Jorge Ortiz Ceballos
Malos resultados en transporte público.
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Paso la primera semana desde que se autorizó la nueva tarifa de transporte público y los costos de una decisión mal justificada y peor negociada.
De entrada, sabemos que el primer damnificado es la población usuaria del transporte público, porque esos dos pesos tienen un efecto multiplicador en los presupuestos de los hogares, dañando su poder adquisitivo, más en el Estado de México en donde la actividad económica tuvo periodos sin crecimiento durante el 2019 y que tampoco ha mostrado capacidad de generar competencia y atraer inversiones necesarias.
De qué sirve que el Secretario de Desarrollo Económico, Enrique Jacob, con amplia experiencia, haga giras, tenga buena relación con los gremios empresariales o que se implemente una herramienta innovadora como el Dictamen único de Factibilidad, cuando los mandos medios de Comisión de Factibilidad encontraron la manera de generar ingresos para sus bolsillos a través de la corrupción, pidiendo dinero a los solicitantes de este trámite, el reflejo es claro, la caída en los índices que marca el IMCO sobre la competitividad estatal.
Lo malo no es subirlo, si es que se va a mejorar como la interminable justificación, sino que no hay oportunidades para que los mexiquenses puedan aminorar el impacto económico. Esto sin contar, que la política de transporte público que dicta Raymundo Martínez Carbajal ha perdido totalmente su enfoque social, sin ya mencionar las bien sabidas deficiencias económicas y de seguridad.
Por otro lado, tenemos otro grupo social severamente afectado, entre los transportistas existe la queja de que al no haberse aceptado la tarifa propuesta por los concesionarios, la excesiva cantidad de $14 pesos, han optado en muchos casos en cargarle el costo de la negociación con el Gobierno del Estado a los choferes de las unidades.
Desde imponerles el gasto promedio en combustible, hasta abandonarlos a su suerte en accidentes de tránsito como uno de este año en la ciudad de Toluca, además de comenzar a que ellos mismos costeen algunas reparaciones.
Habrá que ver si las autoridades estarán para defender los derechos laborales y humanos de los choferes o se lavarán las manos.
Apunte
Tremenda desinformación la que ha generado el nacimiento del INSABI, en sustitución del Seguro Popular, el Gobierno federal debe aclarar su funcionamiento, pero no sólo mediáticamente, sino crear reglas de operación claras para evitar abusos cometidos a los beneficiarios.
Punto y Seguido.
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¿Casualidad? No lo sé. En la reciente encuesta de C&E México, sobre el ranking de alcaldes a nivel nacional, figuró en la lista Juan Rodolfo Sánchez Gómez, presidente municipal de Toluca, quien mostraba un buen desempeño en servicios públicos pero su talón de Aquiles, la seguridad municipal.
Tras las vacaciones de invierno, su reaparición es doble, dando un mensaje de seguridad personal y anunciando el municipio la incorporación de una flotilla de motocicletas a las tareas de seguridad.
Juan Rodolfo, sabe que necesita, pero también sabe cómo atenderlo, esperemos que su objetivo se vea traducido en beneficio y seguridad de quienes viven, laboran y transitan en la capital mexiquense.
@jorgeoc