● México alcanza el tercer lugar mundial en producción de juguetes con un valor de ventas anuales de 2,800 millones de dólares.
● La venta de juguetes piratas, uno de los retos que enfrenta la industria.
● Con la relocalización de productos y servicios a nivel global, la compra de juguetes certificados son claves para el crecimiento sostenido de la industria mexicana.
Ciudad de México a 21 de octubre de 2024.- En un contexto global de innovación y transformación económica, México ha consolidado su posición como el tercer productor mundial de juguetes. De acuerdo con la Asociación Mexicana de la Industria del Juguete (AMIJU), las ventas anuales de juguetes en el país alcanzan los 2,800 millones de dólares, lo que subraya la fortaleza del sector y su importancia en la economía mexicana, de tal manera que marcas líderes como Mattel y Lego también prevén un crecimiento continuo para el mercado nacional, estimando un aumento del 5.69% entre 2023 y 2027.
Sin embargo, uno de los principales desafíos que enfrenta la industria es el alto consumo de juguetes pirata, lo cual plantea un riesgo para la seguridad de las y los niños, además de que afecta las ventas del sector formal, pues mientras las marcas del sector pagan sus impuestos y generan un impacto importante para la economía del país, los vendedores informales incrementan sus ganancias a partir de juguetes defectuosos que venden a bajo costo o incluso que provienen del mercado negro.
Bajo ese mismo tenor, la AMIJU advierte que la venta de estos productos, en su mayoría importados de manera ilegal, pone en peligro la salud y seguridad de los niños, pues al no cumplir con los estándares de seguridad y calidad, representan un riesgo significativo, ya que pueden contener materiales tóxicos o piezas peligrosas que ocasionen accidentes.
Ante esa situación es fundamental que los padres de familia tomen conciencia de los riesgos asociados a la compra de juguetes piratas y decidan comprar juguetes que cumplan con la debida certificación de la industria que cada día hace su mayor esfuerzo para contribuir a un mercado de productos con todas las regulaciones en pro del bienestar familiar.
Afortunadamente, a pesar de la complicaciones del mercado ilegal, México está ante un escenario positivo para la industria de la juguetería, gracias a su capacidad de manufactura, innovación, diseño y calidad de sus productos, además de la llegada del nearshoring, mismo que podrá potenciar el crecimiento y la competitividad para la industria en el país.
La reubicación de operaciones productivas de empresas globales en el país, especialmente tras la disrupción en las cadenas de suministro causadas por la pandemia y las tensiones comerciales, ha fortalecido la manufactura local. Esto ha permitido que México se consolide no sólo como un productor clave, sino también como un hub exportador para el continente americano.
Por lo tanto, desde Juguetron mantenemos nuestro compromiso de incrementar los estándares de calidad para lograr consumidores con mayores niveles de satisfacción, sabiendo que nuestros juguetes pertenecen a ese sector de piezas certificadas y que se adecuan a las necesidades de los hogares mexicanos, además de contribuir al crecimiento económico del país con productos que ponen en alto el nombre de México.
