EIRUT, 2 ago (Reuters) – El Ministerio de Relaciones Exteriores de Siria dijo el domingo que una empresa petrolera de Estados Unidos ha firmado un acuerdo con los rebeldes dirigidos por los kurdos que controlan los yacimientos petrolíferos del noreste del país, en lo que describió como un acuerdo ilegal destinado a “robar” el crudo de Siria.
En un comunicado ministerial publicado en los medios de comunicación estatales, no se identificó a la empresa implicada en el acuerdo con las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF, por sus siglas en inglés), una alianza que se apoderó de varias franjas de terreno al norte y al este de Siria tras arrebatárselo al Estado islámico con ayuda de Estados Unidos.
La declaración no dio detalles sobre el acuerdo. Representantes de las SDF no respondieron a una solicitud de comentarios de Reuters. Tampoco se disponía de comentarios por parte de las autoridades estadounidenses.
Damasco “condena en los términos más enérgicos el acuerdo firmado entre la milicia al-Qasd (SDF) y una empresa petrolera estadounidense para robar el petróleo de Siria bajo el patrocinio y el apoyo de la Administración estadounidense”, dice el comunicado.
“Este acuerdo es nulo y carece de valor y de toda base legal”, afirma, añadiendo que se trata de una violación de la soberanía nacional siria.
Siria producía alrededor de 380.000 barriles de petróleo por día antes de que estallara una guerra civil tras la represión de las protestas de 2011, con Irán y Rusia dando su apoyo al Gobierno del presidente Bashar al-Assad y Estados Unidos a la oposición.
Damasco perdió el control de la mayoría de los campos petrolíferos en un territorio situado al este del río Éufrates en Deir al-Zor. Las sanciones de los Estados occidentales también han afectado al sector energético.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha dicho que a pesar de la retirada de sus tropas militares del noreste de Siria, un pequeño contingente estadounidense permanecerá “donde tienen petróleo”. El Pentágono dijo a finales del año pasado que los ingresos de los yacimientos petrolíferos se destinarían a las SDF.
Escrito por Ghaida Ghantous; editado por Giles Elgood; traducido por Darío Fernández en la redacción de Gdansk
