- El ensayo evaluará al BI 764198, un nuevo compuesto, primero en su clase, enfocado en personas hospitalizadas infectadas con SARS-CoV-2 con complicaciones respiratorias graves, para las que hoy las opciones de tratamiento disponibles son muy limitadas.
- Esta nueva opción terapéutica podría ayudar al 67-85% de los pacientes con COVID-19 ingresados en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) que padecen síndrome de dificultad respiratoria aguda (SDRA), reduciendo potencialmente la necesidad de ventilación mecánica para salvar vidas.
- Esta iniciativa es parte de los esfuerzos continuos de Boehringer Ingelheim para acelerar el descubrimiento y desarrollo de medicamentos para pacientes COVID con necesidades no cubiertas.
Ciudad de México a 6 de noviembre de 2020. Desde el inicio de la pandemia por COVID-19, el compromiso de Boehringer Ingelheim ha sido contribuir con su experiencia, conocimiento científico y recursos disponibles para desarrollar nuevas opciones terapéuticas que contribuyan a la lucha contra esta enfermedad.
En ese sentido, la farmacéutica anunció el inicio de un ensayo clínico fase 2 de su compuesto BI 764198, un potente inhibidor selectivo de TRPC6 (canal catiónico activado por receptores) que puede aliviar el daño al pulmón y disminuir el riesgo o la gravedad de complicaciones respiratorias agudas en pacientes infectados por SARS-CoV-2 que han sido hospitalizados.
El objetivo de esta terapia es reducir la necesidad de asistencia respiratoria, mejorar la tasa de recuperación de los pacientes, aliviar la enorme carga económica y social que este nuevo coronavirus representa para los sistemas de salud a nivel mundial y salvar vidas.
«Sabemos que la COVID-19 puede causar complicaciones pulmonares graves como neumonía viral y, en casos graves, provocar síndrome de dificultad respiratoria aguda e insuficiencia pulmonar. Estos pacientes a menudo no pueden respirar por sí mismos y en muchas ocasiones requieren soporte vital de un ventilador mecánico que les ayude a suministrar oxígeno al cuerpo”, dijo la Dra. Lorraine B. Ware, Presidenta de Ralph and Lulu Oven Endowed y Profesora de Medicina, Patología, Microbiología e Inmunología en la Universidad de Vanderbilt, Estados Unidos.
Expuso que si bien esperan que las futuras vacunas contribuyan a reducir los casos graves de COVID-19, sigue existiendo una necesidad aún por resolver en la atención de pacientes infectados con complicaciones respiratorias y en la disponibilidad para los profesionales de la salud de una alternativa eficaz a la ventilación mecánica que reduzca de manera importante la carga del tratamiento dentro del entorno hospitalario.
Aproximadamente, 15% de los pacientes infectados con SARS-CoV-2 desarrollan una enfermedad grave y hasta 30% de ellos pueden requerir atención médica en una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). Entre 67 y 85% de quienes ingresan a una UCI presentan dificultad respiratoria aguda, complicación potencialmente mortal de la COVID-19 grave[i].
«El BI 764198 puede constituir el primer tratamiento viable para el SDRA relacionado con la COVID-19, ayudando a cerrar una brecha significativa en el régimen de atención para los pacientes con la enfermedad. A medida que fuimos aprendiendo más sobre ella, nos dimos cuenta de que nuestro compuesto podría tener un potencial único para ayudar a los pacientes más gravemente afectados, por lo que decidimos llevarlo a la etapa de estudios clínicos», comentó por su parte el Dr. Mehdi Shahidi, Vicepresidente Ejecutivo Sénior de Medicina y Director Médico de Boehringer Ingelheim.
«Esperamos que este paso adelante proporcione a los médicos tratantes una nueva herramienta para mejorar el pronóstico de sus pacientes hospitalizados afectados por las complicaciones respiratorias de la COVID-19», agregó.
Finalmente, la Dra. Guillermina Muñoz Gallegos, Directora Médica de Boehringer Ingelheim México, Centroamérica y El Caribe expuso que, impulsado por la innovación, este laboratorio farmacéutico es parte del esfuerzo colectivo en la lucha contra la pandemia. “Con base en nuestras áreas de especialidad, nos hemos involucrado en una serie de actividades para encontrar soluciones médicas ante la COVID-19, trabajando en estrecha colaboración con investigadores académicos, instituciones internacionales y otros aliados dentro del sector”.
Indicó que, en la actualidad, participa en un amplio conjunto de iniciativas para combatir la enfermedad y salvar las vidas de los pacientes alrededor del mundo, incluida la investigación y el desarrollo de anticuerpos contra el SARS-CoV-2 que puedan neutralizar el virus, de moléculas pequeñas para inhibir su replicación y el desarrollo de terapias para prevenir coágulos de sangre. También trabaja activamente en la iniciativa de acceso global con la Fundación Bill y Melinda Gates, así como en iniciativas de desarrollo global que incluyen el Acelerador Terapéutico de COVID-19 (CTA) y el Consorcio CARE de Europa.