*Organizó El Colegio Mexiquense coloquio internacional sobre constitucionalismos. Se cumplieron 200 años del Acta Constitutiva de la Federación Mexicana. Falta un mes para el bicentenario de la entidad
Ante los desafíos que viven las democracias y las crisis en que están envueltos varios países con una gran tradición liberal, los ocho investigadores de instituciones de Europa y América Latina participantes en el coloquio «El constitucionalismo. Una perspectiva comparada», tuvieron expresiones de confianza en la fortaleza y la tradición de las cartas fundamentales como documentos fundacionales de las naciones, y en el federalismo.
Hubo también coincidencia en las propuestas que se hicieron sobre algunos cambios indispensables que no pueden ya aplazarse, por ejemplo la permanencia de jueces de las cortes supremas hasta el fallecimiento.
El Colegio Mexiquense inició así sus actividades conmemorativas del bicentenario del Estado de México, precisamente el 31 de enero, fecha en la que se cumplen doscientos años de la promulgación del Acta Constitutiva de la Federación Mexicana, la cual, sin haber sido una constitución, fue el documento que le dio a México su primer perfil como nación.
Ese acto fundacional llegó luego del fracaso del fallido imperio de Agustín de Iturbide y mientras el país se debatía en indefiniciones que eran cuestionadas por las nacientes entidades, en especial las que se adelantaron al proceso federalista, como Jalisco, Oaxaca y Yucatán, y luego el Estado de México, creado a partir de la instalación de su Congreso Constituyente, el 2 de marzo de 1824.
En la primera mesa de trabajo se hizo la exposición de los temas constitucionalismo histórico y territorialidad hispana medieval, el gobierno económico de las provincias (y los pueblos) en la experiencia constitucional gaditana, el proyecto constitucional francés y los departamentos entre 1789 y 1791 y el constitucionalismo federal norteamericano entre 1771 y 1789.
En la segunda mesa se habló del constitucionalismo provincial argentino de inicios del siglo XIX, el proyecto federal centroamericano de 1824, la jura del Acta Constitutiva de la Federación Mexicana en Guanajuato y el modelo territorial de la constitución brasileña de 1824.
Este cartel internacional estuvo integrado por José Alfredo Sánchez Álvarez, de la Universidad Pontificia de Comillas; Antonio Manuel Luque Reina, de la Universidad Autónoma de Madrid; Mathilde Lemée, de la Universidad de Rennes; María Esther Seijas Villadangos, de la Universidad de León (España); Juan Ferrer, de la Universidad de Córdoba (Argentina); Édgar Solano Muñoz, de la Universidad de Costa Rica; Evelin Mares Centeno, de la Universidad de Guanajuato, y Gustavo Silveira Siqueira, de la Universidad de Río de Janeiro.
Una de las participaciones más comentadas fue la de María Esther Seijas Villadangos, quien recomendó observar lo que sucede en Estados Unidos, en donde el Estado no está a la altura de los desafíos que enfrenta, por ejemplo la inmigración, y sus políticos tienen la estatura de Madison, Hamilton, Jefferson, Adams y otros padres fundadores de esa nación.
Las exposiciones permitieron tener una idea de los procesos previos al nacimiento de las naciones latinoamericanas, sus dificultades para establecer un marco constitucional que les diera viabilidad, el nacimiento del republicanismo y el federalismo, los desafíos territoriales, la influencia de Estados Unidos, Francia y España, así como la trascendencia de las respectivas cartas fundamentales.
María del Carmen Salinas Sandoval, profesora-investigadora de El Colegio Mexiquense y coorganizadora del coloquio, agradeció a los ponentes sus participaciones en las dos mesas, en las que se abordaron los orígenes del federalismo y los proyectos americanos, en momentos en que los constitucionalismos buscaban legalizar o dar forma jurídica al poder público, en procesos diferentes aunque paralelos.
Darle forma jurídica a procesos históricos y lograr la formación de naciones fueron procesos muy complejos, por el dinamismo constante entre la ley y la realidad, de ahí la relevancia de analizar las libertades y de seguir estudiando la relación entidades federativas- federación, dijo, al tiempo de proponer más investigación sobre la formación del Estado de México dentro del marco la organización del Estado mexicano.
El historiador Óscar Hernández Santiago, quien trabajó especialmente para reunir a los expositores, hizo la relatoría y agradeció tanto a los conferenciantes como a los moderadores, Pablo Avilés Flores, de la UNAM, y Tatiana Pérez Ramírez, de El Colegio Mexiquense.
El coloquio fue inaugurado por José Antonio Álvarez Lobato, secretario general y encargado del despacho de la Presidencia de El Colegio Mexiquense, en compañía del coordinador de Investigación, Raymundo Martínez García, y el siguiente encuentro estará dedicado a «El Estado de México en su bicentenario», el cual se llevará a cabo el 5 de marzo, de manera presencial en Santa Cruz de los Patos, con transmisión por redes sociales.