TEL AVIV, Israel (AP) — Las nuevas infecciones diarias con coronavirus en Israel están alcanzando niveles récord, pese a la exitosa campaña de vacunaciones en el país y el lanzamiento reciente de la primera inoculación de refuerzo en el mundo.
La diseminación del virus ha sido impulsada por la variante delta, más contagiosa — incluso entre vacunados — y desató rumores de limitaciones a las congregaciones justo antes de los días más sagrados del calendario judío.
El gobierno registró 9.831 casos nuevos el lunes, el total más alto para un día desde los 10.118 registrados el 18 de enero, que son el récord en el país.
Desde enero, Israel ha realizado una de las campañas de vacunaciones más rápidas, con la que pareció controlar la pandemia. Un nivel de apenas una decena de casos nuevos el 22 de mayo desató lo que se esperaba fuese un verano abierto al turismo, los conciertos y el regreso a restaurantes y mercados.
Pero el 21 de junio, el gobierno reportó 125 nuevos casos, más de doble de los 49 reportados la víspera, y el alza ha continuado desde entonces.
El gobierno pronto aplazó el plazo original del 1 de agosto para reabrir el país al turismo extranjero, en un duro golpe a una industria que ha sufrido una caída de más de 80% en visitantes durante la pandemia. Las autoridades comenzaron a emitir advertencias ominosas sobre la reapertura de las escuelas y la posibilidad de nuevas restricciones durante el período de feriados religiosos que comienza en septiembre.
El uso de mascarillas y los pasaportes de coronavirus, requerimientos levantados cuando las infecciones cayeron a su punto más bajo en mayo, están de nuevo en vigor para ingresar a espacios públicos cerrados.
Más de 5,9 millones de los 9,3 millones de habitantes de Israel han recibido al menos una dosis de vacuna y loa datos oficiales muestran que las inyecciones ayudaron a evitarles a las personas enfermarse severamente. Un numero desproporcionado de los hospitalizados con COVID-19 no están vacunados.