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Afirma PRD que logró visibilizar a las mujeres indígenas y afromexicanas en las leyes que sancionan la violencia obstétrica cometida por personal médico

La “pertinencia cultural”, concepto superado, fue sustituido por “perspectiva intercultural”, que determina que las necesidades específicas de las mujeres indígenas y afromexicanas deben ser tomadas en cuenta en el momento de diseñar las políticas públicas, señala

Palacio Legislativo, 16-03-2022 (Notilegis).- La diputada Gabriela Sodi Miranda (PRD) destacó que su bancada logró que se realizaran modificaciones en las leyes generales de Salud y de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia para que las mujeres indígenas y afromexicanas sean visibilizadas en materia de violencia obstétrica.

Expuso que la “pertinencia cultural”, concepto superado, fue sustituido por “perspectiva intercultural” que determina que las necesidades específicas de las mujeres indígenas y afromexicanas, deben ser tomadas en cuenta en el momento de diseñar las políticas públicas.

“Esto significa que México pasa del modelo ´paternalista´ a uno moderno que exige la incorporación de ellas a los debates y la toma de decisiones desde una perspectiva de ´igualdad de derechos y oportunidades” al momento de diseñar las políticas públicas que también les atañen”, señaló en un comunicado.

Sodi Miranda sostuvo que el PRD está a favor de reformas que dignifiquen a las mujeres y, en esta ocasión, se dio el caso cuando la Comisión de Salud presentó, a consideración del Pleno, un dictamen para modificar las leyes generales de Salud y de Acceso a las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, a fin de sancionar la “violencia obstétrica” ejercida por profesionales de la salud (predominantemente médicos y personal de enfermería) hacia embarazadas, en labor de parto y el puerperio.

Refirió que, de acuerdo con el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), la violencia obstétrica constituye una violación a los derechos reproductivos y sexuales de las mujeres, muy concurrida.

“Entre 2011 y 2016, 33 de cada cien mujeres de 15 a 49 años que dieron a luz, sufrieron algún tipo de maltrato por parte del personal que las atendió. La mayor proporción de casos reportados se encuentran en el Estado y la Ciudad de México, Tlaxcala, Morelos y Querétaro”, precisó.

Además del maltrato físico y verbal, añadió la perredista, la práctica injustificada de cesáreas figura como otra de las formas de violencia en la atención obstétrica ya que, en México, de las 3.7 millones de mujeres a las que se les practicó dicho procedimiento quirúrgico, el 10.3 por ciento no fue informada de la razón; mientras que al 9.7 por ciento no les pidieron su autorización para realizarla.

Por ello, reiteró, se cambió el término ´pertinencia cultural por ´Perspectiva intercultural´, con el objeto de garantizar los derechos de las mujeres rurales, particularmente las indígenas y afromexicanas.

Explicó que el término “pertinencia cultural” además de ser generalizado, no especifica la posición de la mujer como unidad, es un concepto ya superado sociológicamente por ser considerado como paternalista y violentador de los derechos humanos de quienes culturalmente tienen usos y costumbres distintos a los de la mayor parte de la población.

“Fue definido como ´la forma correcta´ en la que debemos comportarnos al interactuar con indígenas debido a que sus protocolos de interacción no son los mismos que usa la población mestiza”, comentó.

Sin embargo, explicó la también presidenta de la Comisión de Atención a Grupos Vulnerables, “no podemos seguir tratando a los pueblos y comunidades indígenas y afromexicanos de esta manera, es preciso garantizar el respeto a las garantías individuales de este sector que no habían sido consideradas en la legislación”.

“A partir del reconocimiento de la diversidad, la igualdad de derechos y la equidad, en una interacción positiva y el diálogo intercultural, damos certeza a todas las mexicanas en su diversidad, en la Ley General para una Vida Libre de Violencia”, finalizó.