Ciudad de México, 9 de junio de 2025 — En su conferencia matutina de este lunes, la presidenta de México emitió un mensaje enfático en defensa de los derechos de los mexicanos que residen en Estados Unidos, destacando su contribución a ambas economías y llamando a la calma tras recientes actos de violencia.
La mandataria reconoció la labor de las y los connacionales en EE. UU., a quienes calificó como personas trabajadoras y honestas. Subrayó que la gran mayoría cuenta con documentos legales o ciudadanía estadounidense, y que quienes aún no regularizan su situación migratoria llevan muchos años establecidos en ese país. “Estados Unidos los necesita para su economía”, afirmó.
La presidenta expresó un agradecimiento especial a la ciudad de Los Ángeles por haber sido históricamente un refugio generoso para cientos de miles de mexicanos, y resaltó la reciprocidad de la comunidad migrante hacia esta ciudad.
Reiteró el compromiso “inquebrantable” del Gobierno de México con la protección de los derechos humanos de sus ciudadanos en el extranjero, sin importar su estatus migratorio. En este marco, hizo un llamado firme pero respetuoso al gobierno estadounidense para que garantice el debido proceso y respete la dignidad humana en todos los procedimientos migratorios.
Ante los recientes disturbios registrados, la presidenta condenó los actos violentos, como la quema de patrullas, que consideró más provocaciones que acciones de resistencia legítima. “Llamamos a la comunidad mexicana a actuar de manera pacífica y no caer en provocaciones”, subrayó.
Asimismo, aseguró que el Gobierno de México utilizará todos los canales diplomáticos y legales para expresar su inconformidad con prácticas que criminalizan la migración y ponen en riesgo a las comunidades mexicanas en EE. UU. Destacó que la red consular ha activado mecanismos de asistencia y protección para garantizar el acceso a defensa legal y un trato justo a los connacionales detenidos, además de intensificar la información sobre sus derechos.
Finalmente, la presidenta reafirmó que la migración debe atenderse desde una perspectiva integral, humana y con corresponsabilidad regional. “México está dispuesto a colaborar con el Gobierno de Estados Unidos en la búsqueda de soluciones que privilegien el respeto a los derechos humanos, la legalidad y el desarrollo compartido”, concluyó.
