Todos hemos experimentado momentos en los que afloran nuestros sentimientos, nuestras emociones; esos momentos pueden ser la sensación de vacío (por la pérdida de una persona, un trabajo, etc.); la experiencia de un impulso, necesidad o motivación (deseo, ansia, afán, etc.); la experiencia de la falta de la propia vitalidad y energía (desánimo); sentimientos negativos contra lo que obstaculiza el deseo (enfado, ira, rencor, etc.); etc.
Y claro, las campañas electorales, como la que tenemos, son un momento propicio para que resalte la experiencia de la aversión duradera o negación del valor de alguien (desprecio, odio, etc.)
Como dice la escritora Brigitte Vasallo ‘del amor al odio no hay un pequeño paso. Hay una gran decisión de por medio: la decisión de odiar’. Ahora bien, los sentimientos no son racionales, y, por lo tanto, no están sujetos a decisiones voluntarias; pero la frase de Vasallo refleja que entre el amor y el odio hay toda una complejidad psicológica.
Asimismo, y centrándonos en los políticos cuando están en ‘modo’ campaña electoral, vemos que, efectivamente, presentan intereses objetivos, como el ansia del poder político y económico, el narcisismo, la envidia, etc.; por eso, no nos extraña, en absoluto, que se transmuten. Y así, observamos transformaciones antagónicas, mostrándonos las dos caras, pues todos somos como Jano (el dios de los cambios, los pasos y las transformaciones)
Así, por ejemplo, en su momento previo al 2017, Oriol Junqueras (líder de ERC, y, en ese momento, vicepresidente del gobierno de la Generalitat) nos llegó a cansar con su mantra basado en el lema ‘el junquerismo es amor’, deseando que les fuera bien a todos los partidos, un mensaje ‘happy flower’ propio de los hippies de los años setenta; y ahora, en esta campaña municipal, nos muestra su otra cara, la que expresa su bilis amarilla, según la definición clásica de Hipócrates (460 a.C. – 370 a.C.) y Galeno (129 – 216), refiriéndose a la naturaleza colérica, ambiciosa, agresiva, etc. (ya sé que la categoría de los humores está muy superada, pero la utilizo en este escrito por su sencillez). Así, ahora vemos a un Junqueras amargado y resentido, que critica a diestro y siniestro, no dejando títere con cabeza, pues no admite críticas ni contrariedades. Y esa no deja de ser una posición mesiánica, propia de un liderazgo mal entendido y fundamentado con pies de barro.
Y esa ambivalencia la podemos observar en todos los políticos, nadie se escapa ni se priva de intentar buscar las mejores posiciones, las más ventajosas. Y, desgraciadamente, en esos momentos, los candidatos muestran, asimismo, su incultura estructural, como, por ejemplo, ayer mismo, Ana Grau, de Ciudadanos, pues dijo: ‘sin Albert Rivera, Catalunya aún estaría en las cavernas y seguiría con los dinosaurios de toda la vida: CiU y PSC (PSOE); Rivera se atrevió a hacer las cosas de otra manera en la política catalana y fue gracias a él que ella decidió dar el paso a la política’.
Todos sabemos que Ciudadanos apareció para ir contra la lengua y contra todas las señas de identidad catalanas; se aprovecharon de la corriente de pensamiento unionista español, para importarlo aquí en Catalunya, y dado su éxito, posteriormente, se lanzaron a la política estatal; y, ahora, desaparecerán, según todas las encuestas. No por que haya desaparecido toda la simiente de odio y rencor que han ido plantando, si no, por que han sido sustituidos por Vox, un partido de extrema derecha (por el mismo precio, la gente prefiere las marcas originales antes que las marcas blancas, por decirlo así)
Esta actitud de los políticos (con escasas excepciones), carente de todo tipo de escrúpulos, se puede observar en todos los círculos de poder, incluso en el Vaticano, como explica el periodista Vicenç Lozano, en su libro ‘Intrigas y poder en el Vaticano’ (Roca Editorial, 2021), en el que recoge sus vivencias en Roma, tras 35 años de corresponsal de TV3 (la televisión catalana)
En ese libro el autor explica que en la ‘santa sede’ hay una corrupción sistémica, desde siempre, por la competición de privilegios entre los cardenales.
En una entrevista efectuada a dicho autor, señala:
Xavier Bosch: ¿El Papa tiene prisa para cambiar las cosas antes de morir?
Vicenç Lozano: Sí, es evidente que este clima de guerra in crescendo de los últimos años provoca un terremoto muy importante en el Vaticano. El Papa ha acelerado las reformas los últimos meses y quiere continuar haciéndolo.
X. B.: Tu vas más allá de la muerte del Papa y hablas de la manipulación del próximo cónclave. ¿Cómo se puede manipular, si los que votan son cardenales?
V. L.: Hay un proyecto en los EUA que es el Red Hat Report, financiado por magnates norteamericanos, muy católicos, con una gran influencia en los medios de comunicación y un gran grupo de poder de convicción en el mundo de las finanzas. Lo que hacen es trabajar en dossiers sobre la vida privada y más íntima de todos los cardenales que podrán entrar en el cónclave, poniendo el foco, evidentemente, en los cardenales del sector más reformista que podrían ser papables.
X. B.: ¿Es decir, dossiers para hundir la carrera de un cardenal, para hacerles chantaje?
V. L.: Para hacerles chantaje. En las reuniones previas al cónclave, donde los diversos grupos de presión señalan algunos candidatos que pueden ser papables, se les puede manipular. Se puede intervenir para que no voten un papa que siga la línea del pontífice. Evidentemente, hay cardenales con cadáveres en sus armarios, cadáveres en el ámbito económico, financiero y posiblemente abusos sexuales, tanto en el sector reformista como en el más tradicionalista.
X. B.: ¿Y hace diez años, en el cónclave que escogió a Bergoglio, esto no pasaba?
V. L.: Fue un cónclave muy diferente de los previos. Veníamos de la renuncia del papa Ratzinger, que aunque todavía no se diga, esa dimisión vino provocada por los escándalos de Vatileaks, que hizo públicas las 3000 cuentas de la banca vaticana y el escándalo sexual, y descubrió, asimismo, que dentro del mismo Vaticano había un prostíbulo. Entonces se buscó un cardenal que venía del fin del mundo, un latinoamericano y, además, jesuita, y se le encomendaron ciertas reformas. Lo que pasa es que muchos de los que le votaron preveían que sería un papa manipulable y débil, y no ha sido así.
(…)
(Ara, 14 de mayo del 2023)
Efectivamente, todo este comportamiento mafioso desmonta las teorías puristas del ‘Espíritu Santo’, está claro.
Este ejemplo no es más que una mera muestra de que todos los círculos de poder, sustancialmente, acaban siendo corruptos, si no lo son de raíz. Por eso no nos ha de extrañar que los partidos políticos no sean hermanitas de la caridad. Su función es potenciar su poder personal y de grupo; la ciudadanía somos un mero medio para su fin.
Volviendo al amor / odio, me parece ilustrativa la siguiente fábula:
‘El odio y el amor
Hubo una vez en la historia del mundo, un día en el que el ODIO, que es el rey de los malos sentimientos, los defectos y las malas virtudes, convocó a una reunión urgente a todos los sentimientos negros del mundo, junto a los deseos más perversos del corazón humano. Llegaron a esta reunión con gran curiosidad de saber cual era su propósito.
Cuando estuvieron todos, habló el odio y les dijo: ‘Los he reunido aquí, a todos ustedes, porque deseo con todas mis fuerzas matar a alguien …’ Los asistentes no se extrañaron mucho, pues era el odio quien estaba hablando y él siempre quiere matar a alguien.
Sin embargo, todos se preguntaron entre sí quién sería tan difícil de matar porque el odio los necesitaría a todos… ‘quiero que maten al AMOR…’ dijo el ODIO. Muchos sonrieron malévolamente, pues más de uno le tenía ganas… El primer voluntario fue el MAL CARÁCTER quien dijo: ‘Yo iré y les aseguro que en un año el AMOR estará muerto, provocaré tal discordia y rabia que el AMOR no lo soportará’.
Al cabo de un año se reunieron otra vez y al escuchar el reporte del MAL CARÁCTER quedaron muy decepcionados …’lo siento, lo intenté todo, pero cada vez que yo sembraba una discordia, el AMOR la superaba y salía adelante…’
Fue entonces cuando muy diligente se paró la AMBICIÓN que haciendo alarde de su poder dijo: ‘en vista que el MAL CARÁCTER fracasó, iré yo, desviaré la atención del AMOR hacia la riqueza y el poder, eso nunca lo ignorará…’
Y empezó la ambición el ataque hacia su víctima, quién, en efecto, dio cabida a la ambición de riquezas y poder, pero el AMOR luchó y salió adelante y renunció a todo deseo desbordado y triunfó de nuevo…
Furioso el ODIO por el fracaso de la AMBICIÓN, envió a los CELOS quienes, burlones y perversos intentaban toda clase de artimañas y situaciones para despistar al amor para lastimarlo con dudas y sospechas infundadas, pero el AMOR confundido lloró y pensó que no quería morir, así que, con valentía y fortaleza, se impulsó sobre ellos y los venció…
Año tras año, el ODIO envió a sus más hirientes amigos. Envió a la FRIALDAD, EGOISMO, INDIFERENCDIA, POBREZA, ENFERMEDAD, y a muchos otros mas, que fracasaron siempre porque cuando el AMOR se sentía desfallecer, tomaba de nuevo fuerzas y todo lo supera … El ODIO, convencido de que el AMOR era invencible dijo: ‘Nada que hacer, el AMOR lo ha soportado todo, llevamos muchos años insistiendo y no lo logramos’.
De pronto, de un rincón del salón se levantó un sentimiento poco conocido, vestía de negro y con un sombrero gigante que cubría todo su rostro y no lo dejaba ver, su aspecto era fúnebre como el de la muerte… ‘yo mataré el AMOR, lo mataré’ dijo con seguridad, y todos se preguntaban quién era ese que pretendía hacer solo lo que ninguno había podido hacer… el ODIO le dijo: ve y hazlo…
Tan solo había pasado algún tiempo, cuando el ODIO volvió a llamar a todos los malos sentimientos, para decirles que después de mucho esperar, por fin el AMOR había muerto. Todos estaban felices, pero sorprendidos, entonces, el sentimiento del sombrero negro habló: ‘ahí les entrego al AMOR totalmente muerto y destrozado’, y sin decir más, se marchó.
Espera, dijo el ODIO -en tan poco tiempo lo eliminaste por completo, lo desesperaste, y no hizo el menor esfuerzo para vivir. ¿Quién eres? El sentimiento levantó por primera vez su horrible rostro y dijo: soy ‘LA RUTINA’.
(https://www.tubreveespacio.com)
En definitiva, siguiendo la moraleja de esa fábula, y aplicándola a nuestra situación en plena campaña electoral, regida por unos políticos mediocres y ambiciosos, me parece que sería interesante que no nos dejásemos vencer por la rutina, siguiendo presos, esclavizados, por la dialéctica diabólica en la que nos quieren mantener. Así, si vencemos la rutina y actuamos como personas adultas y críticas, nuestro voto, sea el que sea, válido, blanco, nulo, etc., nos hará sentirnos mínimamente satisfechos. En caso contrario, seguiremos contrariados y frustrados.