- Existen medidas seguras para los donadores y personal de salud durante el proceso, especialista de UVM.
- Pacientes que sufren leucemia, cáncer, hemorragias, hemorragias obstétricas o accidentes siguen necesitando sangre y las donaciones de sangre bajaron 60%.
Ciudad de México, 21 de enero de 2021. Tras comentar que la recepción de donadores voluntarios de sangre se redujo en 60% durante 2020, el Dr. Luis Villela, Hematólogo y académico de la Universidad del Valle de México, Campus Hermosillo, explicó que esta situación ha puesto en riesgo a cientos de pacientes e hizo un llamado a la población para que vuelva a donar.
El especialista enfatizó que los padecimientos o urgencias que requieren trasfusiones de sangre no se han detenido ante la emergencia sanitaria por el COVID 19 y todos los días se enfrenta esta situación. Indicó que tan solo en el Centro Estatal de la Transfusión Sanguínea del Estado de Hermosillo durante el 2020, el primer año de la emergencia sanitaria, recibieron 3,407 solicitudes de transfusión de sangre y acudieron 1,880 donantes efectivos, es decir, solo recuperaron la mitad de la sangre administrada.
El académico reiteró que además del COVID, surgen de manera cotidiana otras patologías o situaciones, entre las más comunes que llegan a requerir transfusión están la leucemia, cáncer, hemorragias, hemorragia obstétrica o accidentes.
El Dr. Luis Villela, aseveró que los Bancos de Sangre han establecido medidas seguras para recibir a los donadores en cada Centro de Transfusión, entre ellas, la realización de citas para evitar aglomeraciones y largas filas; los donadores deben responder un cuestionario especial sobre síntomas COVID19; médicos y químicos utilizan una mascarilla especial y cubrebocas KN95, mientras que al donante se les provee de máscara especial y cubrebocas KN95; además, se mantiene sana distancia de 1.5 metros.
Agregó, que los pacientes no tienen riesgo de contraer COVID-19 a través del proceso de donación de sangre, sin embargo, además de apegarse a los requisitos de donadores seguros establecido en la NOM 253, existe un proceso para la obtención de sangre segura, el cual consiste en determinar la serología de seis virus que sí se transmiten a través de la sangre como son: hepatitis B, C, virus de inmunodeficiencia adquirida (SIDA), sífilis, Chaga y se hace una prueba para Brucella.
El Dr. Luis Villela expresó que los bancos de sangre requieren la participación voluntaria de los ciudadanos para ofrecer un mejor servicio a los pacientes. “Sería ideal que se convierta en una costumbre entre los jóvenes donar tres veces al año, si esto lo hiciera el 20 o 25 porciento de la población en cualquier estado, los bancos de sangre no estaríamos sufriendo para poder administrar la sangre que requiere un niño con leucemia, por ejemplo”.
“Piensen que alguna vez ellos puedan ser los que requieran de esa sangre y si ellos hicieron donaciones, es seguro que en esos bancos van a tener sangre para poderle ofrecer, pero si no donan y la requieren, a veces es imposible dado a la escasez y más aún cuando se trata de sangre rara de conseguir como AB negativa, A negativa, B negativa, O negativa”, comentó.
El especialista informó que en banco de sangre del Centro Médico Ignacio Chávez del ISSSTESON en Hermosillo la trabajadora social Gloria Canizales Durazo lleva a cabo un programa de motivación a adolescentes de secundaria para que sean donantes voluntarios en un futuro, en donde reúnen información sobre el impacto de estas pláticas motivacionales y la conversión a donantes voluntarios.
Las personas que pueden donar deben cumplir con algunas especificaciones de acuerdo a la NOM 253, la cual establece las actividades, criterios, estrategias y técnicas operativas del Sistema Nacional de Salud, en relación con la disposición de sangre humana y sus componentes con fines terapéuticos.
Entre ellas, ser mayor de 18 años y menor de 65, no haber tomado medicamentos en los últimos siete días o analgésicos en los últimos dos días; llevar 48 horas sin haber ingerido bebidas alcohólicas y seis horas sin haber fumado, no consumir ningún tipo de drogas, ayuno mínimo de seis horas, máximo de nueve horas, en el último año no haberse realizado depilación láser, tatuajes o perforaciones, no haber tenido relaciones sexuales de alto riesgo (con desconocidos), no haberse sometido a cirugías en los últimos seis meses, no estar embarazada, lactando o que hayan pasado seis meses de una cesárea o parto natural, no padecer de enfermedades inflamatorias sistémicas, explicó.
El Dr. Villela detalló que a un donador se le extraen 450 ml de sangre, la cual puede ayudar hasta a cuatro pacientes de diferentes patologías, ya que esta se separa en cuatro componentes: hemoglobina, plasma -se utiliza principalmente para detener hemorragias-, plaquetas -ayudan para el proceso de coagulación- y Crioprecipitado (Crio), el cual se obtiene a partir del plasma fresco congelado y en donde se obtienen factores de coagulación como el VIII, IX o X, estos factores pueden ser utilizados en hemorragias por algunas enfermedades que provocan sangrados.
Informó que la cantidad de sangre que se extrae a una persona se recupera en menos de tres semanas con una buena dieta y se recomienda que un individuo done cada tres o cuatro meses. Los bancos de sangre del país están abiertos los 365 días del año para hacer donaciones, dijo.
El hematólogo recordó que donar sangre trae beneficios para el organismo, entre ellos, contribuye a estimular la producción de células sanguíneas, se limpian los niveles de hierro en la sangre, además se ha asociado con la disminución de riesgo de padecer infartos o accidentes cardiovasculares. Por otro lado, indicó que tiene beneficios de tipo emocional, ya que el hecho de ayudar a alguien causa secreción de ciertas sustancias como dopamina y serotonina, la cuales son sustancias que hacen que el individuo se sienta bien consigo mismo.
La Universidad del Valle de México, desde hace 60 años se dedica a ofrecer educación superior de calidad, actualmente tiene 33 campus distribuidos en la República Mexicana. Cuenta con la Certificación de calidad “Lisa y llana”, máxima acreditación de calidad institucional otorgada por FIMPES 2018-2025. Con 205 programas inscritos en el Padrón de Alto Rendimiento Académico del EGEL, la UVM es la institución con el mayor número de programas de excelencia a nivel nacional. Ofrece formación a nivel bachillerato, licenciatura, técnico superior universitario, maestría y postgrados, en disciplinas tales como medicina y ciencias de la salud, ingeniería, tecnologías de la información, derecho, arquitectura, negocios, gastronomía, diseño, educación y hospitalidad. Para más información visite: http://uvm.mx