo piensas, significa muchas cosas’.

Por eso, el actual representante de la empresa familiar borbónica, es decir Felipe VI, no deja de representar el régimen franquista, ya que no ha renegado de su pasado. Asimismo, la propia constitución, en su artículo 56, especifica que el rey es el símbolo de la unidad y permanencia del estado; es decir, se mantiene el núcleo duro del mencionado testamento político de Franco. Y a pesar de ello, el pueblo se siente más siervo que ciudadano, pues implícitamente, sigue pensando que ‘vivan las caenas’ (cadenas).

Y siguiendo con esa ‘filosofía’ marcada a fuego en sus negras almas, todos esos poderes tienen un doble objetivo máximo, es decir, mantener la corona y la unidad del reino, y se consideran obligados y legitimados para anteponer esos dos objetivos a cualquier concepción ética, moral y democrática. Y por eso, para ellos, el mayor delito concebible en el mundo mundial, más aún, en la galaxia, es que alguien pueda cuestionar o replantear esa sacrosanta unidad. Y para defender esa unidad sacralizada, todo vale, como hemos visto y sufrido los independentistas catalanes.

Por todo ello, y una vez desveladas y confirmadas las malas artes, las mentiras, las manipulaciones, las invenciones, etc., que han utilizado contra nuestro movimiento, me parece que es inaceptable aceptar cualquier proceso, causa, sentencia, etc., pues están contaminadas y condicionadas por toda esa maraña tramposa.

Todos los responsables y ejecutores de ese procedimiento aplicado, deben ser encausados criminalmente; pues, actuando conscientemente de forma mafiosa, encima se vanagloriaban, como presumía la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, en un acto de campaña electoral en Girona el 15 de diciembre del 2017:

‘(…) el presidente del gobierno Mariano Rajoy ha conseguido que ERC y Junts per Catalunya no tengan líderes porque están descabezados (…) ¿o acaso se pensaban que Rajoy y el PP no iban a tener arrestos del aplicar el estado de derecho? (…) ¿quién ha hecho que hoy por hoy ERC, Junts y el resto de independentistas no tengan líderes porque están descabezados? Mariano Rajoy y el PP’; y tras vanagloriarse de haber cerrado las embajadas catalanas, señaló que el Diplocat debería llamarse ‘Diplocat en liquidación’ (…) ¿quién manda a liquidación al independentismo? Mariano Rajoy y el PP ¿quién se merece los votos para seguir liquidando el independentismo? Mariano Rajoy y el PP, En Catalunya había unos cuantos que no eran capaces de gobernar y mintieron, cuando dijeron que iban a construir una república. Se pensaron que podían hacer lo que quisieran, pero se toparon con Mariano Rajoy y el PP. ¿O es que acaso pensaban que el estado de derecho no funcionaba en España?  

Y efectivamente, sabemos que, estrictamente hablando, en puridad, el estado de derecho no funcionó, como se ha demostrado hoy día.

Por eso, debe es preciso, necesario e inexcusable, que se aplique una amplísima amnistía para limpiar y despenalizar a todos los independentistas encausados de una u otra forma. Esa amnistía es imprescindible si el estado pretende mantener una imagen mínimamente homologable con las democracias occidentales.

Y esa amnistía no debe aplicarse a los responsables del mal uso de ese estado de derecho, desde Mariano Rajoy hasta el policía de base, y sin olvidar al propio Felipe VI, promotor del ‘a por ellos’, por lo que ya está tardando en abdicar en favor de su hija, si es que quiere mantener su negocio familiar borbónico.

Y claro, esa depuración debería incluir también a Pedro Sánchez y a los principales líderes del PSOE que, por acción u omisión, permitieron y permiten ese mal funcionamiento del estado de derecho, como vimos apoyando la aplicación del 155 y, ahora, espiando a los partidos independentistas.

No podemos dejarnos engañar, el PSOE forma parte del estado heredero del régimen. Y ahora, Pedro Sánchez, obligado por la aritmética parlamentaria, se ve obligado a aceptar las comisiones de investigación en el congreso de diputados, pero no lo hace por convicción, lo hace para mantenerse en la poltrona. Buena prueba de eso es que ni la fiscalía ni la abogacía del estado han iniciado gestiones legales para investigar todas las pruebas demostradas; y hoy mismo, se ha negado a incluir las modificaciones propuestas por ERC y Junts, para que la ley de amnistía incluya a los CDR y a los implicados por el caso Tsunami, pues, según ha dicho el polichinela Félix Bolaños, ministro de presidencia y de justicia, ‘la amnistía, para ser constitucional, no debe incluir delitos graves’. Es decir, un claro reflejo de que siguen con la neurona postfranquista, y que se limitan a tramitar la ley de la amnistía por ‘hacer de la necesidad virtud’, no por convicción.

Pero no soy iluso, y sé que no pasará nada, un poco de ruido aquí en Catalunya, y el silencio y la oscuridad total en el resto de España; y, dentro de unas semanas, todo se olvidará, pues saldrá otra noticia que tapará esta. Así es la desgraciada realidad y la población seguirá tan contenta pensando que ‘vivan las caenas’ ya que, a pesar de ellas, no se está tan mal, pues tenemos el ‘pan y circo’.

Por todo eso, me parece muy ilustrativo tratar, mínimamente, la película que vimos ayer, ‘Perfect Days’, del director Wim Wenders, en la que el protagonista Hirayama, es una persona extremadamente rutinaria, asocial y solitaria, que se dedica a limpiar los WC públicos de Tokio, trabajo que hace con cuidado y mimo; y, al acabar su jornada laboral, se dedica a leer y oír música, para enriquecer su vida.

Evidentemente, hacer bien el trabajo, cualquier tarea, es ideal y positivo, pues, como explicó Ernst Friedrich Schumacher (1911 – 1977), en su libro ‘Smail Is Beautiful’ (1973) ‘lo pequeño es hermoso’.

El mundo intelectual del protagonista se observa en las fotografías que hace de unos árboles, del cuidado con el que cuida a sus plantas, pero destaca, fundamentalmente, en la cultura norteamericana, como vemos por su biblioteca y sus momentos de lectura dedicados a William Cuthbert Faulkner (1897 – 1962) y a Patricia Highsmith (1921 – 1955), pero, especialmente, lo oímos a lo largo de toda la película, ya que cada día, al coger el coche para iniciar la jornada laboral, pone una casete de su gran colección, y la escucha mientras se desplaza. Estas canciones que conforman la banda sonora de la película me parecen muy acertadas y adecuadas al personaje y su momento.

En concreto, esas canciones son:

‘The House of the Rising Sun’ (The Animals); ‘Redondo Beach’ (Patti Smith); ‘Walkin Thru the Sleepy City’ (The Rolling Stones); ‘Pale Blue Eyes’ (The Velvet); ‘Sittin On the dock of the Bay’ (Otis Reding); ‘Aoi Sakana’ (Sachiko Kanenobu); ‘Sunny Afternoon (The Kings); ‘Brown Eyed Girl’ (Van Morrison); ‘Perfect Day’ (Lou Reed) y ‘Feeling Good’ (Nina Simone)

Estas canciones me parecen muy buenas, todas, por eso, seguidamente transcribo el enlace de todas ellas:

https://youtube.com/playlist?list=PLVVG-UjfanKf83MrW06ov-YokysuuMRqu6&si=7hd-Mi7K0VQEob1WI

Pues bien, el lector se preguntará a qué viene haber pasado de la corrupción del estado español a esta película, por lo que seguidamente expongo los motivos que me han llevado a efectuar este salto.

El protagonista de la película, Hirayama, por lo que se va entendiendo en la película, había tenido un importante desengaño y, como consecuencia, decide empezar de nuevo, encerrándose en sí mismo.

Y eso es lo que ha pasado en el mundo independentista catalán, pues muchos se desilusionaron y, ahora, con las noticias que vamos teniendo, con toda seguridad, aún se distanciarán más de la información y de los partidos políticos. Y eso es un gran error, pues no deja de ser una asunción del que ‘vivan las caenas’.

Estoy convencido de que debemos seguir manifestándonos, escribiendo, participando en las redes sociales, etc., es decir, todo lo que esté a nuestro alcance, para seguir trabajando contra el estado opresor. Y estos trabajos, por pequeños e insignificantes que puedan parecer, debemos efectuarlos con cuidado y esmero y, sobretodo, procurando que tengan la mayor resonancia posible.

Y también me parece relevante que los independentistas catalanes, después de tantos años de máximo estrés y de tanta movilización, necesitamos momentos de desconexión, que nos permitan enriquecernos intelectualmente, y con eso enlazo con las lecturas y las canciones de la película en cuestión. Pero, sobretodo, no debemos abandonar o dedicar menos tiempo a la familia y a los amigos, ya que son la base de nuestras vidas; y en eso me alejo totalmente del personaje mencionado.

Y como último motivo por lo que estoy mencionando esta película, es para publicitar la banda sonora, las canciones que he citado, pues me parecen muy buenas y, como estudié en un curso de musicoterapia (en la Era Jurásica), determinada música tiene unos aspectos muy positivos, y por eso me parece adecuado compartir ese enlace.