LIMA (AP) — Perú calcula que unos 50 funcionarios del sector de la salud se habrían vacunado en secreto contra el coronavirus antes que los médicos que atienden a los infectados.
El ministro de Salud, Oscar Ugarte, dijo el jueves a la prensa que la cifra exacta está siendo investigada por una comisión que dará un informe la próxima semana.
“La comisión… se instaló el lunes y tiene 10 días de plazo para presentar sus resultados”, comentó Ugarte desde un hospital de Lima donde se inmunizaba al personal sanitario.
El presidente interino Francisco Sagasti dijo durante la semana sentirse “indignado” y ordenó identificar a todos los funcionarios vacunados y destituirlos.
El gobierno tiene una lista preliminar de 487 que se aplicaron la vacuna de la farmacéutica china Sinopharm que incluye al expresidente Martín Vizcarra, al embajador de la Santa Sede en Perú Nicola Girasoli, a dos exministras, una lobista, familiares de funcionarios, un chofer de una exministra y hasta el dueño de un restaurante de comida china.
La fiscalía inició una investigación para determinar si puede acusar a Vizcarra, destituido en noviembre por presunta corrupción, por los delitos de aprovechamiento del cargo y corrupción. Vizcarra, su esposa y su hermano se vacunaron en octubre mientras él era mandatario.
El Congreso también creó una comisión investigadora para investigar el escándalo de las vacunas aunque con poco tiempo para indagar porque su gestión culmina en cinco meses.
La farmacéutica estatal china Sinopharm fue la única que realizó en Perú un ensayo de fase tres de su vacuna para el COVID-19 con 12.000 participantes. Un total de 3.200 dosis adicionales al ensayo llegaron al país y fueron aplicadas irregularmente a privilegiados.
La noticia desató una indignación popular porque los privilegiados se vacunaron antes que los profesionales del sector sanitario que lucha contra el coronavirus y del que han muerto centenares.
El país sudamericano registra más de 1,25 millones de casos de coronavirus y 44.308 fallecidos, según el Centro de Ciencia e Ingeniería en Sistemas de la Universidad Johns Hopkins.
El escándalo desnudó a Perú como país desigual donde los privilegios se imponen a los méritos.