- Gastritis, colitis, amibiasis, agruras y pancreatitis, son algunas de las enfermedades que se incrementan por el consumo excesivo de alimentos.
- Personas con diabetes e hipertensión deben solicitar dietas alternativas a sus médicos y mantener autocontrol alimentario.
El médico adscrito a la Jefatura de Servicios de Prestaciones Médicas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Estado de México Oriente, doctor Jorge Villicaña Ceja, hizo un llamado a la población a ser prudente en la ingestión de alimentos y bebidas en los próximos convivios de posadas, Navidad y Año Nuevo, para evitar malestares estomacales, aumento de peso y detonación de enfermedades crónicas.
Aseguró que es necesario que las personas con diabetes e hipertensión mantengan las restricciones recomendadas por nutricionistas para evitar alguna descompensación mayor, que amerite servicio médico de urgencia.
En estas fechas de desayunos, comidas y cenas de convivencia, las enfermedades del tipo gastrointestinal tienden a crecer, por lo que el especialista recomienda evitar la ingesta excesiva de grasas, bebidas alcohólicas, carbohidratos y azúcares, sobre todo en quienes padecen diabetes e hipertensión.
Advirtió que el organismo requiere de grasa y aceites, aproximadamente de cinco a ocho cucharaditas por día, y para ello se recomienda preferir los aceites de maíz, oliva, soya y girasol, incluso margarina que tenga menos de dos gramos de grasas saturadas por porción; en cambio se pide no excederse en nueces, semillas, aguacate y aceitunas, y evitar las grasas saturadas, mantequilla, manteca y tocino.
Dijo que en el caso de los enfermos de diabetes, no deben consumir alimentos muy dulces, como el ponche, refresco, ensaladas con frutas en almíbar y postres, ya que por contener mucha azúcar, los niveles de glucosa suben rápidamente debido a que estos endulzantes pasan casi de manera instantánea al torrente sanguíneo.
En este sentido, exhortó a las personas hipertensas a disminuir en lo posible los alimentos salados y enlatados, como bacalao, camarones y embutidos, los cuales, por su alto contenido en sodio, crecen los niveles de presión arterial.
De las bebidas prohibidas, además de las alcohólicas, se debe evitar el consumo de agua mineral, por su elevada cantidad de sales.
Recomendó a las personas que viven con diabetes e hipertensión soliciten dietas alternativas a sus médicos y mantengan autocontrol alimentario. De igual forma, sugirió no abandonar su tratamiento farmacológico, ya que “es muy típico que al darse todas estas fiestas de la época decembrina, lo que acostumbran hacer es que al paciente se le olvida o, bien, decide abandonar su tratamiento, para retomarlo el año que viene”.
Aseveró que enfermedades como gastritis, colitis, amibiasis, úlceras, agruras y pancreatitis, son sólo algunas de las que se incrementan en estas fechas, ya que las personas tienden a comer en exceso y esto, mezclado con el alcohol, podría tener consecuencias fatales.
