· La capacitadora de la Casa de la Dignidad y las Libertades, María Guadalupe Hernández Nicolás propuso repetir patrones funcionales de tratar bien a todas las personas, sin diferencias y aplicar “ajustes razonables” para que se sientan incluidas.
Toluca, Estado de México, 4 de enero de 2024.- La Comisión de Derechos Humanos del Estado de México (CODHEM), apuesta a la capacitación y a la psicoeducación para cambiar la percepción sobre la salud mental y discapacidad psicosocial, a fin de dar un trato digno y no hacer diferencias ni afectar derechos humanos de las personas que la padecen, destacó la capacitadora del Departamento de Atención a Personas con Discapacidad y Personas Adultas Mayores, María Guadalupe Hernández Nicolás.
Mencionó que se ha detectado la falta de información, además de que existe doble prejuicio respecto a la discapacidad psicosocial, por ello, el personal de la Casa de la Dignidad y las Libertades acude a los 125 municipios mexiquenses para brindar capacitación sobre el tema y atiende las quejas por discriminación que se presentan contra personas servidoras públicas.
Explicó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que la salud mental involucra cómo nos sentimos, cómo expresamos nuestras emociones y cómo validamos las de los demás, la calidad de relaciones que se tienen con la familia, compañeros de trabajo y la pareja, además de cómo se confrontan situaciones complicadas en la vida, pero cuando no se cuida de manera correcta, puede desencadenarse un trastorno mental, lo que da pauta a una discapacidad psicosocial, como la depresión, ansiedad, trastorno obsesivo compulsivo y esquizofrenia, entre otras enfermedades.
Precisó que la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad señala en su artículo 1 que el propósito es promover, proteger y asegurar el goce pleno de condiciones en igualdad, sin importar si la persona tiene o no discapacidad; además visibiliza ese tipo de discapacidad, la cual se caracteriza porque no se ve, por ello, la recomendación es eliminar las barreras actitudinales como son los prejuicios.
La también psicóloga dijo que la psicoeducación ayuda a evitar prejuicios, estereotipos y estigmas contra las personas que visitan al psicólogo o tienen un trastorno mental, por lo que se deben repetir patrones funcionales de tratar bien a todas las personas, sin diferencias y aplicar “ajustes razonables” para que se sientan incluidas, es decir, generar condiciones para el ejercicio de sus derechos, como hablar de manera clara y sencilla en el caso de que soliciten un servicio y nunca suponer lo que necesitan, sino preguntar qué requieren o cómo hacerlo.
Por último, la especialista de la CODHEM recomendó dar igual de importancia a la salud física y a la salud mental, no minimizar emociones o solo platicarlo con la pareja, amigos o familiares pensando que pasará ese malestar, sino pedir ayuda cuando lo necesiten y acudir con una persona profesional de la psicología para dar una solución funcional a sus problemas.