BOTACATU, Brasil (AP) — Algunos estados de Brasil están batallando para conseguir vacunas contra el COVID-19 con el fin de concluir la inoculación de sus adultos mayores, pero a pesar de ello una ciudad del estado de Sao Paulo destinó todas sus dosis el domingo a una inmunización masiva de todos los residentes de entre 18 y 60 años como parte de un proyecto de investigación médica para la pandemia.
Las fuerzas especiales montaron 45 puntos de vacunación en centros de votación en Botucatu y le indicaron a las personas que acudieran por su vacuna al centro donde suelen sufragar. Quienes se presentaron también fueron separados por grupos de edad.
La primera dosis del día fue aplicada por el ministro de salud de Brasil, Marcelo Queiroga, quien enfatizó la importancia de mantener las precauciones para evitar la transmisión del coronavirus.
“Además de la vacunación, fomenten medidas no farmacológicas como usar mascarillas y el distanciamiento social”, comentó.
Peter Wilson, el embajador británico en Brasil, asistió al evento.
“Es absolutamente vital que todos nosotros en todo el mundo tengamos la mayor cantidad de datos posibles, y la investigación que se está haciendo en Botucatu durante los próximos meses va a ser realmente vital para ese compartir científico y el incremento del conocimiento en el mundo sobre cómo opera la vacuna de AstraZeneca”, dijo Wilson a The Associated Press.
La representante comercial Ana Lobardela, de 36 años, y su esposo, el restaurador Bernardo Piragda de 37, estaban conmovidos por el hecho de ser inmunizados ahora. Ella se aseguró de registrar el momento en que recibió la primera dosis.
“Saber que para personas de mi grupo de edad iba a tomar mucho tiempo para recibirla y teniendo a personas mayores en mi familia, no tengo palabras para describirlo”, dijo Lobardela a la AP.
El proyecto de investigación anticipa vacunar a 80.000 de los 149.000 residentes de Botucatu para probar la efectividad de la vacuna contra el COVID-19 de Oxford-AstraZeneca, así como estudiar el comportamiento de la gente en lo que respecta a la pandemia. Se pronostica que el estudio dure unos ocho meses, incluida la aplicación de la segunda dosis de AstraZeneca y el monitoreo de la población vacunada.
Una investigación similar la realiza el Instituto Butantan, que ha inoculado a más de 40.000 personas en Serrana, también en la zona rural de Sao Paulo, con la vacuna Coronavac.
Nísia Trindade, investigadora de la Fundación Oswaldo Cruz, uno de los principales institutos de investigación médica de Brasil y fabricante de la vacuna de AstraZeneca, dijo que los científicos esperan hacer más que sólo evaluar los efectos de dicha inoculación.
“Con esta investigación, veremos el tema del comportamiento ante las variantes, la transmisión y la efectividad del sistema de salud”, comentó.
Según datos del Departamento de Salud del estado de Sao Paulo, Botucatu ha registrado 211 muertes por COVID-19 entre 12.602 casos de infecciones de coronavirus. El sistema de salud pública de la ciudad está saturado; el Hospital das Clínicas está usando tres camas más de sus 40 acostumbradas.
Brasil ha registrado más de 434.000 muertes relacionadas con la pandemia.