Ayer fue noticia el Permagel, por motivo doble:
· por su deshielo debido al calentamiento global, y
· por el premio de Òmnium Cultural de este año a Eva Baltasar.
En primer lugar, haré una referencia a estas dos noticias, para, seguidamente, hacer un paralelismo con la política española / catalana.
Calentamiento global del planeta.
‘En geología, permafrost (en inglés, de ‘perma’, permanente y ‘frost’, helado) son aquellas capas de suelo, roca o tierra que permanecen por debajo del punto de congelación del agua durante, por lo menos, dos años seguidos.
(…)
En español: permegel, permahielo o suelo permanentemente congelado o helado’.
(Wikipedia)
‘El deshielo del permafrost acelera el calentamiento global (…) está originando la emisión a la atmósfera de grandes cantidades de gases de efecto invernadero. (…) si se produjese el deshielo total del permafrost, la atmósfera acumularía cinco veces más carbonoque el que tiene en la actualidad’
‘Los peligros de las enfermedades ocultas bajo el hielo durante miles de años que están despertando.
A lo largo de la historia, los seres humanos han coexistido con bacterias y virus.
Hemos tenido antibióticos durante casi un siglo y las bacterias han respondido mejorando su resistencia a estos. La batalla es interminable.
Pero ¿qué pasaría si de repente nos exponemos a bacterias y virus mortales que han estado ‘dormidos’ durante miles de años, o que nunca hemos conocido?
El cambio climático está derritiendo los suelos del permafrost -la capa de suelo permanentemente congelada en las regiones polares-, liberando virus y bacterias antiguos que han permanecido latentes y vuelven a la vida.
En agosto de 2016, en un remoto rincón de la tundra siberiana llamada Península de Yamal, en el Círculo Polar Ártico, un niño de 12 años murió y al menos veinte personas fueron hospitalizadas después de haber sido infectadas por ántrax (…) debido a que hace más de 75 años murió un reno infectado con la bacteria y su carcasa congelada quedó atrapada bajo una capa de permafrost. Allí permaneció hasta que una ola de calor en el verano de 2016, la descongeló, liberando el ántrax en el agua y suelos cercanos, y luego en la cadena de suministros de alimentos. Más de 2000 renos se infectaron (…)
(…)
Bajo circunstancias normales, las capas superficiales, de unos 50 cm de profundidad, se funden cada verano. Pero ahora el calentamiento global está exponiendo gradualmente las capas más antiguas del permafrost.
(…)
El permafrost es muy buen conservante de microbios y virus, porque es frío, no contiene oxígeno y es oscuro.
(…)
Los científicos han descubierto fragmentos de ARN (ácido ribonucleico) del virus de la gripe española de 1918 en cadáveres enterrados en fosas comunes en la tundra de Alaska. La viruela y la peste bubónica también están, probablemente, enterradas en Siberia.
(…)
En la década de 1890 hubo una importante epidemia de viruela en Siberia y una ciudad perdió hasta el 40% de su población. Los cadáveres fueron sepultados bajo la capa superior de permafrost en las riberas del río Kolyma. 120 años después, los desbordamientos del Kolyma han comenzado a erosionar las riberas, y el derretimiento del permafrost ha acelerado este proceso de erosión.
En un estudio de 2014, un equipo liderado por Claverie revivió dos virus que habían quedado atrapados en el permafrost siberiano durante 30.000 años.
Conocidos como Pithovirus sibericum y Mollivirus sibericum, ambos son ‘virus gigantes’, porque a diferencia de la mayoría, son tan grandes que pueden ser vistos bajo un microscopio regular. Fueron descubiertos a unos 30 metros bajo tierra, en la tundra costera.
Una vez revividos, se convirtieron rápidamente en infecciosos.
Afortunadamente para nosotros, estos virus en particular sólo infectan las amebas unicelulares.
Sin embargo, el estudio sugiere que otros, que realmente podrían infectar a los seres humanos, podrían ser revividos de la misma manera.
También por la acción del hombre (…) como resultado de la explotación industrial, incluyendo la minería, el oro, minerales, las perforaciones de petróleo y gas natural (…) podrían afectar a zonas más profundas (…) y si todavía hay allí virus viables, esto podría significar un desastre, (…) pues, los virus de los primeros seres humanos en poblar el Ártico podrían resurgir, e incluso podríamos ver virus de especies de homínidos como Neandertales y Denisovanos.
(…)
El equipo de Claverie también ha encontrado algunas secuencias de ADN que parecen venir de virus, incluyendo el herpes.
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Y parece que los patógenos aislados de los seres vivos humanos también surgirán de otros lugares, no sólo del permafrost. En febrero de 2017, científicos de la NASA anunciaron que habían encontrado microbios de 10.000 a 50.000 años de antigüedad dentro de cristales en una mina mexicana, en Naica. (…)
(Jasmins Fox-Skelly, BBC Earth, 31.05.2017)
Eva Baltasar
Tras tres años en prisión, el presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, ayer pudo entregar, personalmente, el premio a la vencedora del concurso literario, Eva Baltasar, por su novela ‘Boulder’.
El título de esta novela se refiere a una roca, y también (búlder) a una modalidad de escalada en bloques de roca o pequeñas paredes.
El argumento de la novela (Club Editor, Barcelona, marzo 2020) trata de una protagonista, atraída por la soledad como por un imán. Se gana la vida de cocinera en un buque -la situación perfecta: una cabina, el océano, muchas horas para encarar el vacío y algún puerto donde conocer mujeres…
(fuente: Contracubierta novela)
Pero el interés en citar este premio es que la anterior y primera novela de esta joven poeta (Barcelona, 1978), se tituló ‘Permagel’ (Club Editor, Barcelona, marzo 2018). Hasta ese momento únicamente había publicado poemarios: Laia, Atàviques feres, etc.
Ambas novelas son unos pequeños libritos: Permagel, 187 páginas y Boulder, 145; pues como dijo la autora, prefiere explicar las cosas de la forma más breve posible, por eso hace meses que está puliendo su futura novela, Mamut, que se editará en abril próximo.
En Permagel, la autora hace un paralelismo entre:
La parte de la tierra que no se deshiela nunca, y la membrana que reviste a la heroína de la novela, una manera de preservar la parte más frágil que hay dentro de una persona en formación. El mundo exterior amenaza, es preciso atreverse a salir de la prisión familiar, desactivar a la madre obsesa de la salud, a la hermana obsesa por la felicidad…
(fuente: Contracubierta novela)
Política española y catalana
Sabemos que el estado español quiere mantenernos en el autonomismo a la fuerza, ya que su permagel es la unidad de su España. Y no cejan en recentralizar funciones que desde el inicio del estado autonómico (Estatut catalán de 1979) están transferidas.
Por ejemplo, ayer, a iniciativa de Podemos (si, de un partido que ya forma parte de la casta que querían derrocar, pero que unas simples butacas, les ha hecho perder sus principios) han centralizado hasta el servicio de bomberos, y todo con la excusa del estado de alarma por la pandemia.
Quieren descafeinar un autonomismo como el que se implantó con la constitución en 1978, es decir, ‘un café para todos’, pero con notables diferencias cualitativas a favor del concierto vasco y navarro.
El estado profundo español se fundamenta en su ‘boulder (búlder)’, en su roca magmática, que los unionistas consideran que tiene su inicio en el origen de los tiempos, pero sabemos que, en realidad, se remonta a la llegada de los Borbones, con Felipe V, nacido en Versalles (Francia) en 1683; y llegado a la península Ibérica por deseo de su abuelo, Luís XIV de Francia.
Y ese régimen borbónico, restaurado por el dictador y asesino Francisco Franco, permitió y permite perpetuar un estado con unas cloacas putrefactas, como sabemos y hemos sufrido y seguimos sufriendo los catalanes, especialmente los independentistas.
Y vemos que esa crosta borbónico-franquista, sigue impertérrita, con su ‘impasible ademán’ falangista, ya que la fiscalía, siempre afina lo preciso, tanto en tiempos de Mariano Rajoy, como con Pedro Sánchez, pues siguen las consignas oficiales: ‘palo al independentista’, por eso ahora han recurrido ante el tribunal supremo la sentencia de la audiencia provincial de Barcelona, liberando sin cargos a la activista Tamara Carrasco y García.
Y todo por pura venganza, no se resignan, quieren castigos ejemplares, ya sea con los líderes políticos y sociales, como sabemos, con activistas o con los raperos, como: César Strawberry, El colectivo La Insurgencia, de Saúl Jorge ‘Shahid’, Ayax y Prok, Valtónyc, Adam Molotov, Pablo Hasél, Cíniko…
Y esa venganza la veremos, también, pasadas las elecciones catalanas del próximo domingo 14, pues, estoy convencido que el día siguiente, el lunes 15, la fiscalía pedirá la supresión del tercer grado a los presos políticos. Ese es su estilo. No lo han hecho estos días, mal que les pesa, pues seguro que han hecho sus cálculos políticos y saben que, si toman esa medida ahora, motivarían más el voto independentista.
Esa es su INjusticia, pura vergüenza.
Por nuestra parte, los independentistas también tenemos nuestro permagel, es decir, el deseo de tener nuestra futura república catalana.
En octubre del 2017, tras el referéndum del día 1, y la huelga general del día 3, estuvimos casi a punto de conseguirla, pero las amenazas, y el riesgo de que pudieran haber muertos, ya que el estado español estaba contra las cuerdas y actuaba como los pollos sin cabeza (bueno, eso no es una excepción, en ese estado), hizo que Carles Puigdemont no diera el paso definitivo, como sabemos.
Y desde entonces, se han ido multiplicando los actos de venganza, en todos los terrenos, en el judicial, policial, económico, político, etc.; todos se sintieron llamados al grito de Felipe VI, que hizo como su antepasado Felipe V, intentar abolir las instituciones catalanas, dejarlas sin contenido.
Y, como está pasando con el permafrost, el permagel ártico, hemos visto que nuestro referéndum provocó un calentamiento en las pocas neuronas de los unionistas, y así como en Siberia salen virus y bacterias que estaban congeladas, con el consiguiente riesgo, aquí también se han calentado los nostálgicos, por eso se han atrevido a colgar sus banderas en sus balcones, a manifestarse más que nunca, a venir a insultarnos a los manifestantes del corte diario de la avenida Meridiana de Barcelona. Anteayer un ‘personaje’ nos gritó que ‘si volviera Franco, ya nos daría, ya’; ese es su nivel.
Y lo triste es que esos virus y bacterias que estaban aparentemente ‘adormiladas’, están saliendo a la luz. Y eso ya es imparable, pues según los sondeos, Vox, el partido de extrema derecha entrará en el Parlament Y, claro, el efecto en los partidos políticos unionistas es evidente, irse hacia la derecha, rivalizar a ver quien tiene la bandera española más grande, a ver quien tiene el ADN ideológico más franquista.
Ante esta situación, los independentistas deberíamos ir unidos, ya que el objetivo final es el mismo; pero, por desgracia, en esta campaña electoral están aflorando los intereses partidistas, la rivalidad, para ver quién es más Caín que el otro, pero poniendo cara de Abel.
Por eso me parece muy interesante reproducir el siguiente poema de Pere Quart (Joan Oliver i Sallarès, 1899-1986), que estos días corre por las redes sociales, y que he traducido para este escrito:
‘Pere Quart entra en campaña
Poneos la Autonomía (?)
donde os quepa, insensatos,
chupaculos de la Moncloa,
lacayos enmadrileñados,
que habéis perdido la razón y la memoria
y, posiblemente bajo un embrujo,
os pasáis nuestra Historia,
burdamente, por la entrepierna’.
Fragmento de un poema de 1979.
Creo que este poema, Pere Quart lo seguiría viendo perfectamente actual, y lo escribiría tal cual, viendo a los partidos unionistas y más, todavía, a los partidos independentistas (ERC y PedeCat), que ahora se han convertido al pactismo.
Ya solo nos quedan unos pocos días para las elecciones del 14, y si en esos comicios ganan los unionistas, o los pactistas, será una verdadera ducha de permagel, de permafrost, con todos sus virus y bacgterias, y nuestros sueños quedarán ultracongelados. Será nuestro desastre. Por eso sólo nos queda movilizarnos y votar a Carles Puigdemont / Laura Borràs, y … esperar acontecimientos.