Aún permanecen secuestrados en la Franja de Gaza 101 personas que desde el 7 de octubre viven con hambre, agresiones físicas y sexuales, bajo terror psicológico, en condiciones insalubres y lejos de casa.
A un año del terrible ataque que ejecutó la organización terrorista Hamás, en memoria y honor de las personas asesinadas y aquellas que permanecen secuestradas en la Franja de Gaza, la Embajada de Israel en México realizó una ceremonia solemne para conmemorar esta fecha que cambió para siempre la vida de Israel.
El sábado 7 de octubre de 2023 miles de terroristas se infiltraron al sur del territorio israelí y avanzaron hacia los centros poblacionales y un festival musical que se realizaba cerca de Gaza, disparando contra toda persona que encontraban en su camino, al tiempo que centenares de cohetes eran lanzados desde la Franja.
La masacre ocurrida hace un año dejó 1,200 personas de todas las edades asesinadas, alrededor de 2,700 heridos de diversa gravedad y más de 250 secuestrados y llevados a los túneles de Hamás. Durante la ceremonia encabezada por la Embajadora de Israel en México, Einat Kranz Neiger, se encendió una vela honrando a cada una de éstas.
“Hoy se cumple un año desde que la tierra tembló, desde que lo peor de la brutalidad y el odio humano destrozaron nuestra sensación de seguridad y cambiaron nuestro mundo para siempre. Un año desde que nuestras mujeres, nuestros hijos, nuestros ancianos, fueron perseguidos en sus camas, quemados, decapitados y fusilados. Un año desde que mujeres y hombres sufrieron una brutal violencia sexual. Un año desde que cientos de personas inocentes fueron brutalmente arrastrados al cautiverio, vivos y muertos”, sentenció la diplomática israelí.
La Embajadora Einat Kranz Neiger recordó que entre las víctimas del ataque del 7 de octubre hay dos mexicanos, “Orión Hernández, un joven amante de la música y la paz, quien fue secuestrado del festival Nova y asesinado por Hamás; e Ilana Gritzewsky, secuestrada de su hogar en el kibutz Nir Oz, y liberada después de 55 días”, quien todavía espera que su pareja, Matan Zangauker, regrese a casa.
La misma Ilana Gritzewsky grabó un mensaje que fue proyectado, donde reconocía que el ataque de Hamás cambió su vida al ser secuestrada junto a su novio Matan y lanzó un llamado a no olvidar.
“Este ataque no fue sólo contra Israel, fue contra la humanidad, nos arrebataron la paz, el sentido de seguridad, a nuestros seres queridos. Hoy les pido que no olviden, no podemos dejar que los secuestrados queden en el olvido, ellos siguen esperando ser rescatados, esperando volver a casa. Les pido que no se queden en silencio, no es sólo la lucha de Israel, es la lucha de la humanidad entera”, señaló.
Embajada de Israel en México https://embassies.gov.il/mexico-city
En la ceremonia participó el hermano de Ilana, Jaim Gritzewsky, quien afirmó representar no sólo a su familia, “sino también de las otras 250 familias de secuestrados de más de 25 nacionalidades que están pasando o pasaron por lo mismo”. Mencionando que ha alzado la voz desde hace 365 días porque es lo que le corresponde, luego de lo vivido el 7 de octubre.
Reconoció que, al saber el nivel de brutalidad de los terroristas de Hamás, quienes buscan la destrucción de Israel y desean la muerte de sus habitantes, no sabía qué pedir en sus rezos, “si que mi hermana estuviese viva sufriendo, o que estuviera muerta en paz”, dijo.
Este aniversario del ataque de Hamás también es un recordatorio de una guerra que Israel no quería, pero que cualquier país democrático hubiera tenido con el objetivo de defender a su población de la barbarie y la violencia incesante. Sin dejar de mencionar que el enemigo son las fuerzas terroristas y no la población palestina en Gaza ni los civiles en el Líbano, con ellos lo que se ha deseado siempre es la paz.
Detrás del terrorismo de Hamás, está Irán, que tiene la directa responsabilidad de sus capacidades militares, que atacó directamente a Israel en abril, y una vez más el pasado martes, 1 de octubre, con 190 misiles balísticos, y que está también detrás de los constantes ataques de Hezbolá hacia el norte de Israel, de los Hutíes en Yemen en contra de Israel y de los barcos en el Mar Rojo, y de las milicias Chiitas en Siria e Iraq.
Estos ataques consisten en una amenaza al mundo entero y se debe hacer todo lo posible para no permitirle seguir arriesgando la estabilidad global.
