Como cada año, el objetivo es hacer partícipe a los miembros de la comunidad en actividades positivas que fomentan el acercamiento y la convivencia entre los habitantes de colonia Guerrero.
Ciudad de México a 16 de diciembre del 2019.- Con el propósito de contribuir a la construcción positiva del tejido social en la colonia Guerrero, Fundación Reintegra celebró el viernes 13 de diciembre la posada anual que ya se ha convertido en parte de las tradiciones más importantes de la comunidad desde hace más de 15 años.
En la víspera de la celebración, se realizaron talleres con algunas semanas de antelación para preparar todos los elementos necesarios para el festejo. Son los beneficiarios, en compañía de sus mentores en los talleres, quienes elaboran y consiguen todo lo necesario para la pastorela, los villancicos, el ponche, la piñata y los aguinaldos. Es en estas actividades donde se trabaja el tejido social de manera positiva, de forma que todos se sientan incluidos.
“Durante la posada de este año se han destacado tres cosas principalmente en el trabajo comunitario y que están ampliamente relacionadas con el contexto actual en el que nos encontramos: la concientización referente a la perspectiva de género, el cuidado del medio ambiente para reducir nuestro impacto ambiental y el reconocimiento a la constancia y persistencia que tienen los jóvenes en sus procesos con Fundación Reintegra.” Dijo Jimena Cándano, Directora General.
El objetivo de la realización de esta acción es, en primera instancia, hacer partícipe a los miembros de la comunidad en actividades positivas para fomentar el acercamiento y la convivencia entre familias, amigos y otros grupos sociales, que inmersos en la dinámica diaria de la colonia Guerrero, pueden desvincularse de su grupo, lo ideal es mantenerlos unidos y que mejor que sea a través de nuestros usos y costumbres.
Trabajar con la comunidad es una tarea en la cual pocos quieren invertir tiempo porque requiere de mucha planificación, observación y participación para que los resultados se noten y se sostengan a través del tiempo. Sin embargo, es crucial para evitar la escalada delictiva entre nuestra población juvenil, como sociedad nos hemos olvidado de hacerlo.
Mucho se habla de reconstruir el tejido social en grupos como el de la colonia Guerrero que por su contexto histórico, económico y social se han visto envueltos en proceso de normalización de la violencia, de los cuales ellos no son conscientes y que termina por impactar el bienestar de terceros. Sin embargo, es importante entender que en estos casos no es necesaria una reconstrucción porque la red existe pero no funciona en las condiciones ideales, lo que tenemos que lograr es una construcción positiva del tejido social.
Las posadas navideñas son el pretexto perfecto para involucrar a la comunidad no solo a seguir transmitiendo nuestras tradiciones de generación en generación sino que también son una oportunidad de entrar, permanecer y trabajar desde el núcleo de la población que queremos ayudar porque eso es lo que hace falta, dejar de hacer políticas de papel desde un escritorio y adentrarse a la realidad.
