· Aumentar el consumo de líquidos y evitar bebidas azucaradas, ayudan a prevenirla
Durante esta época estacional se tienen condiciones ambientales con temperaturas que suelen ser elevadas, por lo que es de vital importancia detectar aquellas situaciones que alteren la salud; una de las más comunes es el golpe de calor.
El médico adscrito a la Jefatura de Servicios de Prestaciones Médicas, de la oficina de representación regional Estado de México Poniente del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Ángel Alberto Bernal Gutiérrez, explicó que el golpe de calor es un cuadro clínico que se da por el aumento súbito en la temperatura corporal, y lleva como consecuencia la afectación del mecanismo de autorregulación del calor cuando es mayor a los 40 grados centígrados.
Algunos síntomas previos que se pueden desarrollar son: contracturas musculares, confusión mental, fatiga y cansancio excesivo. Mientras que al manifestarse, presenta aumento de la temperatura corporal (arriba de los 40 grados), alteraciones neurológicas, somnolencia y fatiga, que de no tratarse pueden derivar incluso en estado de coma y crisis convulsivas, advirtió.
Durante la fase de golpe de calor no existe sudoración, la piel es seca y se percibe muy caliente, se presentan, además, dolores musculares y alteración en la frecuencia cardiaca a más de 130 latidos por minuto.
El funcionario precisó que existen dos poblaciones de mayor riesgo: los niños, debido a la inmadurez de su sistema nervioso central, lo que puede ocasionar fallas en la termorregulación; y los adultos mayores, debido a que su sistema neurológico está en una fase de envejecimiento y no tiene la misma capacidad de respuesta.
Enfatizó que si se encuentra en lugares con temperatura ambiente superior a los 40 grados, es importante aumentar el consumo de líquidos, así como evitar bebidas que contengan azúcar, cafeína o bebidas alcohólicas, ya que provocan mayor pérdida de líquidos a través de la orina.
Bernal Gutiérrez recomendó buscar lugares frescos aun dentro de los hogares, así como acudir a un servicio médico cuando se han presentado los síntomas antes mencionados, para evitar serias complicaciones a la salud.