· La conmemoración se vivirá el próximo 24 de julio
· Algunas de las mejores opciones para festejarlo se encuentran en Jalisco
El tequila es una bebida ancestral que nació en Jalisco y se trata de un embajador nato de la cultura mexicana en el mundo, que a lo largo de los años ha tomado tanta importancia que la UNESCO lo declaró, en 2006, como patrimonio cultural junto a sus paisajes agaveros e instalaciones de producción, además de poseer su Día Internacional del Tequila el 24 de julio, una fecha para honra a la tradición, el sabor y la herencia cultural nacional asociada con este emblemático elixir.
Son muchas las leyendas que giran alrededor de esta bebida espirituosa pero la más conocida cuenta que hace cientos de años una tormenta eléctrica cubría la tierra de agaves jaliscienses y un rayo cayó sobre una de estas especies, provocando que la alta temperatura cocine el corazón hasta generar un líquido con aromas únicos. Los pobladores de la zona se acercaron a revisar este fenómeno y se encontraron con un jugo de sabor dulce y sensación embriagante que encantó a todos.
Tras este hecho los locales reconocieron a este néctar como un regalo de los dioses y se apasionaron tanto por él, que se esmeraron en experimentar distintas maneras de fermentación y técnicas que lo llevaron a crear un procedimiento artesanal hasta llegar a la destilación.
Actualmente es uno de los destilados más icónicos del planeta gracias a su interesante sabor proveniente del su ingrediente esencial el agave tequilana Weber, mejor conocida como “agave azul», una especie única de entre 295 especies existentes.
Otra de sus grandes singularidades es su proceso de elaboración, un testimonio de la pasión y el compromiso de talentosos jaliscienses que trabajan arduamente desde el cultivo y su presentación en dos categorías de tequila donde uno es preparado con base en una mezcla de azúcares de los cuáles el 50% proviene del agave y el segundo es nombrado tequila 100% agave, que como su nombre lo dice es preparado en un porcentaje total de azúcares del maguey azul.
Cabe señalar, que el resultado que todo el público conoce depende del tiempo y el modo de maduración ya que cada uno tiene una personalidad propia y un sabor distintivo como son los frescos y vibrantes tequilas blancos o plata, el jóvenes u oro, suaves tequilas reposados, hasta los enérgicos añejos.
Actividades que no te puedes perder en el marco de su gran día
Con todo lo dicho, el Día Internacional del Tequila es una oportunidad para apreciar y reconocer el arduo trabajo de los productores y agricultores que han preservado y contribuido a mantener viva esta tradicional bebida, pero para hacer más completo el festejo es indispensable sumergirse en una de las experiencias únicas que el tequila ofrece, y entre las opciones a experimentar se encuentra:
· Vivir experiencias en la Ruta del Tequila dentro de los 8 municipios de Jalisco que producen este datilado en Arenal, Amatitán, Tequila, Magdalena, San Juanito de Escobedo, Etzatlán, Ahualulco de Mercado y Teuchitlán; donde puedes visitar más de una tequilera, hacer recorridos entre agaves y hasta dormir en los poblados cercanos.
· Cortesía de un caballito de tequila a los comensales del restaurante Tequila Cuervo durante todo el 24 de julio.
· Recorrido tradicional por la destilería La Rojeña de José Cuervo. Un pequeño paseo para conocer el proceso de producción del tequila que incluye degustación de tequilas como Reserva de la Familia y catado educativo en las salas Experto Tequilero.
· Casa Sauza contará con promociones en tours al 2×1 por sus instalaciones, los recorridos estarán sujetos a disponibilidad y se podrán adquirir en la tienda de souvenirs Los recuerdos de Sauza.
· Realiza una visita por San Pedro Tlaquepaque y prueba típica cazuelas de tequila, una bebida preparada que se sirve en una cazuela honda de barro con hielo, jugo de cítricos como toronja, limón y lima, refresco de toronja y tequila.
Estas son sólo algunas ideas para celebrar a lo grande, pero la conmemoración especial es también una oportunidad para disfrutar del tequila en sus diversas formas, ya sea degustando un tequila en las rocas o en caballito, mezclando un cóctel creativo como la exquisita margarita o el cantarito.
