Abraxas

Abraxas (o Abrasax o Abracax) del griego ἀβραξάς, era el nombre de un dios que representaba el bien y el mal, un dios y un demonio, adorado por los cainitas y también por los egipcios. Su mística se representaba numéricamente, ya que la su suma de sus letras era 365 (los días del año), pues ἀ = 1; β = 2; ρ = 100; α = 1; ξ = 60; ά = 1 y ς = 200. Y por eso, me ha parecido curioso mencionarlo en este escrito, del día 365 del año.

Los símbolos de Abraxas son un círculo partido por la mitad en forma diagonal Æ, o por una balanza nivelada con dos cabezas de águila, que se reproducían en los amuletos, grafitis, etc., especialmente por los basilidianos, una secta gnóstica fundada por Basilides de Alejandría, en el siglo II. Es probable que la palabra mística ‘abracadabra’ sea un derivado del nombre del mencionado dios. Dios mencionado en el Libro Sagrado del Gran Espíritu Invisible, de los gnósticos y también en papiros mágicos griegos.

‘El nombre de Abraxas podría tratarse de un criptograma de origen hebreo, escrito inicialmente en dos líneas ABRA/XAS, que se leen en hebreo boustrophedon, hacen ARBA/XAS, es decir: “Que Dios (ARBA) proteja (XAS)’.

Los basilidianos, herejes del siglo ii, habrían utilizado el término para designar a todos los eones, emanaciones divinas, clases de genios o ángeles, que presidían los 365 cielos. Otros inter

El término abraxas, compuesto por siete letras, se refiere, en el sistema gnóstico, a los siete planetas (y por extensión a los siete arcángeles, los siete pecados, los siete días, etc. ). Por una lógica similar a la del Gran Año, podría ser el símbolo de la totalidad de la creación, del Cosmos y del Conocimiento (gnosis)’.

(Wikipedia)

Y esta información expuesta me parece interesante, en este momento de final de año, en el que todos nos deseamos ‘un buen año’, aunque sabemos que, como los anteriores y posteriores, tendrá sus aspectos positivos y negativos, así es la vida.

Un compañero me ha enviado un whatsapp que me ha parecido muy acertado, pues me ha deseado ‘que el año 2025 no sea peor que el 2024’, ya que está en línea con la filosofía abraxista que, como hemos visto, contempla la combinación del bien y del mal.

El mencionado término ‘abracadabra’, se contempla en un ensalmo ofrecido por el médico latino Quintus Serenus Sammonicus (*), término de posible origen semítico, que significaba: ‘lo que se ha dicho, se ha hecho’; los gnósticos del siglo III utilizaban ese término, y lo expresaban en sus amuletos en forma de triángulo:

(*) asesinado en el año 212, por orden del emperador Marcus Aurelius Antoninus (Caracalla).

ABRACADABRA

ABRACADABR

ABRACADAB

ABRACADA

ABRACAD

ABRACA

ABRAC

ABRA

ABR

AB

A

y, posteriormente, los cabalistas atribuyeron a esa palabra cualidades mágicas. Si bien, etimológicamente, hay discrepancias, ya que se le atribuyen diferentes orígenes:

• Del arameo Adava Kedavra: que todo se destruya; o de Abra Cadavra: crearé como diré.
• Del hebreo Ad Ben Ruaj Acadosh: el padre, el hijo y el espíritu santo; o de Abarja Dibra: bendeciré tus palabras.
• Del árabe Abra Kadabra: que se destruya

En definitiva, y para finalizar estas elucubraciones (término que, etimológicamente, viene del latín elucubräre (redactar a la luz de una vela), derivado, a su vez, de ex y lux), me parece que podríamos desearnos, para el próximo 2025: ‘luz, más luz’ (licht, mehr licht), como pidió antes de morir Johann Wolfgang Goethe (1749 – 1832); y para ello, deberíamos esforzarnos y exigir el mismo esfuerzo a nuestros representantes políticos, para que la ‘abracadabra’ sea efectiva y ‘lo que se ha dicho, se ha hecho’, o ‘crearé como diré’ es decir, que cumplamos y cumplan su palabra, y que evitemos todo tipo de bulos, de fake news, de promesas vacías, etc. Solo con esto, ya tendríamos mucho ganado.

Nota final:

Renunciar al pasado, generalizando, como si todo fuera malo, no es positivo ni conveniente. En mi familia recordamos que mi abuelo materno, que falleció el 1 de enero de 1946, cuatro años antes de nacer yo (que llevo su nombre, en su recuerdo), a finales del 45 (estando enfermo, como consecuencia del consejo de guerra, prisión  y de todo tipo de penurias y escasez, impuestas por parte de las fuerzas franquistas, ya que mi abuelo había un militar profesional, primero monárquico y después, republicano, y Menorca fue la última zona en caer en las garras de los rebeldes) el 31 de diciembre, brindó con su esposa e hijas, deseando que con el año viejo se fueran todos los males, y el 1 de enero, al medio día, falleció él, pero el régimen fascista continuó 40 años más, y sigue.

Muchas gracias a todos los lectores, y mucha luz en el 2025.