Ciudad de México a 20 de diciembre de 2023. Durante el año 2023, se han logrado avances significativos en los derechos de la comunidad LGBTIQ+ en México, como la prohibición y sanción de las terapias de conversión, emisión de pasaportes no binarios, entre otros. Sin embargo, a pesar de estos progresos, nuestra nación continúa siendo uno de los países de LATAM con mayores incidentes de discriminación y violencia dirigidos hacia esta comunidad.
Y es que, tan solo en los primeros meses de 2023 (abril a mayo), se registraron 19 asesinatos a personas de la comunidad, según datos de la organización Letra S. Por su parte, el portal statista, reporta que en 2022 el número de homicidios incremento en un 11% comparado al 2021.
De acuerdo con Safe Zone, movimiento enfocado en la construcción de espacios seguros e incluyentes en el mundo para la comunidad LGBTIQ+, uno de los principales retos continúa estando en el desarrollo de entornos sanos, seguros, confiables y no discriminatorios para la comunidad.
En 2021, el 10.6% de la población percibía que, la preferencia sexual, era de las formas más comúnes de discriminación, según la Encuesta sobre Discriminación en la Ciudad de México 2021 (EDIS).
“Ante este contexto, es fundamental que levantemos la voz y en conjunto desarrollemos espacios libres de violencia de cualquier tipo. Lugares que nos brinden seguridad, comodidad, que nos permitan ser quienes somos sin cuestionamientos y que nos permitan conectar y vincularnos con otras personas”, asegura Gabriela Valenzuela, Fundadora de Safe Zone
Es por eso, que, antes de que termine 2023, destacamos tres aspectos esenciales que deben estar presentes en los lugares designados como seguros para el colectivo. Estos principios, respaldados por datos contundentes, son fundamentales para construir entornos que promuevan la diversidad, el respeto y la aceptación:
● Diversidad Activa. Más que simplemente aceptar la diversidad, la diversidad activa impulsa la participación y el reconocimiento equitativo. Los lugares seguros deben ser proactivos en su compromiso con la misma diversidad, creando un ambiente donde todas las identidades sean respetadas y celebradas.
Esto implica el fomento de una cultura de aceptación y comprensión, para que la comunidad se sienta bienvenida y apoyada.
● Formación y Sensibilización. En México existen 4.6 millones de personas pertenecientes a la comunidad LGBTIQ+, de acuerdo con datos de la Encuesta Nacional de Diversidad Sexual y de Género 2021 (ENDISEG).
La educación continua sobre cuestiones relacionadas con la diversidad sexual y de género es esencial para construir lugares seguros. Los establecimientos y organizaciones deben proporcionar capacitación regular a su personal para aumentar la sensibilización sobre las experiencias y desafíos que enfrenta la comunidad LGBTIQ+.
Esto no solo contribuye a la prevención de la discriminación, sino que también promueve un entorno donde el personal está preparado para abordar de manera efectiva cualquier situación que pueda surgir.
● Políticas Anti-discriminatorias claras. La transparencia es clave en la creación de espacios seguros. Es imperativo que los lugares comprometidos con la seguridad de la comunidad LGBTIQ+ establezcan y comuniquen claramente políticas anti-discriminatorias.
En el informe Ciudad Amigable con la Población LGBTTTI, de 2018 a 2021 se incrementaron 13 instituciones de gobierno que entregaron reportes para contribuir al cumplimiento del Acuerdo Ciudad Amigable.
Establecer y comunicar claramente políticas anti-discriminatorias no solo disminuye estas experiencias, sino que también construye la confianza dentro y fuera del entorno LGBTIQ+.
Como lo comenta Gabriela Valenzuela, Fundadora de Safe Zone:
“Todas las personas tenemos derecho a la igualdad y a la no discriminación, este derecho fundamental engloba muchos temas, entre ellos el poder disfrutar de espacios que nos permitan desarrollarnos libremente, con seguridad y confianza, sin injerencia ajena o coacción alguna”.
Al adoptar y promover estos principios, los lugares no solo contribuyen a la construcción de comunidades más seguras, sino que generan un impacto positivo en sus resultados comerciales y, por ende, atraen y retienen a una clientela diversa y comprometida.
Acerca de Safe Zone
Fundado en 2020, Safe Zone es un movimiento que promueve espacios integrales, seguros y solidarios, libres de prejuicios y enfocados en crear conexiones entre la comunidad LGBTIQ+, a través de actividades basadas en cuatro segmentos: naturaleza, comunidad, entretenimiento y activismo. Actualmente cuenta con impacto digital a través de redes sociales en México, Colombia, Estados Unidos, Perú, Ecuador y España.
