Experto en mercados internacionales, Robert Schramm-Fuchs, gestor de carteras de Janus Henderson Investors habla sobre los resultados presentados en la reunión del BEC
Ciudad de México, 17 de marzo de 2023.- La inflación de la zona euro se produjo justo como los datos preliminares habían sugerido – 0,8% mes tras mes, y 5,6% año tras año para la inflación subyacente. Por lo tanto, la inflación subyacente a la energía en Europa está funcionando en gran medida al mismo nivel que en Estados Unidos, pero con un diferencial de tipos de interés amplio.
El pasado jueves 16 de marzo, el Banco Central Europeo (BCE) subió las tasas de interés en 50 puntos básicos, y se espera que la Reserva Federal de EE.UU. aumente en 25 puntos básicos la próxima semana, es decir, cerrando un poco el diferencial de tasa.
Considerando la reciente agitación de los mercados financieros con la crisis bancaria en ambos lados del Atlántico, el alza de 50 puntos básicos del BCE fue un paso audaz, y llevado a cabo según las expectativas originales para evitar dar la impresión equivocada de peligros más profundos que acechan en el sistema bancario europeo.
Es importante destacar que el BCE eliminó las orientaciones avanzadas e introdujo un nuevo lenguaje que indica que está dispuesto a intervenir para proteger la estabilidad financiera si es necesario.
El banco también bajó sus proyecciones de inflación para este año y hasta 2025, ahora espera 5,3% para 2023 (fue 6,3% en el último punto de previsión en diciembre) y 2,9% para 2024 (fue 3,4%).
Estamos de acuerdo con las perspectivas de que las presiones inflacionarias se enfríen ligeramente en los próximos meses, pero creemos que en el transcurso de 2023 y 2024, la inflación subyacente seguirá siendo adherente y algo superior a la prevista por los bancos centrales.
El pronóstico de inflación para 2023 del BCE parece realista, pero las perspectivas para 2024 pueden resultar algo optimistas. Sin embargo, dado que la política monetaria funciona con un lapso de tiempo de hasta un año, seguimos esperando una pausa y una meseta del banco central en el endurecimiento monetario durante 2023 para evaluar los datos económicos entrantes.
Reiteramos que un giro del banco central a tasas significativamente más bajas que los precios actuales del mercado implica que sigue siendo poco realista en nuestra opinión.
La pausa y planicie serán una buena señal de riesgo para los mercados de valores, pero serán las acciones de valor y las primeras acciones cíclicas las que superen el rendimiento, mientras que las acciones de alta valoración, en nuestra opinión, reanudarán su bajo rendimiento.