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Esta mañana, al principio de la reunión de presidentes autónomos con el gobierno central, en Barcelona, la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, ha cumplido su amenaza, y al empezar a hablar el presidente vasco, en euskera, se ha ausentado y no ha vuelto hasta después de hablar el presidente catalán, que lo ha hecho en catalán, mostrando, así, Ayuso, su xenoglosofobia ‘personal’, su aversión a los idiomas. Y ante esta situación, los independentistas catalanes debemos asumir los mensajes de Muhammad Ali, en concreto: ‘Nada es imposible’ (Impossible is nothing, 2004), y … actuar; y sobre todo eso va el presente escrito.
En primer lugar, me parece muy relevante destacar que, antes de la reunión, los presidentes Pedro Sánchez y Salvador Illa (éste como anfitrión) han efectuado una mínima rueda de prensa a los periodistas (identificados con una pegatina con la letra ‘ñ’, para mayor recochineo). Y, en este momento, el impresentable Illa ha vuelto a mostrar su mentalidad colonial, ya que ha defendido las lenguas ‘cooficiales’ como una virtud, concordia, riqueza y grandeza de España. Y, como he repetido hasta la saciedad, su constitución, en ningún momento menciona al catalán, euskera y gallego como ‘cooficiales’, dice que son lenguas ‘oficiales’ en sus respectivas autonomías. Y eso es una confirmación de la mentalidad servicial de Illa (155).
Patológicamente, la xenoglosofobia (‘xeno’, en griego, quiere decir extranjero; ‘gloso’, idioma; y phobos, miedo), es un miedo desproporcionado, una aversión ‘irracional’; pero, obviamente, no es el caso, pues esa fobia de Ayuso, como representante del españolismo – madrileñizado, es totalmente racional, un claro reflejo de su concepción del estado franquista y borbónico (pre y post franquismo) basado en la unidad absoluta y total; y consideran la menor filtración (como la selección vasca de pelota vasca (valga la redundancia), como una debilidad, una traición del gobierno de Pedro Sánchez.
En esa línea de pensamiento y acción, hace unos días vimos la campaña del PP contra el reconocimiento del catalán, euskera y gallego, en las instituciones europeas, pues saben que toda muestra catalanofóbica les da votos (tristemente, también en Catalunya, pues hay catalanes que no quieren ser ciudadanos, prefieren ser subditos)
La patología mencionada se supera con la confianza. Pero, precisamente, como colonizadores, nunca tendrán esa creencia firme, de convicción y seguridad, en los colonizados. Y por eso es insuperable, pues están convencidos de la bondad de su unidad homogeneizadora.
Y ante esta irreversible situación antidemocrática y anticonstitucional, a los independentistas catalanes nos caben, únicamente, dos opciones: rendirnos y asumirla, o, plantarnos de una puñetera vez, y romper la baraja.
Por esto me parece muy interesante recordar a Muhammad Ali-Haj (Cassius Clay, 1942 – 2016), uno de los mejores boxeadores de la historia, que fue una persona coherente con sus principios, al coste que fuera, ya que, en 1966 se negó a ser reclutado para ir a la guerra del Vietnam, fue declarado culpable de evasión del servicio militar, condenado a 5 años de cárcel, y la desposesión de todos los títulos oficiales conseguidos. Su objeción de conciencia le convirtió en un icono para las generaciones de la contracultura; y también pasó a representar el orgullo racial de los afroamericanos durante el movimiento por los derechos humanos.
A continuación, reproduzco sus mensajes más famosos, que muestran sus convicciones y compromiso:
- Cassius Clay es el nombre de un esclavo. No lo escogí. No lo quería. Yo soy Muhammad Ali, un hombre libre.
- Vi el mundo entero. Aprendí algo de la gente de cada lugar. Hay verdades en el hinduismo, en el cristianismo, en el islam, en todas las religiones. Y también en el hablar sincero. La única religión que vale es el amor.
- Cuando conozco a alguien, no veo una raza o una religión. Miro más adentro. Debemos aprender a superar nuestros conflictos en paz y a respetar al otro.
- He ganado una medalla de oro, pero no significó nada, porque no tenía el color de piel adecuado.
- ¿Por qué me piden ponerme un uniforme e ir a mil millas de casa y arrojar bombas y disparar balas a gente de color oscura mientras los negros de Louisville son tratados como perros y se les niegan los derechos humanos más básicos? No voy a ir a 1000 millas de aquí y dar la cara para ayudar a asesinar y quemar a otra pobre nación simplemente para continuar la dominación de los esclavistas blancos.
- Odiar a otros por su color de piel es errado. Y no importa de qué color se trate, simplemente está mal.
- Cuando se trata de amor, compasión y otros sentimientos del corazón, soy rico.
- Sé a dónde voy y sé la verdad, y no tengo que ser lo que otros quieren que sea. Soy libre para ser lo que quiero.
- Es la falta de fe lo que hace que la gente tenga miedo de enfrentarse a los desafíos. Yo creía en mi mismo.
- Si mi mente puede concebirlo y mi corazón puede creerlo, entonces puedo lograrlo.
- Es la repetición de las afirmaciones lo que conduce a la creencia. Y una vez que esa creencia se convierte en una profunda convicción, las cosas comienzan a suceder.
- Si los sueños no te dan miedo es que no son lo suficientemente grandes.
- No es la montaña a escalar frente a ti lo que te hace retroceder, es la piedra en tu zapato.
- Mis principios son mucho más importantes que mi dinero o mis títulos.
- Entrena mientras que los demás duermen. Estudia mientras que los demás se divierten. Resiste mientras que los demás descansan. Vive lo que los demás sueñan.
- No pierdes nada cuando luchas por una causa. En mi mente el perdedor es aquel que no tiene nada por lo que luchar.
- No tienes que estar en un ring de boxeo para ser un gran luchador. Mientras seas sincero contigo mismo, tendrás éxito en tu lucha por aquello en lo que creas.
- Una persona que sabe cuál es su propósito en la vida es más poderosa que diez mil que trabajan sin saberlo.
- Sólo un hombre que sabe lo que es la derrota puede llegar hasta el fondo de su alma y volver a la superficie con ese gramo extra de poder necesario para ganar la pelea cuando está empatada.
- Imposible es sólo una palabra que usan los hombres débiles para vivir fácilmente en el mundo que se les dio, sin atreverse a explorar el poder que tienen para cambiarlo. Imposible no es un hecho, es una opinión. Imposible no es una declaración, es un reto. Imposible es potencial. Imposible es temporal. Imposible no hay nada.
(https://share.google/dHNUtDTTJWWxTSbAH)
En esa web se afirma que ‘la fuerza de sus frases, son auténticos puñetazos verbales que nos inspiran’.
Y yo deseo que, efectivamente, esos puñetazos verbales nos hagan salir de nuestro confort, y ser libres para ser lo que queremos ser, pues sólo así superaremos el miedo que nos confiere nuestra falta de fe en nosotros mismos, para conseguir lo que nuestros sentimientos y voluntad desean. Debemos trabajar para conseguir nuestro sueño de la República Catalana, sin retroceder por las piedras que nos pongan en el camino. Sólo así veremos que, realmente, ‘no hay nada imposible’. Y si no lo conseguimos nosotros, lo conseguirán nuestros hijos y nietos, por eso es tan importante nuestra acción, ya.