Ante la falta de compromiso con la ley, y el nulo respeto a la libertad de asociación y de acción que debiera tener toda oposición política o competencia electoral, por parte de las autoridades municipales de Huixquilucan, hacemos del conocimiento general la siguiente denuncia de hechos en relación a los ataques frontales en contra de nuestra propaganda partidista y electoral.
Sabíamos que nuestras denuncias y nuestra campaña molestarían a muchos, pues la intolerancia y la falta de apertura democrática es algo que ha caracterizado tanto a la actual administración municipal como a quien, hasta hace poco, era el titular de la misma. El día de ayer, una vez más, volvieron a violentar nuestra publicidad, ahora arrancando la lona de un espectacular de nuestro candidato a diputado local, Guillermo Zamacona.
No es la primera vez que vecinos e integrantes de las campañas en campo denuncian este tipo de hechos acaecidos por agitadores “anónimos”. Anteriormente, en la campaña de 2017 sucedieron eventos similares. De igual forma, han sido diversos los medios quienes en la pasada contienda electoral reportaron el desmantelamiento (flagrante y en plena luz del día) de la propaganda del entonces candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Arturo Martínez Alfaro. En esta elección, comenzaron la ‘campaña negra’ pintando y blanqueando reiteradamente nuestras bardas, y ahora retiran nuestra publicidad (legítima y legal).
Ante tales hechos sistemáticos y repetidos en cada elección, presentaremos la denuncia correspondiente e informaremos a la Autoridad de lo sucedido. Sabemos que hay muchos que no quieren que se conozcan los problemas, ni las múltiples amenazas que se hacen a nuestras bases y simpatizantes.
A todas las vecinas y vecinos de Huixquilucan, les decimos que no están solos. Sabemos que el oficialismo se basa de la amenaza, el hostigamiento, el condicionamiento de permisos y el amedrentamiento para buscar acallar voces. ¡No nos vamos a dejar! Hagamos equipo para dar solución a los problemas de nuestro querido Huixquilucan.
