Tras más de cuatro meses sin ceremonias ni limosnas, la Iglesia Católica mexicana celebró este domingo la primera misa en auto en la capital de Morelos, estado del centro del país.
Los feligreses estacionaron sus vehículos para presenciar la ceremonia tras meses sin este ritual por la pandemia de COVID-19, que acumula 338.913 casos y 38.888 muertos confirmados en México, cuyo Gobierno impide eventos masivos en espacios cerrados.