El clima político internacional es deprimente, cada día tenemos borrascas propias de una bombogénesis, y, por eso, es difícil seleccionar un tema para, tratarlo aquí. Y el reino español, a mi modo de ver, presenta los peores índices, pues la presión política es extrema. Y esta situación, con toda seguridad, tendrá repercusiones de todo tipo. A continuación, reflejo mis elucubraciones sobre todo esto, comentarios que, obviamente, no pueden ser exhaustivos.
En meteorología se considera que una borrasca se ha formado de manera explosiva, cuando la presión de su núcleo disminuye al menos 24 hPa (hectopascal) en 24 horas; y me parece que puede ser una buena metáfora, para aplicarla en el ámbito político que, no lo olvidemos, incluye todos los aspectos sociales, pues todo es política.
Y aplicando esta metáfora, hay momentos, períodos, más agudos y críticos que otros, si bien, claro, no se puede generalizar, ya que las realidades son múltiples y variadas, como las percepciones, máxime cuando nuestra memoria también nos traiciona, como apuntaré al final del presente escrito.
Y mi percepción del momento actual es que estamos sufriendo una imponente tormenta, con impresionantes descargas eléctricas, que todo son rayos y truenos, que nos impiden todo tipo de análisis puntual y sosegado.
Por eso, no es necesario hacer un brainstorming (tormenta de ideas) pues estamos en pleno tsunami, en plena ‘riuà’ (*) de noticias, y mayoritariamente (mejor dicho, la casi totalidad), negativas.
(*) para no olvidar a los valencianos.
Atendiendo a las noticias de ayer, hay que diferenciar la ambigüedad de algunas, pues si bien tienen un aspecto positivo, detrás tienen una realidad totalmente negativa, como sucede en los siguientes ejemplos:
- Que el TPI (el Tribunal Penal Internacional) haya anunciado la orden de detención del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y de su ministro de defensa, Yoav Gallant, es positivo; pero, claro, el mal dominante, imperdonable e inhumano, es la cantidad de muertes y heridos palestinos, libaneses, sirios, etc., los desplazamientos constantes, la miseria y la hambruna, la destrucción material y psicológica,
- Que Putin haya enviado un misil balístico hipersónico contra Ucrania, pero sin carga nuclear (sólo como aviso, vaya broma más nefasta); cuando, como en el caso anterior, la guerra de invasión mantenida durante 1002 días, es propio de desalmados, incluyendo, en ese grupo de inhumanos, a los irresponsables de las grandes industrias armamentísticas americanas, que, como grandes lobbys, imponen las guerras que les interesan, para que su cuenta de resultados presenten balances impresionantes,
- Que Donald Trump haya sustituido a Matt Gaetz (por abuso sexual de menores) como candidato a asumir el cargo de fiscal general, no exculpa a Trump que, sabiéndolo, lo propuso como candidato, por su fidelidad extrema y sintonía de pensamiento, y ese trasfondo persiste, y eso es lo grave,
La lista sería infinita, pero me parece suficiente para ilustrar ese tipo de noticias con doble cara, que los medios de comunicación nos venden como un poco de aire respirable, cuando la realidad es que incluso así, es irrespirable, putrefacto, ya que tras ellos hay un verdadero apocalipsis.
El reino español también tiene su propia tormenta ciclogenética, su bombogénesis de inmoralidades, y todas negativas, pues:
- Pedro Sánchez, con su habitual trilerismo, ha salvado ‘in extremis’ su propuesta de reforma fiscal, si bien, prometiendo a unos un impuesto adicional a las compañías eléctricas, y a otros, lo contrario; lo que deja en muy mal lugar también a Junts (chantajeada por Repsol, para invertir 1100 millones de euros en Tarragona), pues todo apunta que, como siempre, verá que los acuerdos pactados, no sirven para nada,
- El comisionista Víctor Aldama acusó a Pedro Sánchez, y a varios miembros de su gobierno, de partícipes en la trama de corrupción del caso Koldo, que, evidentemente, el PSOE ha desmentido de plano. Y, como no podemos confiar en la INjusticia española, dudo de que en algún momento lleguemos a saber la verdad,
- Ayer se hizo público que Felipe VI, hace tres semanas condecoró a Eduard Sallent, exresponsable de los mossos d’esquadra (policía autónoma catalana); el ‘rey’ le impuso la condecoración del orden del mérito civil, con una graduación de las más altas. Condecoración que su antecesor Alfonso XIII creó en 1926, en plena dictadura del general Primo de Rivera, para ‘premiar las virtudes cívicas de los funcionarios al servicio del estado, así como los servicios extraordinarios de los ciudadanos españoles y extranjeros al bien de la nación’. Esta condecoración no la había recibido ninguno de los anteriores responsables de los mossos (Josep Lluís Trapero, Miquel Esquius, ni Josep María Estela), pero, claro, Felipe VI, haciendo política (contra lo que dispone su constitución) premió a Sallent, por su labor de reestablecer puentes con las instituciones policiales españolas. Y esto es denigrante, por decirlo de forma suave,
- El PSOE, junto con el PP y Vox, ayer votaron en contra de desclasificar la información del golpe de estado del 23 de febrero de 1981, que había propuesto Podemos, con el apoyo de varios partidos: PNV, Bildu, ERV, Junts, etc. Todo cuadra, pues eso demuestra, explícitamente, la involucración del rey Juan Carlos I, de Felipe González, y de un sinfín de ‘patriotas’, y nos confirma que, 43 años después, seguimos y seguiremos engañados y recibiendo lecciones de su ‘moral’; y eso es propio de países no ya tercermundistas, si no de países muy alejados de la democracia,
- La INjusticia española sigue con el juicio al abogado Gonzalo Boye, para vengarse de su defensa del president Carles Puigdemont, y otros independentistas,
- La comisión de investigación del congreso va desvelando las incorrecciones y espionaje ilegal que efectuaron los diferentes poderes del estado (judicial, policial, político y mediático) en la operación contra Catalunya, según han confesado diferentes altos cargos policiales. Y Pedro Sánchez, junto al rey, son contrarios a pedir perdón, como no lo hicieron por el genocidio en Sudamérica. El ministro de interior, Grande – Marlaska, sobre la represión del independentismo, dijo: ‘por fortuna, queda muy lejos, y no voy a ser yo ni este gobierno para pedir perdón de nada’. Silvia Barroso, en su artículo ‘España no pide perdón’, (El mon, 20/11) explica muy bien que el perdón siempre es por hechos del pasado, no del futuro; y eso es obvio, por más que ni la Zarzuela ni la Moncloa quieran aceptarlo, por su mala fe,
Por citar sólo unos ejemplos españoles, de ayer, y no extenderme.
Pero, en Catalunya, no nos salvamos, pues:
- El represor Salvador Illa, en su visita a la UE, concertó una sesión en la delegación de la Generalitat en Bruselas, a las que había invitado a un sinfín de personas, entre ellas a los exiliados: el president Carles Puigdemont, Toni Comín y Lluís Puig. Los dos primeros no asistieron, pero sí Puig (una asistencia, para mi, incomprensible e inaceptable). Pues bien, según los medios de comunicación, por los pasillos, Illa y Puig se encontraron e intercambiaron unas palabras, en apenas tres minutos. Y los medios subvencionados, como el Ara, titulan que fue un encuentro que ‘emocionó a Illa’, cuando éste se negó a reunirse con Puigdemont, vergonzante y denigrante,
- Ayer, en el Parlament, el PSC, el PP y también Junts (incomprensible e inaceptable, como el ‘encuentro de Puig e Illa), y con la abstención de Vox, rechazaron que la Sindicatura de Cuentas efectuase una auditoria de la financiación de la Copa América de vela, impidiendo que la ciudadanía conozcamos, con transparencia, las elevadas aportaciones de fondos públicos del ayuntamiento y de la Generalitat. Está claro que el resultado fue nefasto y, encima, ocultarnos la información, es un temor a que veamos la corrupción, mala gestión efectuada y mentiras repetidas, especialmente de Jaume Collboni. Y esto está en línea con los otros partidos, pero, para mi, es imperdonable que Junts, haya votado para ocultarnos la realidad. Y eso me demuestra, una vez más, que este partido está perdiendo el norte, dejándonos, a muchos, fuera de juego,
Con todos estos ejemplos, es comprensible que muchos ciudadanos nos desmotivemos y muchos se desconecten de todo. Y esto es el éxito de los impúdicos poderes, pues consiguen ese pasotismo, que les deja las manos libres, carta blanca, para seguir con sus tropelías, sin ni siquiera darnos el ‘pan y circo’.
Por todo ello, me apunto a la propuesta de Mafalda (de Joaquín Salvador Lavado Tejón, Quino, 1932 – 2020): ‘paren el mundo, que me quiero bajar’; pero no me apunto, íntegramente, a esta otra viñeta: ‘Ya sé, hay más problemólogos que solucionólogos, pero ¿qué vamos a hacerle?, pues no podemos ni debernos conformarnos, debemos combatirlos.
Y a medida que esa costra inmoral, amoral y falta de ética, se vaya endureciendo, los ciudadanos nos veremos y seremos ajenos, alejados de esas élites, de esos falsos líderes. Pero eso no nos librará de nuestra culpa, por nuestra irresponsabilidad.
Y a medida que pasen los años, y debido a nuestra frágil memoria, iremos reconstruyendo nuestros recuerdos, para hacerlos más afines, acordes y próximos a nuestro pensamiento.
Es sabido que la memoria es selectiva, pero también es reconstructiva, incluso generando recuerdos de cosas y hechos que nunca sucedieron.
Los falsos recuerdos son más habituales de lo que nos creemos, y el fenómeno no solo es individual y personal, si no que también puede ser colectivo, como explica el efecto Mandela.
Y este proceso no deja de ser un mecanismo de defensa.
Como este escrito ya se ha hecho bastante largo, dejo para mañana la explicación psicológica de los mencionados mecanismos generadores de falsos recuerdos, pues me parece del máximo interés, y requiere cierto espacio y tiempo.