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Ayer anuncié que hoy, 8 de agosto, veríamos que el carpetovetónico estado español sacaría sus peores armas contra el independentismo catalán, en especial, contra nuestro máximo y único líder, Carles Puigdemont; y así ha sido, como hemos visto por el fuerte dispositivo policial y el total blindaje del parque de la Ciutadella, donde está el Parlament, dispositivo propio para la caza del mayor terrorista mundial, así como la operación ‘jaula’ montada seguidamente y mantenida durante cuatro horas, como explico a continuación, ya que el president Carles Puigdemont ha hecho un acto que ni Harry Houdini, ni el mago Pop, hubieran podido diseñar y ejecutar.
Efectivamente, el president Carles Puigdemont ha podido llegar a la tribuna montada en el Arco de Triunfo, para que pudiera dirigir su discurso a los muchos miles de independentistas que nos habíamos concentrado. Y tras realizar un breve discurso, ha ‘desaparecido’ gracias a una estrategia de distracción que nos ha ido canalizando hacia una de las puertas del recinto del parque.
Para mi ha sido una gran sorpresa que pudiera llegar hasta este lugar, yo estaba convencido de que lo detendrían mucho antes, pero siempre me equivoco, pero mejor así.
En ese primer momento, se ha rumoreado que la policía lo dejarían dirigirse al recinto blindado, y lo detendrían una vez traspasado el control policial. Pero, Carles Puigdemont ya no ha llegado, pues, como he dicho, ha hecho de ‘Mago Popdemont’, como rápidamente ha circulado por las redes sociales, es decir, ha realizado un acto de escapismo propio del gran Harry Houdini (1874 – 1926)
Según parece, han detenido a unos mossos d’esquadra (policía catalana) y un bombero, acusados de haber facilitado el vehículo y la huida, así como que están deteniendo a otras personas que han colaborado con el president, incluso se ha rumoreado, sobre la detención del exdiputado de Junts, Jordi Turull, pero este caso no ha sido confirmado, si bien Junts acaba de pedir la suspensión del pleno, por haber sido citado Turull para efectuar la pertinente declaración en la comisaría policial.
En las próximas horas veremos cómo va evolucionando todo, pues ahora es muy confuso; como lo es que, tras cuatro horas de haber montado la operación ‘jaula’ y colapsar todo el tránsito en Barcelona, e incluso en las carreteras y frontera, los mossos hayan desmontado esa gran operación, comentándose que debido al malestar en el interior de ese cuerpo policial.
Pero detener a ciudadanos que hayan podido ayudar a Carles Puigdemont, un diputado electo, que debería estar amparado por la ley de la amnistía, en un estado democrático no sería un delito de obstrucción de la justicia, ya que los delincuentes son los jueces que incumplen las leyes aprobadas por el congreso de diputados.
Y hemos visto, por lo tanto, que tristemente, todos los medios unionistas españoles han dado por correcto, que el estado concentrase ese gran esfuerzo policial para detener al que consideran su enemigo número uno, el president Carles Puigdemont, un diputado electo, que se puede mover libremente por toda la UE, excepto por lo que los españolistas consideran su ‘piel de toro’. Y es que, para el poder judicial, Puigdemont, desde el 2017, es la pieza de ‘caza mayor’, y para ello, no escatiman esfuerzos, contando, asimismo, con la policía catalana (mossos d’esquadra) que se ha visto obligada (con mayor o menor pesar) a participar en esa vergonzosa cacería.
Si todo este esfuerzo lo utilizasen para eliminar las mafias de la droga y otros delincuentes, este estado presentaría una mejor convivencia.
Pero está claro que el orden de prioridades es muy otro, como, desgraciadamente pudimos ver con el luctuoso atentado del 17 de agosto del 2017, efectuado por unos islamistas radicalizados, que ni el PP ni el PSOE han querido investigar a fondo, pues el CNI (centro nacional de ‘inteligencia’) aparentemente estaba involucrado, ya que tenía como confidente el imam de Ripoll, que radicalizó a esos jóvenes que acabaron siendo los causantes del acto terrorista; pero, claro, en el 2017 ya estaban centrados, exclusivamente, en perseguir al movimiento independentista, resultando una PENOSA Y DELICTIVA actuación policial por su ineficaz capacidad previsora de dicho atentado.
Y claro, visto el ‘fracaso’ de la detención de Carles Puigdemont esta mañana, ahora todos los partidos políticos unionistas españoles y medios afines, están sacando su bilis más negra, acusando a los mossos d’esquadra, por su ‘ineficaz’ gestión; y, claro, olvidando que su CNI (centro nacional de ‘inteligencia’) ni su policía nacional ni su guardia ‘civil’ lo han podido detectar hasta el momento de subir al estrado; es decir, repitiendo su mismo fracaso mostrado para detectar las urnas y las papeletas en el 2017.
Y todos estos unionistas siguen mostrando su más patológico morbo, sobre la próxima detención de Puigdemont.
Está claro que Carles Puigdemont no ha podido estar presente en el plenario de la investidura del represor Salvador Illa; y el president del parlament, Josep Rull no ha suspendido la sesión, ya que Puigdemont no ha sido detenido.
Esta sesión de investidura ahora ha sido interrumpida, para que los diputados vayan a comer, y se ha reanudado a las 16.00 h., pero Junts ha pedido la suspensión, por la amenaza de detención de Turull, y la mesa del parlament está debatiendo la suspensión o no; y, a última hora de la tarde, está previsto que se proceda a la votación de la investidura. De momento, Carles Puigdemont no ha delegado su voto, por lo que todo son especulaciones, si bien podría votar telemáticamente. Junts había pedido la suspensión del pleno, al no haber podido acceder Carles Puigdemont; y ahora, por la posible citación de Turull, secretario de Junts, para que declare en sede policial.
Ya veremos el final, el desenlace de esta emocionante película, que yo espero que tenga un final feliz, y en breve lo veamos reaparecer fuera del estado español.
Pero hemos visto las verdaderas raíces del estado represor y de su constitución española, basada en ‘El Malleus Maleficarum o Martillo de las Brujas’:
‘Tratado publicado en 1486 por Heinrich Kramer y Jacob Sprenger, dos monjes dominicos inquisidores a los que el Papa Inocencio VIII concedió la bula ‘Sumis desiderantes affectibus’ a través de un decreto papal del 5 de diciembre de 1484, en el que se reconoció la existencia de las brujas, derogando así el ‘Canon Episcopi’ de 906, donde la Iglesia sostenía que creer en brujas era una herejía.
El éxito del libro fue arrollador. Pasó a convertirse en el manual de todo buen inquisidor durante el Renacimiento y fue el mayor best-seller durante los siglos XVI y XVII, sólo superado por la Biblia.
En realidad, más que tratarse de las brujas, se refería a todas las mujeres, en general, todas sospechosas y potenciales brujas. Veamos un párrafo:
‘Qué otra cosa es la mujer sino la enemiga de la amistad, la pena ineludible, el mal necesario, la tentación natural, la calamidad deseable, el peligro doméstico, el perjuicio delectable, el mal de la naturaleza pintado con buen color’. Según los autores, la naturaleza inferior de la mujer la hacía más propensa a ser tentada por el diablo, de ahí que la gran mayoría de los actos de brujería estén cometidos por estos seres de ‘lengua mentirosa y ligera’, a los que no se puede dejar solos dado que ‘una mujer que piensa sola, piensa mal’ y además ‘es un defecto natural en ellas no querer ser gobernadas’.
Las mujeres son seres malformados: ‘cabe destacar que hay un defecto intrínseco en la formación de la primera mujer, dado que fue hecha de una costilla doblada, es decir la costilla del pecho, que se curva en una dirección distinta a la del hombre. Y así, con esta malformación, es un animal imperfecto, siempre traiciona’.
Según el Malleus Maleficarum toda la brujería proviene del apetito carnal que en las mujeres es insaciable. ‘La superstición se encuentra ante todo en las mujeres y la mayor cantidad de los brujos son del sexo frágil porque las mujeres son más crédulas, más propensas a la malignidad y embusteras por naturaleza. El pecado que nació de la mujer destruye el alma al despojarla de la gracia y todos los reinos del mundo han sido derribados por mujeres. Una mujer es hermosa en apariencia, contamina al tacto y es mortífero vivir con ella. Existen tres vicios generales que tienen un especial dominio entre las mujeres: la infidelidad, la ambición y la lujuria’,
Uno de los delitos de que se acusa a las brujas era que podían causar la impotencia en el hombre. El hecho que un hombre al estar con una mujer tuviera ese problema, era una prueba de que ella era una bruja.
Fue un manual indispensable y la autoridad final para la Inquisición, para jueces y magistrados, para sacerdotes tanto católicos como protestantes, a lo largo de los tres siglos siguientes a su publicación, en la lucha contra la brujería en Europa.
Con el Malleus Maleficarum es la primera vez en la historia que aparecen integrados en un mismo escrito la criminología (el origen del mal), con el derecho penal (las manifestaciones del mal) y la criminalística (los datos necesarios para descubrir el mal en la práctica)
Es la primera vez en la historia que aparece una forma sistematizada una teoría sobre el origen del crimen, es decir, una etiología del crimen. La metodología para obtener pruebas de la culpabilidad (todas, incluyendo la tortura) era tan perversa que no había manera que una mujer pudiera probar su inocencia y sobrevivir. Uno de los métodos consistía en sumergir a la mujer en un río maniatada y con una piedra pesada adosada a su cuerpo. Si se hundía, era inocente. Si flotaba, culpable. Como había que esperar un tiempo prudencial para ver si afloraba a la superficie, cuando se extraía el cuerpo la mujer ya estaba ahogada.
La Inquisición usó ese manual durante toda su existencia y en todos los lugares donde tuvo vigencia, incluyendo las colonias americanas, donde se registran juicios hasta el siglo XIX.
Las inquisiciones española y portuguesa fueron primero clausuradas por un decreto de Napoleón en 1808, durante la invasión napoleónica, aunque esta determinación no tuvo efecto sobre las autoridades coloniales. En Lima finalizó en 1820.
En el Museo de la Inquisición de Lima se puede ver una máscara usada como castigo para las mujeres que hablan mucho. En la parte de la boca hay una puerta con un pincho filoso que al cerrarse se introduce en la boca. Si la mujer mueve la lengua, se corta.
¿Cuál es el impacto de la inquisición en el derecho y en nuestra cultura? Tengamos en cuenta que estuvo vigente, no durante algunos años en la edad media, sino durante 600 años y no sólo en Europa sino también en todo el territorio americano colonizado por España y Portugal’
(https://search.app/3wMJ31TTUWGp6mDCA)
Como es sabido, la Inquisición española, o Santo Oficio, fue creado por los Reyes Católicos en 1478, con el fin de mantener la ortodoxia católica en sus reinos.
Y fue abolida en 1820, durante el Trienio Liberal, si bien el borbón Fernando VII (el deseado o el felón, según los bandos) la restableció, las prácticas de tortura acabaron en 1834.
Los tribunales, formados por inquisidores, la gran mayoría clérigos seculares con formación jurídica, además de otros funcionarios como fiscales, secretarios, alguaciles, notarios, etc.; y se basaban en la información de los llamados ‘familiares’, que fomentaban la delación, recibían testificaciones y retenían a los acusados; y a pesar de ser odiados y temidos por la población, el hecho de estar exentos de determinadas contribuciones fiscales, hizo que su número aumentase de forma notable, podían ir armados, tenían el privilegio de jurisdicción y era una demostración de limpieza de sangre.
El período de Tomás de Torquemada (1420 – 1498), nombrado por los Reyes Católicos, como Inquisidor General de Castilla en 1483, fue el más violento (torturas y quemas en la hoguera)
(fuente Wikipedia)
Pues bien, en la casposa y carpetovetónica España, sigue habiendo esa cultura inquisidora, tenemos torquemadas como Marchena, Llarena, etc.) que siguen promulgando actos de fe contra los independentistas, considerados como las mujeres en los siglos precedentes, de acuerdo con el texto del Malleus Maleficarum, pues consideran que no se puede confiar en los independentistas, por más fe que se tenga, ya que su ‘razón’ y su ‘experiencia’ les ratifica en la necesidad y conveniencia de seguir reprimiéndonos, como empezó a hacerlo Felipe V, el primer borbón, en 1714, y sigue haciendo su descendiente Felipe VI.
En definitiva, ya veremos cómo acaba todo, pero me parece claro que el ‘dies irae’ (el día de la ira) y todo el morbo será largo y comportará consecuencias, pues el estado español, y todos sus poderes (político, judicial, policial, mediático, etc.) se han sentido ofendidos en su propio orgullo carpetovetónico, y eso nos lo harán pagar con creces, como estamos muy acostumbrados desde 1714.
Pido perdón al lector, por este improvisado escrito, que he tenido que ir modificando sobre la marcha, ya que, como he dicho, la situación es complicada y confusa.Y mi único deseo es poder ver al president Carles Puigdemont fuera del estado español, y LIBRE en un estado democrático y que no actúa de forma tan desproporcionada como la que estamos viendo de nuevo hoy en la represora España
