Estos días vamos viendo que se va incrementando la presión política para conseguir la investidura de Salvador Illa (PSC/PSOE) como president de la Generalitat; y no deja de ser vergonzante el tipo de mensajes al respecto, como explico a continuación.
Anteayer, en una entrevista a Radio 4, Salvador Illa dijo:
‘No, no m’abstindré. No me abstendré. I’m not going to support Puigdemont. Je ne pas voterai Puigdemont. Se lo digo en todos los idiomas: no lo haremos, porque los catalanes no han votado esto’.
Por su parte, Pedro Sánchez, ayer, en la sesión de control del gobierno, en el congreso de los diputados, animó a ERC, diciendo que:
‘(…) estos últimos seis años los socialistas, Sumar y ERC habían desarrollado una asociación estratégica en todo lo que tiene que ver con el avance de los derechos sociales, que querría que se repitiera en Catalunya, pues es una cosa que aprecio y que valoro (…) ojalá nos podamos entender en Catalunya, porque vale la pena que podamos hacer gobiernos transversales donde, al final, el progreso, los derechos sociales y la convivencia prevalen sobre otras cuestiones (…) Me sería muy fácil decirle (a Rufián) que después de la votación de la mesa del Parlament de Catalunya para hacer presidente a Rull (Junts), es un poco contradictorio con su voluntad de acuerdo con las fuerzas progresistas en este congreso’.
Asimismo, vemos que ERC está negociando, ahora, más de un año después de las elecciones municipales, la entrada de su partido en la gobernanza del ayuntamiento de Barcelona, con Jaume Collboni (PSC/PSOE). Y todos sabemos que nunca hay nada gratis, y en política, menos. Así que muchos tememos las posibles contrapartidas, que no puede ser otra que la investidura de Salvador Illa. En esa misma línea, Oriol Junqueras, expresidente de ERC, también resaltó ayer, en una entrevista televisada, que:
‘(…) su partido ha de batallar las negociaciones con el PSC, que se ha de animar en esas negociaciones, con el objetivo de construir los mejores acuerdos posibles, con Illa o con cualquier otra fuerza política (…) si pudiera ser con todos … ERC no se ha de negar a ningún acuerdo, ni tampoco ha de aceptar ninguno a cualquier precio’.
Afortunadamente, las juventudes de ERC han mostrado su disconformidad en entrar en el ayuntamiento de Barcelona y también a apoyar a Salvador Illa, ya que el PSC/PSOE forma parte de la represión que padecemos. Y ahora estamos pendientes de la respuesta de los afiliados de ERC en Barcelona, que hoy han de votar la entrada o no, en el gobierno del ayuntamiento (la sección de ERC de Lleida ya ha manifestado su oposición a pactar con el PSC/PSOE). Y, por suerte, también, Oriol Junqueras ya no preside el partido, y Marta Rovira, actual responsable hasta el próximo congreso, parece que no está por la labor de pactar con el PSC/PSOE.
Pero veremos, tiempo al tiempo.
La realidad es que Pedro Sánchez y su escudero Salvador Illa, siguen insistiendo en su mensaje de que ‘Catalunya ha votado pasar página, no ha votado un nuevo gobierno de Carles Puigdemont’; y eso es una muestra más de su capacidad de mentir, de infantilizarnos, de hacernos olvidar que no estamos en un régimen presidencialista, pues, aquí (España y Catalunya) no hay elecciones directas al cargo de presidente, son elecciones indirectas, supeditadas a los posteriores pactos / acuerdos entre los diferentes partidos.
Buena prueba de ello, la tiene el propio Pedro Sánchez, que no ganó las elecciones generales del verano pasado, pero, gracias a los acuerdos con siete partidos, entre ellos ERC y Junts, gobierna, en lugar de hacerlo el vencedor de las elecciones, Alberto Núñez Feijóo (PP). Y otra prueba la tiene el propio Jaume Collboni (PSC/PSOE), alcalde de Barcelona, pues las elecciones las ganó Xavier Trías (Junts), pero, gracias a los votos de Sumar/Comuns más los vergonzantes del PP, consiguió la alcaldía el citado Collboni.
Y está claro, los discursos que ahora nos hacen, diciendo que la ciudadanía votó el cambio, podían aplicárselo los propios Sánchez y Collboni, pero todos sabemos que ‘de tuyas a mías…’
Nota: es de interés recordar que ‘De teves a meves: 32 contes que acaben més o menys bé’ (De tuyas a mías: 32 cuentos que acaban más o menos bien) ya hice referencia en mi escrito titulado ‘La parálisis por el análisis’ (del pasado mes de mayo)
Pero Pedro Sánchez y Salvador Illa siguen con su raca-raca, con su matraca, diciendo, por tierra mar y aire, que la mejor fórmula posible será la investidura de Illa, la única opción que ven como más aconsejable para ‘mejorar la convivencia’ en Catalunya, es decir, siguen mintiendo sobre la falta de convivencia, ese es su estilo.
Efectivamente, no debemos olvidar que, en realidad, con una participación del 57,9%, en las elecciones autonómicas del pasado mes de mayo:
- Los partidos unionistas españoles obtuvieron: PSC/PSOE 872.959 votos, el PP 342.584, Vox 248.554, Comuns/Sumar 181.795, CS 22.481, es decir, en total: 1.668.373 votos unionistas.
- Mientras que los partidos independentistas: Junts 674.896, ERC 427.135, Cup 127.850, AC 118.302, Alhora 22.481, en total: 1.370.664 votos independentistas.
- (prescindiendo de otros partidos menores, como el Pacma, FO, etc., de difícil clasificación en el tema nacional)
Pero claro, no debemos olvidar que gran parte del 42,1% de los abstencionistas, fueron independentistas cabreados con la política seguida por sus respectivos partidos políticos.
Por eso no me parecen válidos los mensajes de que la ciudadanía decidió pasar página; esa es una lectura sesgada e interesada, obviamente, y, por lo tanto, no me parecen adecuados los discursos que, a modo de mantra, nos van repitiendo Pedro Sánchez y Salvador Illa, pues con ellos, lo único que buscan, es introducir en el pensamiento de la ciudadanía, la idea de que ‘lo sabe todo el mundo y es profecía’, es decir, pretenden que cale en nosotros la dialéctica de la profecía autocumplida, la profecía que se autorrealiza.
Y está estudiado que esas profecías autocumplidas / autorrealizadas, se basan en la siguiente tesis:
‘La profecía que se autorrealiza es, al principio, una definición falsa de la situación, que despierta un nuevo comportamiento que hace que la falsa concepción original de la situación se vuelva ‘verdadera’’,
como analizó el sociólogo Robert King Merton (1910 – 2003), en su libro ‘Teoría social y estructura social’; también es muy interesante el ‘efecto Mateo (*)’ de ese mismo autor, sobre la explicación de la acumulación de riquezas, prestigio o reputación.
(*) basándose en el Evangelio de San Mateo (Mt 25:29), que dice: ‘Porque al que tiene, le dará y tendrá en abundancia; pero al que no tiene, incluso lo que tiene le será quitado’; mensaje similar al del Evangelio de San Lucas (Lc 19:26) ‘Os digo que a todos los que tengáis se os dará más, pero a quien no tiene, incluso todo lo que tiene le será quitado’.
Por eso, Sánchez e Illa insisten, forzando todos los argumentos posibles (y olvidando los que no les convienen, como, por ejemplo, que, como he dicho, el propio Sánchez perdió ante el PP), pero saben que, machacando con sus discursos, hacen más realizable la profecía autorrealizable que desean.
Pero los independentistas catalanes conocemos perfectamente las trampas y subterfugios que utiliza el trilero Sánchez, y, claro, también Illa, su ‘delegado’ en Catalunya, y sabemos que, por más que se crean sus propias profecías autocumplidas, ellos no son Nostradamus (Michel de Nostredame, Miquèl de Nòstra Dama, 1503 – 1566), autor de ‘Les Propheties’ (1555)
En definitiva, que debemos permanecer serenos, desoyendo los cantos de sirena, debemos hacer como hizo Ulises (Odiseo) en la narración de la Odisea (Hómëro, Homerus, s. VIII a.C.), canto XII; según el autor, la diosa Circe advirtió a Ulises de las difíciles singladuras, que, en su regreso de la guerra de Troya, camino de Ítaca, la primera de ellas la Isla de las Sirenas:
‘Tendréis que pasar cerca de las sirenas que encantan a cuantos hombres se les acercan. ¡Loco será quien se detenga a escuchar sus cánticos, pues nunca festejarán su mujer y sus hijos su regreso al hogar! Las sirenas les encantarán con sus frescas voces. Pasa sin detenerte después de taponar con blanca cera las orejas de tus compañeros, ¡que ni uno solo las oiga! Tu solo podrás oírlas si quieres, pero con los pies y las manos atados y en pie sobre la carlinga, hazte amarrar al mástil para saborear el placer de oír su canción.
Las sirenas le cantaban: ‘vamos, famoso Ulises, gran hora de los aqueos, ven aquí y haz detener tu nave para que puedas oír nuestra voz, detén tu nave y vez a escuchar nuestras voces, después de deleitarse con ellas quienes las escucharon se van alegres conociendo muchas cosas que ignoraban, pues sabemos cuanto sucede sobre la tierra fecunda’.
Así, Ulises logró oír el canto de las sirenas, sin morir, y después explicó a Alcínoo que:
‘Entonces mi corazón deseó escucharlas y ordené a mis compañeros que me soltaran, haciéndoles señas con mis cejas, pero ellos se echaron hacia adelante y remaban, y luego se levantaron Perímedes y Euríloco, y me ataron con más cuerdas, apretándome todavía más’
Los independentistas catalanes tenemos muy claro que debemos desoír las promesas que nos haga el tahúr Pedro Sánchez, pues, sabemos que, después, una vez entregado nuestro voto o apoyo, se hace el loco, el desmemoriado, ya que, en realidad, quiere que nos estrellemos contra las rocas, como querían las sirenas. Debemos seguir los consejos de nuestro Circe particular, Carles Puigdemont.
Franz Kafka (1883 – 1924), complicó la ‘historia’ de Ulises, añadiendo que lo que no podía esperar es que las sirenas respondieran a la estratagema de Ulises, con el silencio, por lo que no oyó la irresistible y seductor canto de las sirenas.
Por todo ello, debemos desoír los cantos de sirena de los falsos Nostradamus y, también, ignorar los elocuentes silencios de los otros partidos implicados, pues todos, todos, nos quieren mal, quieren nuestra perdición, la aniquilación del movimiento independentista.