- En el marco del Día mundial de la Nutrición, coordinador nacional de esta disciplina en UVM indicó que la pandemia incrementó 40% la solicitud de nutriólogos en centros de atención COVID-19.
- Durante la pandemia se comprobó la importancia de la alimentación como prevención de las enfermedades crónicas.
Ciudad de México, 28 de mayo de 2021. A un año y dos meses de iniciada la crisis por el SARS-CoV-2 en nuestro país y, en el marco del Día Mundial de la Nutrición, el Dr. Herón Salgado, Coordinador Nacional de Nutrición de la UVM, advirtió que enfermedades crónicas como la obesidad, hipertensión y diabetes son las pandemias del 2021 y, dado que fueron las que incrementaron la tasa de mortalidad en México por el COVID-19, es necesario que nutriólogos y profesionales de la salud trabajen en conjunto para revertirlas.
El Dr. Salgado recordó que a nivel nacional más de 15 millones de personas presentan hipertensión, más de 7 millones diabetes y México se ha colocado entre los primeros lugares en obesidad infantil. El efecto que estos padecimientos han tenido para agravar en la epidemia de COVID-19 y en otras enfermedades crónicas, hace necesario un trabajo intenso y coordinado para la promoción de la alimentación saludable y prevención de la salud.
La disciplina y práctica de la Nutrición -que se celebra a nivel mundial el 28 de mayo- ha experimentado transformaciones y ha sido redimensionada a partir de la crisis de salud que vive la humanidad. El Dr. Salgado expuso que previo a la pandemia por COVID las personas buscaban atención en Nutrición solo cuando tenían desarrollada una enfermedad, con el objetivo de conseguir una dieta paliativa para continuar con cierto estilo de vida, sin embargo, durante la pandemia se comprobó la importancia de la alimentación como prevención de las enfermedades crónicas.
Derivado de la pandemia y de la preocupación generalizada en la población en cuanto a la sintomatología que produce COVID 19.
“Hubo un aumento en la consulta a profesionales de la salud respecto al tema de hábitos alimenticios, buscando una alimentación rica en vitaminas, antioxidantes, con un consumo adecuado de proteínas y con un control de carbohidratos; lo anterior, con el objetivo de prevenir o disminuir los síntomas en caso infectarse por el virus”, explicó.
Por otro lado, se tuvo un incremento de aproximadamente 40% en la movilidad clínica, es decir, Licenciados en Nutrición y profesionales con Maestría en Nutrición Clínica fueron requeridos en los centros de atención COVID en la Ciudad de México, por lo tanto, jugaron un rol trascendente para dar seguimiento a pacientes que presentaban desde síntomas leves hasta pacientes hospitalizados con inflamación importante.
El académico, expuso que la educación en la Nutrición es un tema prioritario para prevenir, no solamente la enfermedad por COVID 19 sino cualquier otra infección o virus, además que influye en el tratamiento de enfermedades crónicas. Para ello, el especialista en nutrición tiene un impacto trascendente en la promoción y prevención de la salud.
Dijo que, dado a la relevancia de esta profesión, el nutriólogo debe ser creativo e innovador para abordar a cada paciente. Mencionó que la preparación inicial de un nutriólogo es la licenciatura en esa disciplina, sin embargo, como para todo profesionista, es recomendable la educación continua, en este caso se ha visto que la Maestría en Nutrición Clínica, es una de las más solicitadas tras la pandemia, otra opción es continuar con una especialidad en nutrición en el área deportiva como la Maestría en Nutrición Deportiva