• Convocamos a la unidad nacional, anteponiendo los intereses de México a los individuales, para lograr que con las elecciones de 2021 podamos redirigir el rumbo del país: Marko Cortés.
• López Obrador incumplió sus promesas de lograr un crecimiento económico del 4 por ciento anual, de mejorar la seguridad pública, de crear 2 millones de empleos formales, de contar con un sistema de salud similar al de Canadá o Dinamarca.
• En solo dos años, ha llevado a México a retrocesos sin precedentes y una situación de crisis simultáneas en los rubros más importantes para las y los mexicanos.
Esta semana se cumplen dos años de un gobierno que no solo no ha cumplido su promesa de pacificar al país y de mejorar las condiciones de vida de las y los mexicanos, sino que ha llevado a México a retrocesos sin precedentes en materia económica y de salud, seguridad, cohesión social y estabilidad institucional.
Así lo afirmó el Presidente de Acción Nacional, Marko Cortés Mendoza, quien convocó a las y los mexicanos a trabajar unidos y anteponer los intereses de México a los individuales, con el objetivo de lograr que a partir de las elecciones de 2021 podamos redirigir el rumbo del país, a través de una nueva mayoría opositora en la Cámara de Diputados.
“Estamos padeciendo las consecuencias de un gobierno incompetente y autoritario, que ha empeorado las condiciones de vida de las y los mexicanos. Llegamos a dos años de desgobierno donde el desastre es colosal y los retrocesos no tienen precedentes. Tan es así que México se encuentra inmerso, simultáneamente, en varias crisis: económica, de salud, seguridad y social”, sostuvo.
En materia económica, explicó Cortés Mendoza, según el reciente reporte del INEGI el PIB presenta una caída del 8.6 por ciento; un millón de negocios formales e informales cerraron en este año; Banxico estima que 2020 cerrará con 850 mil empleos formales perdidos; 33 millones de personas están desempleadas o subempleadas; y, de acuerdo con el Coneval, más de 10 millones de mexicanos pasarán del nivel de pobreza a pobreza extrema.
Así, la promesa de López Obrador hecha en abril pasado de crear 2 millones de empleos formales en nueve meses también quedó incumplida, debido, en gran medida, a que se negó a autorizar leyes y programas para apoyar la economía de las familias y las Mipymes durante la pandemia, como sí lo hicieron otras naciones.
En salud, dijo el Presidente del PAN, el mal manejo de la pandemia del Covid-19 ha provocado, oficialmente, la muerte de más de 105 mil personas, con lo que México es el cuarto país con más fallecimientos por este mal a nivel mundial, además de tener una tasa de letalidad cuatro veces mayor al promedio mundial (9.7 contra 2.4), con la agravante de que el número real de muertos puede ser por lo menos del doble según los científicos.
Nuevamente, López Obrador falló en su promesa de tener en sólo 2 años un sistema de salud de primera, similar al de Canadá o Dinamarca, porque en lugar de ir para adelante dio pasos hacia atrás en el sistema público de salud, al eliminar el Seguro Popular que daba servicios a más de 50 millones de personas y dilapidando en 2020, 40 mil millones de pesos del anterior Fondo de Protección de Gastos Catastróficos para enfermedades costosas.
Además, la falta de tratamientos médicos para niñas y niños enfermos de cáncer y de vacunas para la población infantil son ejemplos crueles de este desabasto, por lo cual, en los últimos meses fallecieron más de mil 600 niñas y niños por la escasez y falta de tratamientos contra el cáncer.
Cortés Mendoza dijo que el gobierno de López Obrador es en el que se ha presentado más violencia de la historia reciente de México, con más de 56 mil delitos de homicidios dolosos en 23 meses de gobierno, contra 33 mil en el gobierno de Enrique Peña Nieto en el mismo periodo, por lo que su sexenio podría acabar con más de 175 mil homicidios dolosos.
En cuanto a la crisis social, el dirigente nacional aseguró que López Obrador ha usado la política social para conservar y ampliar clientelas políticas con miras a los procesos electorales, donde los operadores son los “súperdelegados”, quienes han actuado sin ningún control para mantener adeptos y ganar votos.
En cuanto a la vida institucional del país, el Presidente del PAN afirmó que el signo político de López Obrador es el autoritarismo. “Por dos años ha enfilado sus ataques a partidos políticos de oposición, particularmente a Acción Nacional, a periodistas, medios de comunicación, sociedad civil, órganos autónomos y Poder Judicial”.
Lejos de buscar la cohesión social, indicó, se ha encargado de confrontar a la sociedad. “El Presidente ha emprendido una estrategia de división entre los mexicanos, que está exacerbando las diferencias y los resentimientos sociales. Lejos de abonar a la unidad nacional, impulsa el encono y la división entre hermanos”, concluyó.