- Hydrous lanza un modelo de inversión que permite a los mexicanos acceder a la residencia permanente en EE.UU. a través del programa EB-5, invirtiendo en infraestructura de tratamiento de agua.
- Los proyectos generan ingresos estables con contratos a largo plazo lo que reduce el riesgo para los inversionistas.
Ciudad de México junio 2025.- La empresa de soluciones hídricas Hydrous Management anunció el lanzamiento de un innovador modelo de inversión en activos descentralizados de tratamiento de agua que, además de generar retornos económicos sólidos y estables, permite a inversionistas mexicanos calificar para la residencia permanente (Green Card) mediante el programa federal EB-5.
Este modelo nace de un acuerdo estratégico entre Hydrous y Great Southwest Regional Center, firma especializada en proyectos con elegibilidad migratoria en Estados Unidos, quienes identificaron en el sector hídrico una oportunidad de alto impacto económico y generación de empleo. La alianza facilita que inversionistas extranjeros canalicen recursos hacia infraestructura crítica en EUA y obtengan a cambio beneficios migratorios y financieros.
Inversión con propósito y retorno
El modelo de Hydrous consiste en desarrollar proyectos de agua como servicio (WaaS) para clientes industriales en Estados Unidos, usando infraestructura física que genera ingresos estables gracias a contratos de largo plazo.
En paralelo, los proyectos son elegibles para el programa EB-5, que permite a inversionistas extranjeros acceder a la residencia legal estadounidense al invertir en iniciativas que generen empleo y desarrollo regional.
“Lo que ofrecemos no es solo una puerta de entrada legal y estructurada a Estados Unidos, sino la oportunidad de ser parte de un gran cambio ambiental. Además, los inversionistas acceden a un recurso indispensable que siempre será utilizado por las industrias, garantizando un retorno sostenible que beneficiará no solo a ellos, sino también a las próximas generaciones,” señaló Juan Pablo Rivero, cofundador y CEO de Hydrous.
Una solución a una crisis silenciosa
De acuerdo con datos de la UNESCO, hasta 2022, solo el 60% de las aguas residuales generadas por actividades económicas y hogares fue tratada de forma segura, de acuerdo con los datos reportados por 42 países que representan apenas el 12% de la población mundial.
Esta limitada cobertura de datos revela una enorme área de oportunidad para invertir en soluciones que promuevan el tratamiento adecuado y reúso del agua. Países como Israel ya logran reutilizar más del 87% de su agua tratada, mientras que Estados Unidos mantiene niveles de reutilización mucho más bajos, de aproximadamente 20%, lo que subraya el potencial de crecimiento del mercado del reúso hídrico en Norteamérica
Además, en Estados Unidos, la infraestructura hídrica como lo son; plantas de tratamiento, presas, tuberías y sistemas de distribución, están en estado crítico y requiere grandes inversiones. Según la Sociedad Americana de Ingenieros Civiles (ASCE), el déficit para reparar, modernizar y ampliar esta infraestructura supera los 500 mil millones de dólares. Este retraso pone en riesgo el suministro seguro de agua potable y el tratamiento de aguas residuales, lo que podría provocar cortes de agua, contaminación y pérdidas económicas, afectando la salud pública y el desarrollo económico.
“Estados Unidos enfrenta una crisis hídrica estructural que pone en riesgo el acceso futuro al agua para comunidades, empresas e industrias. Nuestra solución permite implementar sistemas modulares, móviles y eficientes, financiados en conjunto con capital privado, que preparan a las empresas para garantizar el suministro continuo de este recurso vital en sus operaciones. Además de generar ahorros sustentables, estos sistemas reducen la dependencia de la red pública, ofreciendo una alternativa de inversión segura, con impacto ambiental positivo y un valor estratégico clave para la seguridad hídrica del país”, agregó Rivero.
Casos de uso y rentabilidad probada
Hydrous ya ha implementado casos de éxito como el de una planta industrial en México que duplicó su capacidad de tratamiento, redujo la humedad de lodos de 95% a 32%, y logró un retorno de inversión en apenas 12.7 meses. En Texas, el sistema aplicado a operaciones petroleras logró recuperar hidrocarburos y producir agua de calidad para reuso, con menores costos que tecnologías tradicionales.
Los casos de éxito actualmente operativos permiten validar la viabilidad y efectividad del modelo, evidenciando que es posible combinar rentabilidad con un impacto ambiental tangible. La experiencia en México y Texas ofrece un marco probado para replicar esta solución en Estados Unidos, un país que enfrenta una necesidad urgente de modernizar su infraestructura hídrica. Este proyecto representa una alternativa relevante para quienes buscan contribuir a mitigar la crisis del agua, al tiempo que participan en un proceso de transformación con efectos positivos para las empresas, las comunidades y las generaciones futuras.