La situación socio – política actual es un verdadero revoltijo, un conjunto de ideas y de acciones sin orden, aparente, ya que, con toda seguridad, sí que tienen una línea directriz (un mandato) que no es otra que la defensa de los verdaderos poderes económicos que dirigen el mundo, sin ser votados, como intento explicar en este escrito.
En general se considera que la democracia (‘demos’, pueblo; y ‘kratos’, gobierno) es el mejor sistema por su representatividad, llegando a considerarlo sacrosanto, el modelo ideal.
Más prudente fue Winston Churchill, al considerar que ‘la democracia es el peor sistema de gobierno, a excepción de todos los demás’.
Lógicamente, la democracia, como opuesta a la dictadura, es un aval para la primera. Pero, para analizar las democracias, es preciso ponderar los sistemas electorales, las prerrogativas presidencialistas, las monarquías (parlamentarias o no) pero todas al margen del voto popular, la conformación de los diferentes poderes, el controlado bloqueo para la modificación de las leyes fundamentales y, en definitiva, los controles y contrapesos del poder, de los diferentes poderes, basados en la fórmula anglosajona ‘checks and balances’.
Pues, una democracia no es, únicamente, la imposición de las mayorías, si no, asimismo, la defensa de las minorías.
Y también es preciso ponderar el nivel ético y moral de los políticos, su compromiso con sus programas electorales, la honestidad y trasparencia de las campañas electorales, etc.
Por último, es preciso desenmascarar, también, la influencia manifiesta o sibilina, oculta, de los grandes lobies de poder transnacionales, para maximizar sus multimillonarios beneficios, despreciando las diferentes leyes y reglamentaciones nacionales.
Y un simple análisis ‘objetivo’, considerando todas esas variables (que podría aumentar), me confirma que las actuales democracias, si bien con sensibles diferencias cualitativas, en realidad no dejan de ser más que meras pantallas, decorados de unas teatralizaciones ilusorias.
Esa es la realidad, que es difícilmente cambiable (o imposible), ya que los defectos individuales: egoísmo, avaricia, narcisismo, envidia, etc., se reproducen a niveles superiores: locales, estatales y súper-estatales.
Por eso, los diferentes regímenes políticos no dejan de ser, reproducir y determinar decisiones y actuaciones complejas caracterizadas por ser meros ‘totum revolutum’.
Estos días tenemos el claro ejemplo del rampante Donald Trump y su tropa de serviles súbditos multimillonarios. La historia nos muestra casos de ‘democracias’ (gobierno del pueblo) que acaban siendo tanto o más nefastas que otros tipos de gobiernos.
Platón (427 a. C. – 347 a. C.) consideraba que la mejor forma de gobierno era la monarquía con un rey filósofo.
Su discípulo Aristóteles (384 a. C. – 322 a. C.) consideró seis formas de gobierno:
- tres formas justas: monarquía, aristocracia y politeia (políticos de clase media), y
- tres corruptas, pervertidas: tiranía, oligarquía y democracia.
Siguiendo con el citado filósofo:
- el gobierno de uno, las monarquías (gobierno de uno solo, que ha heredado el puesto), tiene su forma pervertida en la tiranía (gobierno formado por un líder que abusa de su autoridad).
- el gobierno de unos pocos (virtuosos y sabios), las aristocracias, tienen la contrapartida corrupta en la oligarquía (gobierno formado por un pequeño grupo de individuos ricos que priorizan sus intereses).
- y el gobierno de muchos de clase media (politeia), que pueden aportar un cierto equilibrio de intereses de los diferentes grupos, tiene su versión pervertida en la democracia, mayoritaria y emocional más que racional. La democracia, bien estructurada, evitaría la tiranía, puede dar lugar a leyes justas. Pero Aristóteles consideró que la democracia era el segundo peor gobierno (detrás de la tiranía), ya que el gobierno de muchos (que pueden acabar siendo una turba) con gobernantes que ignoran a los pobres, da lugar a la aparición de unos líderes demagógicos que hacen que la gente se vuelva tonta.
Aristóteles consideró que la monarquía y la politeia (política) son las mejores formas de gobierno, pero la monarquía no es viable a largo plazo, pues consideraba que no era practicable, por la dificultad derivada de la propia herencia y, principalmente, porque el poder absoluto corrompe, y acaba en tiranía. por lo que la mejor forma es la política.
Así que, siguiendo con Aristóteles, tenemos la segunda peor forma de gobierno, la democracia y mal estructurada, con los vicios de las oligarquías (‘oligos’ poco, escaso, reducido; y ‘archo’ mandar, ser el primero).
Los oligarcas, los poderosos, consideran que es preferible que manden ellos, antes de que manden la oclocracia (el gobierno de la muchedumbre), término acuñado por Polibio (200 a. C. – 118 a. C.).
Así, tenemos la segunda peor forma de gobierno, la democracia (la tiranía de la mayoría), degenerada por la introducción anómala de los oligarcas, en definitiva, tenemos un sistema demagógico, que es otra forma degenerada de la democracia.
Y con este tinglado, es impensable confiar ciegamente, y menos, contentarnos con que tenemos un sistema óptimo e inmejorable.
Tenemos muchas pruebas del mal funcionamiento de la actual democracia y, obviando al patológico Trump, también vemos que, en el reino español, partiendo de esa anómala monarquía (no de sabios ni filósofos, sino de meros portadores de genes borbónicos), tenemos al trilero Pedro Sánchez que actúa prepotentemente, como si tuviera mayoría absoluta, ya que:
La presentación de un decreto ómnibus, en el que se incluyen un centenar de medidas económicas, entre ellas, la revalorización de las pensiones, la reducción del coste del transporte público, la prohibición de desahucios de colectivos vulnerables, ayudas a los afectados de la DANA (gota fría en la comunidad valenciana) etc., es la más tramposa forma de colar medidas más discutibles e inaceptables.
Y la mayor prueba de esa votación trampa, la tenemos con los argumentos chantajistas del ministro Félix Bolaños, que, en el congreso de los diputados, les ha dicho: ‘¿A alguno de ustedes les han votado para bajar las pensiones, suprimir las ayudas al transporte público y no ayudar a los afectados por la DANA?
Miriam Nogueras, portavoz de Junts, le ha contestado:
‘Lo que hoy se carga Junts es el trilerismo, su mentira, su gandulería, sus manipulaciones, su prepotencia, su chantaje y sus incumplimientos (…) lo que pase hoy será fruto de la negligencia y falta de seriedad del PSOE (…) intentarán trasladar la responsabilidad a Junts, pero todos tienen claro que nosotros siempre hemos actuado con transparencia, claridad, coherencia y lealtad a nuestro país y a nuestros principios y a los acuerdos que firmamos (…) Junts es el único partido que prioriza el país, que no admite chantaje, que se aleja de la estética y el titular vacío, y que asume sin miedo las decisiones que nadie se atreve a tomar (…) las 140 páginas incluyen 80 medidas que ni se han votado, ni se han debatido y que forman parte de su programa electoral español, no de nuestro programa electoral por Catalunya (…) y todavía está pendiente la delegación de las competencias en inmigración acordadas hace un año (…) esto no es nuevo, es su manera de ser.
(…) Con nosotros el chantaje y la presión no tiene efectos, la subida de las pensiones y los descuentos de transportes está garantizado, hagan un decreto con estos dos puntos y nosotros votaremos a favor, porque no tienen mayoría y han de dejar de actuar como si la tuviesen. (…) es indecente mezclar medidas que ayudan a la gente con medidas que continúan ahogando a las personas y que sólo les convienen a ustedes.
(…) y contra ERC: no nos tiemblan las piernas, estamos hasta las narices que engañen a la gente y nos preguntamos hasta cuando partidos catalanes continuarán tragándose estos sapos y ese chantaje (…) El PSOE ha de dejar de hacer de trilero y el resto ha de dejar de votar sí a todo a cambio de nada. Si ustedes continúan tragándose el chantaje, ellos seguirán siempre chantajeando’
Como es lógico, Gabriel Rufián, portavoz de ERC, mostrando nuevamente su falta de ética, formación y de recursos dialécticos, limitados a meros tuits, ha contestado a Junts que ‘son la derecha más reaccionaria que esconde sus miserias detrás de la estelada (la bandera independentista catalana) (…) la materialización de la mayoría de este partido independentista con PP y Vox en el congreso de los diputados que, ha asegurado que ha´ra caer el gobierno español de Pedro Sánchez (…) y ha criticado a Nogueras que haga de almogávar y que esconda que vota con el PP y Vox, a favor de una multinacional energética y en contra de prorrogar ayudas y prestaciones para los catalanes (…) a pesar de que haya gente que crea imposible que Junts pueda llegar a algún pacto con el PP y Vox, los campeones en encarcelar y pegar a los catalanes y a sus líderes, lo acabarán haciendo, parece marciano, pero pasará (…) ¿qué ha de cumplir el PSOE? ¿no serán cosas personales para alguno (Carles Puigdemont), porque han estado votando en contra del bienestar de miles de personas para que ese alguien esté mejor’.
Carles Puigdemont, a través de su cuenta de X, ha contestado:
‘Para poder conseguir este titular y reforzar el relato son capaces de jugar con los pensionistas y los usuarios de los transportes públicos. Si les importasen de verdad y no como meros instrumentos de lo que parece ya la precampaña electoral, lo tenían y lo tienen fácil: que presenten un decreto con la revalorización de las pensiones y los descuentos en el transporte público, y mañana mismo los tendrán aprobados. Pero, aprovechar que son decisiones que todos queremos para forzarnos a aceptar en el mismo paquete unas 80 medidas diversas y dispersas, es inaceptable. Y lo saben porque se lo hemos dicho en todas las reuniones.
Pero han preferido el titular, pensando que a ellos, políticamente, les es rentable (y tienen altavoces de sobras, propios y ajenos, para sacar rédito) aunque sea a costa de los ciudadanos. Están acostumbrados a una manera de hacer política -y de socios- que se mueve por la estética o por la escénica; por el ‘cómo quedaremos’ y ‘qué dirán’, en lugar de poder explicar las decisiones complejas a quien tenga interés real. No solo queremos que suban las pensiones sino que incluso queremos que los jubilados catalanes -como el salario mínimo interprofesional- tengan un factor corrector al alza por razón del coswte de vida en Catalunya.
Gobernar en minoría exige una gran responsabilidad; culpar a los otros de las consecuencias de tus actos no genera confianza. Quizás están mal acostumbrados con partidos que les dan todo el soporte de manera incondicional, pero no es ni ha sido nunca nuestro caso’.
Y el ministro Félix Bolaños, ha contestado en esa misma red: ‘los ciudadanos deberán recordar que PP y Junts han impedido actualizar las pensiones. Cuando mañana vean que ha aumentado el precio del billete, que recuerden que ha sido el PP en compañía de otros’.
Como podemos ver, la demagogia está llegando a niveles altísimos ¿eso es democracia?, está claro que no, pues, siguiendo a Aristóteles, esos oligarcas de baja estopa, de nula calificación, representan la antipolítica, son simples chulos haciendo de voceros de los verdaderos poderes.
Vista la actual situación, me parece que es interesante recuperar algunas ideas de Víctor Alexandre, en su artículo titulado: ‘La visita de Junqueras al president Puigdemont’, puews apunta que: ‘teniendo en cuenta su inutilidad y el hecho de que ERC se ha convertido en una extensión del PSOE, sería posible preguntarse si el verdadero objetivo -como entrar en el vestuario del rival en misión especial de la Moncloa- no era, en realidad, conocer las interioridades de la estrategia de Junts con relación a su pulso con Pedro Sánchez’
Asimismo, apunta que:
No creo que haya sido una buena idea, por parte del president Puigdemont y si entorno, recibir a Oriol Junqueras y Elisenda Alamany en Waterloo,
(…) ERC es un partido a la deriva que necesita fotos que le permitan sacar la nariz en una coyuntura que le ha dejado fuera de combate y que todo el protagonismo es de Junts.
(Elmon.cat, 21/01/2025)
Todo son falsedades sobre falsedades, como la que nos hemos enterado ahora, con las condecoraciones concedidas al agente 111.129 de la policía nacional, partícipe del caso de recogida y manipulación de la información de la Banca Privada de Andorra, y que el gobierno de Pedro Sánchez, además de condecorarle, le buscó un destino de lujo en la Haya.
Todo confirma que Pedro Sánchez, y todo el PSOE/PSC, son muletas del reino español, y actúan en consonancia con ello, por más que, puntualmente, quieran mostrar una mejor imagen.
Y ese sistema no pierde ocasión para machacarnos a los independentistas, como hemos visto hoy, con la decisión del Banc de Sabadell de retornar su sede a Catalunya, para mostrar la ‘normalización’, como han defendido el represor Illa y diferentes ministros. Cuando, en realidad, retornar a Catalunya, no deja de ser una nueva jugada política (como fue el marchar), para, ahora, ‘castigar’ a la comunidad valenciana, gobernada por el PP, y, a la vez, para ‘politizar’ la defensa de la OPA hostil planteada por el BBVA.
Todo, cualquier medida y decisión, son claros ejemplos de los vicios presentados por Aristóteles, así vemos que los gobiernos de Barcelona, Catalunya y España, no pueden aprobar sus respectivos presupuestos, y acusan a los partidos que no les dan su voto, y por eso, los tachan de insolidarios, de no mirar hacia el futuro, de bloquear su buen gobierno, etc.
Cuando, la realidad es que esos tres gobiernos no obtuvieron mayorías absolutas, y llegaron a asumir los cargos, tras pactos de puro equilibrismo; pero, tras ese acto, incumplen los acuerdos de investidura (que no eran acuerdos de legislatura), y, encima, quieren que les apoyen los presupuestos, y, en caso contrario, los critican por insolidarios ante la ciudadanía, expresando los grandes y maravillosos privilegios y beneficios que se pierden por no tener el pertinente apoyo de Junts, ERC, Comunes, según los casos.
Y la desgracia es que sabemos que, con toda seguridad, la decadencia, el declive en el que estamos desde siempre, todavía no ha llegado al fondo, al nadir, así que el totum revolutum todavía puede aumentar más.
Y ante esta constatación, milagrosamente, todavía hay muchos independentistas que seguimos soñando con el cenit, con la República Catalana; pero está claro que lo tenemos muy, pero que muy difícil, ya que la ‘democracia’ que tenemos, es un bluf, un régimen viciado en grado sumo, así que, deberíamos recurrir a Aristóteles y replantearnos muchas cosas.