Por Marien Garza, Miembro del Consejo Consultor de Nutriólogos de Herbalife Nutrition
El mes de febrero se caracteriza por ser el mes del amor y la amistad en México y en muchos países, el 14 de febrero se festeja a San Valentín. Y la palabra afrodisíaco, que va muy de la mano al amor[1]. De ahí que, a lo largo de la historia, y en múltiples culturas, los alimentos y las bebidas no solamente sirven para realizar nuestras funciones fisiológicas, sino que también nos dan satisfacción, placer y gusto.
El ser humano, se ha alimentado con propósitos psicológicos durante siglos. El alimento, el placer y el deseo sexual, han ido de la mano. En los siglos XVII y XVIII en Francia, se dice que Madame Pompadour comía trufas, vainilla y apio para aumentar la libido, y complacer a Luis XIV[2]. Se cuenta también que los antiguos romanos preferían afrodisíacos exóticos como los hocicos de hipopótamos y los globos oculares de hienas. Y por su parte, la medicina tradicional China defendía el uso de delicias raras y especias para aumentar el placer[3].
Los llamados afrodisíacos, en honor a la diosa griega del amor y la belleza Afrodita, son alimentos, bebidas, sustancias o aromas que presuntamente tienen el poder de aumentar el deseo sexual o la libido.Científicamente hablando, en ocasiones, únicamente se han asociado a un efecto placebo[4].
Mencionemos ahora 10 alimentos que se relacionan con ser afrodisíacos:
- Fresas y frutos rojos. Son ricas en vitaminas y antioxidantes, pero es muy importante recordar desinfectarlas bien antes de consumirlas.
- Chocolate. Asociado con producir endorfinas, conocidas como las hormonas de la felicidad. Debemos cuidar la cantidad y la calidad del chocolate y buscar que tenga el mayor porcentaje posible de cacao y que no tenga exceso de grasa y azúcar.
- Cacao. Es la semilla que se utiliza para producir el chocolate, puede comerse en forma de cacao nibs o en polvo.
- Pimienta. Una especie de gran uso culinario, que va bien en muchas recetas y puede ser parte de una receta con jitomate.
- Vino tinto. Grandes son las propiedades del vino tinto para favorecer la salud cardiovascular. En el caso del amor, puede tener efectos relajantes para el sistema nervioso.
- Aguacate. Por su gran contenido de grasas saludables, apoya al buen funcionamiento hormonal.
- Nueces y semillas. Así como el aguacate, las grasas buenas favorecen la producción hormonal, tan ligada al equilibrio sexual, tanto femenino (estrógenos), como masculino (testosterona)[5].
- Miel. Por algo el nombre de “Luna de miel” a la noche de bodas. Hay que recordar que la miel es un carbohidrato simple que nos da energía de forma inmediata.
- Mariscos. Son fuente de algunos minerales como el zinc, que favorecen la síntesis hormonal, quizá por ello se asocian con promover el placer sexual.
- Maca. Una raíz originaria de Perú, que poco a poco se ha ido introduciendo al mercado mexicano, se vincula con mejorar la libido y apoyar en procesos de salud sexual.
El Dr. Eduardo Calixto, gran neurobiólogo mexicano y experto en el tema de amor y ciencia, señala en su investigación, que:
“El amor genera la liberación de diversos neurotransmisores cerebrales, entre los que se encuentran la dopamina, norepinefrina y serotonina y que, enamorarse, genera una neuroquímica específica para aprender, memorizar y regular procesos hormonales que son beneficiosos para el cerebro[6]”.
Sin duda un tema apasionante que debe celebrarse en febrero y durante todo el año.
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[1] Diccionario de la Real Academia Española, 2022.
[2] Hooper-Hamersley. The Hunt after Jeanne-Antoinette de Pompadour: Patronage, Politics, Art, and the French Enlightenment. Lexington Books, 2011.
[3] Valores. Revista Abril, 2016. https://issuu.com/valoresonline/docs/valores_abril2016/34
[4] West E, Krychman M. Natural Aphrodisiacs. A Review of Selected Sexual Enhancers. Sexual Medicine Reviews. Volume 3, Issue 4, 2015.
[5] Serra, M. V. (2017). Grasas buenas: cuida tu salud con la nutrición evolutiva. Editorial AMAT.
[6] Calixto E. Amor y Desamor en el Cerebro. Editorial Aguilar, 2018.